EC —De todos modos, en algún momento había que reaccionar.
AA —En algún momento había que reaccionar, pero, en primer lugar, la reacción es tarde, y, en segundo lugar, entiendo que no es adecuada.
EC —Vamos a ver eso. Usted recién recordaba los números: estamos con un déficit fiscal en el orden del 3,6 % del PBI. Ayer, en la conferencia de prensa, Astori admitió que puede subir algo más sobre fines de este año, que vamos a estar más cerca del 4 %…
AA —Y sí, porque como comentábamos, este paquete de medidas va a empezar a funcionar, la parte de los impuestos básicamente, a partir del 1 de enero de 2017. Por lo tanto, durante este año se podrían ajustar los gastos, podrían estar gastando menos, no se precisa pasar una Ley de Presupuesto para eso, pero no hay demasiado tiempo.
EC —Entonces, se introduce un ajuste de unos US$ 500 millones que entra en vigor el año que viene y va a empezar a producir impactos en 2017. Además, se confirma, para fines del período de Gobierno, la meta de un déficit de 2,5 % del PBI. Esas consideraciones globales, ¿cómo las ve?
AA —El déficit de 2,5 % al final del periodo de Gobierno, que era la meta que se había anunciado inicialmente, me parece que está en la línea de lo correcto. Quizás podría ser algo menor, para quedarnos más tranquilos, pero va en la línea de lo correcto.
El resto de las medidas me parece que no está claro en cuánto tiempo se van a implementar. No es bueno que se haga una corrección fiscal de forma abrupta. Ayer, cuando se le preguntó a Astori durante cuánto tiempo piensa que sería este ajuste de US$ 500 millones, de 1 % [del PBI], dijo: “Lo antes posible”. Realmente no sabemos si “lo antes posible” es demasiado abrupto o demasiado tarde. Me parece que hay que afinar.
Con los elementos que tenemos sobre las medidas en este momento, es difícil tener una estimación de la oportunidad, del timing, de cómo se van a hacer estas correcciones.
EC —Vayamos a lo que se anunció efectivamente en el día de ayer, en primer lugar por el lado del gasto. Astori destacó que el gasto social no se toca y que tampoco se va a tocar la inversión pública. Además, observó lo que tantas veces han comentado los analistas, que la estructura del gasto es muy rígida.
¿Qué es lo que se implementa? En primer término, la Rendición de Cuentas no traerá gastos adicionales, tal como venía sucediendo periódicamente. Esta vez eso no sucederá, excepto con los rubros comprometidos con la Corte Electoral, los dirigidos a la implementación del Código Aduanero y los dos rubros vinculados con el Poder Judicial -uno de ellos la implementación del nuevo Código del Proceso Penal y el otro, que hay que ver cómo se dilucida, es el diferendo salarial dentro del Poder Judicial, que es como una bomba de tiempo que está latente allí-…
AA —Que no está incluida en las proyecciones, por otra parte, se aclaró ayer.
EC —Es un signo de interrogación que queda a un costado.
AA —Es un signo de interrogación que queda afuera.
