EC —Ese es otro escalón.
FL —Es otro escalón, pero los dos están abiertos. Estos acuerdos de capacidad productiva y de capacidad industrial le abren al Uruguay la posibilidad de mantener diálogos profundos entre los dos gobiernos y los sectores privados para identificar inversiones, para identificar áreas y sectores que pueden recibir inversiones chinas en el futuro. Y también hablaremos del tema de los servicios, para lo cual acabamos de crear un grupo de trabajo binacional.
EC —¿Qué quiere decir servicios?, ¿qué tipo de servicios podría exportar Uruguay a China?
FL —Uruguay está exportando servicios, lo está haciendo de forma muy importante a la región, a Estados Unidos…
EC —¿Por ejemplo?
FL —En software, los servicios corporativos.
AC —Corporativos, ese es el desarrollo más importante. Tenemos tres verticales que venimos potenciando: los temas de pharma y salud en general; TIC, en lo que Uruguay se destaca desde la década de los 80, y los servicios corporativos. Cuando hablamos de servicios globales, estamos hablando de plataformas de negocios que incluyen headquarters, centros de servicios compartidos, trading, innovación y desarrollo. Hoy hay empresas globales, como Tata Consulting o BASF, que han elegido Uruguay para instalarse. Con la particularidad de que esta modalidad permite la inversión de forma modular: son empresas que se instalan, ponen acá su centro de servicios compartidos, a partir de ahí un centro de innovación y desarrollo, y a medida que van ganando confianza en un país que da confianza, van creciendo. Tan interesados estamos en los temas de servicios que en el marco de esta China-LAC vamos a tener dos visitas técnicas como cierre el sábado a partir del mediodía. Una a Zonamérica, que es una de las zonas francas que se han especializado en el tema de servicios, con un pasaje por el Anteldata. Y la otra está vinculada a temas de producción agrícola y de calidad, vamos a ir a Garzón, buscando diversificar, temas de vino y demás. Estamos buscando nuevas alternativas.
De todas maneras, tengamos en cuenta la necesidad de inversión que tenemos, que el crecimiento de Uruguay está asociado a la inversión extranjera directa y que hoy, si bien son pocas –aspiramos a que haya muchas más–, hay empresas chinas que están instaladas en el país. Hace poco estaba con Liberoff en un evento en una concesionaria de automóviles, y los autos Lifan que están vendiendo a Río Grande del Sur son autos Lifan fabricados en Uruguay en el departamento de San José.
EC —Una parte importante del comercio chino se da a través del instrumento del comercio electrónico. De hecho, el comercio electrónico es uno de los capítulos específicos dentro del China-LAC. Está claro que los uruguayos nos hemos ido metiendo en ese terreno, hemos incursionado mucho en los últimos años en compras web, pero China es una potencia en esta materia.
FL —No, no es una potencia, es la potencia mundial.
EC —Pensemos en Alibabá, por ejemplo.
FL —El comercio electrónico de China es igual al comercio electrónico de los Estados Unidos y de las siguientes 16 mayores economías del mundo juntas. Es decir, Alemania, Japón y todas las demás.
EC —Muchos de nuestros oyentes conocen, están muy familiarizados con la marca Amazon, originada en Estados Unidos, compran incluso en Amazon. Alibabá es otra historia.
FL —Y existen muchas más plataformas que la embajada está trabajando, Uruguay XXI ha firmado algunos acuerdos para establecer […].
EC —[…]
AC —De hecho va a estar presente acá […], va a participar un representante de […], que es una plataforma muy importante también en China, en el panel de comercio electrónico. Tuvimos una reunión de trabajo con el embajador ya el lunes y uno de los temas a que nos comprometimos este año es a relanzar esa gran oportunidad que tenemos a partir del acuerdo con […]. Tenemos que hacer un pabellón de Uruguay, al que hay que darle contenido visual, imágenes y demás, y lograr que las empresas se adapten y coloquen sus productos, porque hay experiencias muy interesantes.
