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Entrevista central, martes 19 de setiembre: Fanny Castellanos Póveda y Gustavo González

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EC —Fanny Castellanos Póveda tiene 46 años, 26 años formó parte de las FARC, estuvo cuatro años presa, fue liberada a fines del año pasado. Y Gustavo González, expresidente de FUCVAM, es coordinador para América Latina de WeEffect, el Centro Cooperativo Sueco.

¿Cómo vienen manejando el factor vivienda en este proceso de reinserción de los exguerrilleros? ¿Qué importancia juega?

FCP —La vivienda juega un papel muy importante en nuestra reincorporación. Partimos de que hoy más de 13.000 excombatientes estamos sin vivienda. Es difícil la vivienda en el territorio colombiano, hay grandes dificultades para acceder a ella. Por eso quisimos conocer, por medio de compañeros que fueron a Colombia y de la experiencia de FUCVAM, el desarrollo que se ha tenido de la cooperativa de vivienda. Es fundamental que conozcamos esas experiencias y ver cómo lo desarrollaríamos en Colombia. Porque es parte primordial de nuestra reincorporación garantizar la vivienda.

EC —Gustavo González hace años que trabaja con WeEffect. ¿Qué es exactamente?

GG —WeEffect es una organización del cooperativismo sueco. En Suecia está muy desarrollado el cooperativismo, entonces las distintas ramas conformaron hace 50 años una organización para apoyar el desarrollo en países del Tercer Mundo. En ese mundo se trabaja en todos los continentes, y en América Latina actualmente en siete países con tres programas. Un programa de vivienda y hábitat, del cual soy el coordinador general para América Latina; un programa de desarrollo rural, y otro de igualdad de derechos para la mujer. La financiación del Centro Cooperativo Sueco viene un 20 % de la recaudación del pueblo sueco, de campañas financieras, y un 80 % de AFI, que es la agencia de cooperación internacional del Estado sueco.

EC —Tú estás trabajando en este tipo de proyectos en América Central desde hace años. Por ejemplo, ¿en qué lugares?

GG —Honduras, Guatemala, Nicaragua, El Salvador, Costa Rica, Paraguay y Bolivia, desde fines de 2003.

EC —¿Y cómo se involucra WeEffect con el proceso de paz en Colombia?

GG —WeEffect y FUCVAM tienen una alianza que se firmó en el año 98 cuando comenzamos a trabajar en Paraguay. En Colombia el WeEffect no tenía sede. A partir de los acuerdos de paz la embajada sueca se interesa en apoyar el proceso político, social de Colombia por el tema de los acuerdos. Y en ese marco la embajada llama a las organizaciones de apoyo al Tercer Mundo que tiene Suecia en América Latina, entre ellas Diaconía y otras, FurumCit y WeEffect. En ese marco se comunican con Ecomun, la confederación de cooperativas de los excombatientes de las FARC, y ahí se dispone que los tres coordinadores de programa fuéramos a discutir con ellos a los efectos de ver in situ la situación.

Como planteaba Fanny, la situación de los excombatientes en el tema vivienda es sumamente compleja y dramática. El excombatiente llevaba la vivienda en la mochila, entonces hoy reinsertarse… Para que tengan una idea, el 90 % de los excombatientes de las FARC son campesinos, es mucha gente. Y ellos obviamente quieren quedarse en sus zonas, donde puedan trabajar, porque la producción agrícola les es natural desde su nacimiento. Pero si no hay un componente de vivienda… tú podés hacer producir la tierra, pero tenés que vivir. Entonces ahí se vio, luego de varias discusiones, primero la voluntad política del apoyo de WeEffect a un proyecto que habrá que discutir mucho más, y se entendió fundamental conocer una experiencia como la uruguaya. WeEffect nunca firma un acuerdo con una organización hasta ver en la práctica si le puede servir. Y realmente, el cooperativismo de vivienda de ayuda mutua, que durante muchos años fue de matriz uruguaya, hoy en día se puede decir que es latinoamericano, porque se ha podido aplicar en muchos países.

EC —¿Tú dices que el cooperativismo de vivienda por ayuda mutua uruguayo ha jugado un papel de liderazgo en la región?

GG —Fundamental, es una referencia. Dicen que nadie es profeta en su tierra, pero, por ejemplo, yo tuve la posibilidad de participar en cinco diálogos internacionales de Naciones Unidas exponiendo el modelo. Es un modelo único en el mundo.

EC —Es un detalle interesante a subrayar, porque no sé si está suficientemente difundido eso.

GG —Creo que sí, que mucha gente lo tiene claro. Me gustaría más que lo tuvieran más claro las autoridades nacionales, porque el país cuenta con una agencia de desarrollo y de apoyo, y sería muy interesante porque es una estructuración netamente uruguaya. Nació en el CCU (Centro Cooperativista Uruguayo), allá por la década del 60, con técnicos comprometidos con la vivienda popular, y luego lo asumieron los trabajadores.

EC —Recordemos qué significa cooperativa de vivienda por ayuda mutua.

GG —Es para los sectores que no tienen capacidad de ahorro y el capital es su trabajo. Nosotros mismos hemos construido nuestras viviendas. En este momento hay 560 cooperativas de vivienda afiliadas a FUCVAM, estamos hablando de más de 30.000 familias. Para que tengas una idea, un tercio de la población de la ciudad de Mercedes vive en cooperativas de vivienda. El desarrollo ha sido muy importante a lo largo de los años.

EC —La cooperativa recibe créditos…

GG —… del Estado.

EC —… pero buena parte del costo de la vivienda lo provee el propio propietario, la familia propietaria, dedicando horas a la tarea de levantar la casa.

GG —Exactamente, 21 horas semanales, en este momento estamos en dos años de obra aproximadamente, en las nuevas cooperativas. Es un capital muy importante, primero porque abarata los costos, y segundo, porque genera un empoderamiento de la gente muy interesante. Tú puedes ir a mi cooperativa, que tiene 40 años, y parece que hubiera sido inaugurada ayer. Y esto es porque la gente se apropia; nadie ama nada como aquello que construye con el propio esfuerzo.

EC —Fanny, de estos días acá en Uruguay y de la información previa, ¿qué has podido recoger? ¿Cuánto aporta, cuánto va a servir este modelo?

FCP —Cien por ciento. Creo que nos aporta el modelo de cooperativa de vivienda que se está manejando y que nos enseña que de manera colectiva se puede y que con el trabajo de todos es posible construir mejores viviendas para los que no tenemos y no podemos conseguirla de otra manera. Me parece que poderlo replicar en Colombia solucionaría cien por ciento la calidad de vida en cuanto a vivienda de los colombianos y ahorita de nosotros en este tránsito a la legalidad.

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