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Entrevista central, martes 28 de junio: José Arocena

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EC —¿Qué otros pasos están dando, pese a que lo que ustedes solicitaban en el presupuesto a estos efectos no fue correspondido?

JA —Hay otro paso importante que es el sistema integral de gestión SAP. SAP es una multinacional que se encarga fundamentalmente de atender distintos rubros de funcionamiento organizacional de una empresa o un organismo del Estado. En este caso lo que le estamos contratando, vía UTE Conex, es la gestión integral en todo lo numérico –contabilidad, stock, compras, ventas– que hoy en día está todo disperso y que muchas veces no logramos saber bien lo que hay. Este sistema integral, que son módulos electrónicos obviamente, unificaría toda la gestión numérica de la CE.

EC —Estamos hablando de toda la CE, Montevideo e interior.

JA —Los 850 funcionarios. Este es un primer paso –yo sé un poquito de organización porque he dado esas clases toda mi vida–, pero el siguiente es el sistema integral de gestión del personal, de recursos humanos.

EC —¿Y cuál es la transformación que están pensando allí?

JA —El sistema integral de gestión de personal creo que va a venir en un año y medio, porque primero tenemos que consolidar el numérico, pero lo que voy a hacer ahora es mejorar el Departamento de Personal, ya estoy hablando con ellos. Esto también forma parte de uno de los pilares de la gestión: que el Departamento de Personal atienda a una serie de características que hoy no atiende que yo, justamente, las había listado en el presupuesto. Son bastante elementales pero conviene nombrarlas para que las personas que están escuchando se den cuenta de lo que no tenía la CE: formación permanente, asesoramiento para el ingreso, egreso y movilidad la interna, planes de carrera y de sucesión previendo los retiros de funcionarios –no éramos capaces de prever las jubilaciones o cómo cubrir el lugar dejado por un jubilado–, apoyo al funcionario en la preparación de concursos –se hacían concursos pero quedaba librado al funcionario, a lo que él consiguiera, presentarse–, condiciones de trabajo –es elemental–, evaluación de los desempeños laborales –no hay actualmente–, prevención y atención en materia de acoso laboral –esta es otra cosa importantísima que tampoco está prevista–. Esta es una lista de lo que podríamos hacer sin ningún tipo de inversión especial, porque en realidad se trata de transformar el Departamento de Personal en un Departamento de Gestión Humana que cumpla con estos objetivos que hoy no cumple. Este es un punto muy importante. Fíjese que en las bases de los concursos estamos poniendo el tema gestión, porque queremos tener directores de departamento que ya estén formados en eso.

La transformación del régimen de retribuciones, sería lo último que toco en el tema gestión…

EC —Esto ya lo mencionó antes porque sí fue encaminado a partir de la discusión del presupuesto, el acuerdo se va a convalidar ahora en la Rendición de Cuentas.

JA —Si, ya va con el mensaje del Poder Ejecutivo. La CE tenía en el año y medio electoral horas extras para funcionar. Lo que estamos haciendo es: primero, el monto que el Poder Ejecutivo pagaba en esas horas extra distribuirlo en los cinco años, segundo, suprimir un número relativamente importante de vacantes para poder financiar lo que llamamos “complemento por permanencia a la orden”. ¿Cuál es la filosofía de esto? Antes el funcionario estaba el mayor tiempo posible en la CE para cobrar horas extra, ahora va a estar el menor tiempo posible, porque el complemento lo va a cobrar igual si cumple con las obligaciones, no va a tener interés en quedarse dos horas más si no las necesita. Esto es muy importante porque cambia un poco el sentido del trabajo: no es una cosa que se extiende porque se gana más por horas extra sino que se debe cumplir en el horario habitual.

EC —De todos modos, llegadas las circunstancias especiales, ahí las exigencias que implica una elección –ya sea nacional, interna, o algún tipo otro de elecciones que la CE supervisa–…

JA —Esa otra cosa que la gente a veces no sabe: tenemos cuatro elecciones nacionales y alrededor de 20 elecciones menores o de menor… pero que dan su trabajo.

EC —Las elecciones universitarias, las de los representantes sociales en el Banco de Previsión Social, ¿qué más?

JA —Las de la Administración Nacional de Educación Pública, las de las cajas –la Notarial, la Profesional–, el Consejo Médico… Hay una veintena de instancias.

EC —Volviendo al tema de retribución: cuando se produce una de estas circunstancias especiales, de exigencia mayor de trabajo, el funcionario con este nuevo régimen…

JA —No va a cobrar más.

EC —Pero probablemente tenga que trabajar más.

JA —Claro. Lo que hemos hecho con el gremio es acordar los máximos que la CE puede exigir dentro de la permanencia a la orden en los periodos electorales. La CE puede exigir un máximo de 120 horas, nunca más, normalmente va a andar en las 60 o 90 horas en los periodos previos. También estamos previendo que hay distintos tipos de trabajo, tres meses o un mes antes, por ejemplo, y este régimen permite planificar. Porque lo que le vamos a pedir a las distintas secciones es que planifiquen las elecciones nacionales, fundamentalmente…

EC —¿Qué quiere decir planificar? ¿No se planifica una elección nacional?

JA —Se abordan los problemas en el momento en el que se presentan, dos o tres meses antes…

EC —¿Esa era la cultura hasta ahora?

JA —Sí. Lo que queremos hacer es cambiarlo. Por ejemplo: no podemos esperar a sanear el padrón [electoral] tres meses antes de las elecciones. El padrón tiene que estar al día siempre. Para eso se necesita planificar, por ejemplo, las cancelaciones, las exclusiones, el ingreso de nuevos ciudadanos. Todos los mecanismos de armado del proceso electoral normalmente empezaban a funcionar el primer día que se pagaba la hora extra: el 1 de enero del año electoral empezaban las horas extras y ahí se empezaba a tener en cuenta el proceso electoral. Pretendemos ahora que empiece en los dos años anteriores.

EC —Una pregunta que llegaba mientras usted estaba hablando de estos temas: “¿Cuándo va a terminarse con la innecesaria extensión de horario para tener la credencial, que significa un costo millonario en horas extras de los funcionarios?”.

JA —Ya se acabó, la hora extra ya no existe. En el único lugar en el que seguimos pagando horas extras es en las mesas móviles, que son mesas de la CE que salen a buscar inscripciones a barrios, liceos y pequeñas ciudades del interior del país. Eso es muy importante para la inscripción cívica, que ha aumentado muchísimo desde que existen estas mesas móviles. Ahí sí no tenemos más remedio porque hay traslados importantes, hay noches pasadas fuera del domicilio… Para esas circunstancias se mantiene hora extra, todo lo demás no la tiene.

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