EC —¿Y los aspectos fiscales son el centro de los actuales desequilibrios que tiene la economía uruguaya?
AA — Personalmente entiendo que sí. Me parece que el desequilibrio fiscal, que se ha ido agudizando últimamente, es lo que está detrás, por ejemplo, de la inflación. Creo que, atacando el problema fiscal, de alguna manera se van a orden varios desequilibrios que estamos observando en este momento.
Hasta ahora se había intentado solucionar problemas a través de partes que, mientras no vayamos al problema de fondo, no se van a solucionar. Por eso u importancia. Ya hace casi dos años que estamos insistiendo [en la importancia del déficit fiscal] –digo dos años porque es, de vuelta, el tiempo que yo estoy desde esta posición-, pero otros analistas lo preveían antes. El tema fiscal es básico.
EC —¿Está en juego también el grado inversor, de algún modo?
AA —Está en juego el grado inversor. Para que no se tome esa frase de forma aislada: lo que digo es que, desde la perspectiva de la metodologías de lo que miden las calificadoras -que es la capacidad y la voluntad de pago que tiene un país al emitir deuda-, sin duda que uno de los elementos que tienen en cuenta es el nivel de déficit fiscal, que se traduce en el nivel de deuda. Hemos tenido algunos llamados de atención. No estoy diciendo que se esté en la puerta de perder el grado inversor, lo que estoy diciendo es que [el déficit] es un elemento que se considera.
EC —¿Cómo observa la economista Azucena Arbeleche los anuncios, las medidas que se dieron a conocer el día de ayer, a partir del diagnóstico que tiene del momento de la economía uruguaya? Lo charlamos enseguida.
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EC —El Poder Ejecutivo anunció ayer una serie de medidas que formarán parte de la Rendición de Cuentas a efectos de mejorar el panorama fiscal del Uruguay. De los US$ 500 millones de ajuste, US$ 150 provendrían de recortes del gasto y US$ 350 del aumento de la carga tributaria. Entre estos últimos se incluyen los incrementos del IRPF al trabajo y a las rentas del capital, el Impuesto de Asistencia a la Seguridad Social [IASS] y también el Impuesto a las Rentas de las Actividades Económicas [IRAE], según especificó ayer el ministro Astori.
Antes de los anuncios de ayer, en algunas entrevistas usted había criticado al Gobierno porque expresaba preocupación por la situación de las cuentas públicas, pero no traducía esa preocupación en hechos o resoluciones concretas. Estas novedades de ayer, con nuevas previsiones en cuanto al crecimiento -con correcciones a la baja- y medidas a incluir en la Rendición de Cuentas, ¿contemplan esa inquietud suya?
AA —En primer lugar, me parece bien importante para contestar esta pregunta ir a algo a lo que tú te referías en el bloque anterior, que es que el telón de fondo de estas medidas es que hubo un menor crecimiento. Me parece equivocado hacer un análisis mirando solamente lo que ha sucedido en el último año.
Hubo un deterioro fiscal leve en 2015, porque de un déficit fiscal 3,5 % al final de 2014 pasamos a 3,6 % en 2015. Es cierto que en 2015 se cumplió con la estimación del resultado primario -el previo al pago de los intereses-, es importante ver ese punto, pero cuando analizamos por qué se cumplió, todo el ajuste viene por el lado de las inversiones o de un mejor resultado de las empresas públicas, que tiene por detrás el aumento de las tarifas.
En 2015 tenemos un deterioro, pero el deterioro fiscal se ha observado a lo largo de los últimos diez u 11 años. Debemos analizar que, durante un período en el que las condiciones eran espectaculares, extraordinarias en términos de crecimiento por los motivos que fuere, los ingresos con respecto al PBI aumentaron 1 % pero los gastos lo hicieron alrededor de 5 % -depende de si lo medimos a fines de 2014 o de 2015-. Ahí se ve que durante el tiempo de bonanza económica, que claramente iba a cambiar, se iba a normalizar, el Gobierno no tomó las medidas del caso, no ahorró parte de ese crecimiento extraordinario.
Antes de perdernos en el detalle de las medidas: ¿Hay que mejorar el resultado fiscal? Sí, lo venimos diciendo desde hace tiempo. ¿Me quedo contenta con lo que se anunció? En primer lugar, se anunció este paquete de medidas por un tema de irresponsabilidad y de no haber tomado las medidas necesarias durante el ciclo económico [de bonanza]. Eso me parece que es importantísimo.
