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EC —José Arocena es doctor en Sociología por la Universidad de París, fue director del Instituto de Estudios del Desarrollo Regional y Local de la Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad Católica y ¿desde hace cuánto tiempo está en la CE?
JA —En la titularidad desde mediados de 2014 y supliendo a [Ronald] Herbert desde el segundo semestre 2013.
EC —Como decíamos más temprano, estas más de nueve décadas de historia de la CE han ido consolidando la confianza en el sistema de los uruguayos y de los partidos políticos. En Uruguay nadie duda de las cifras que la CE publica elección tras elección. Sin embargo, está latente el reclamo de que se dé un paso más. ¿No es posible, dadas las posibilidades que ofrece el desarrollo tecnológico, pedirle a la CE procesos que tengan las mismas garantías pero sean más rápidos? ¿Cómo está examinando esto la CE?
JA —Es posible, pero hay una inversión importante. Para simplificar un poco, hay dos maneras de llegar al voto electrónico. Una es la que está desarrollándose en Argentina, que es la boleta única, la plancha de candidatos aparece en la pantalla y allí se marca la elección. Eso de la boleta única se está intentando aplicar en varios países de América Latina. Los únicos dos países que tienen voto electrónico integral en América Latina son Venezuela y Brasil, los demás están todos en procesos de acercamiento parciales. Por ejemplo, Argentina tiene dos provincias, Salta y Buenos Aires, que ya experimentaron con la boleta única electrónica. La otra modalidad es la urna electrónica, que es la que usan Venezuela, Brasil y otros países del mundo.
EC —Seguramente para muchos oyentes cuesta entender la diferencia, porque como no lo tenemos acá…
JA —La plancha tiene la ventaja de no necesitar una urna electrónica sino una computadora especial que no tenga ingresos, por ejemplo, para un pendrive, que no pueda ser interceptada en internet por un hacker, pero es una computadora con una pantalla en la que aparece la boleta única.
EC —¿La boleta única?
JA —Sí, la boleta única.
EC —Pero, ¿y los partidos cómo…?
JA —Hay países en los que la boleta única tiene todo: Poder Ejecutivo, Cámara de Senadores, Cámara de Diputados, etcétera. Yo vi, por ejemplo, la de Bolivia, que es así.
EC —Pero antes uno tuvo que elegir el partido.
JA —Claro, está la foto del candidato y uno elige. De todas maneras, Bolivia está pasando recién del papel a lo electrónico, pero Argentina en dos provincias ya pasó y [el presidente Mauricio] Macri quiere pasar a nivel nacional a ese sistema.
¿Qué ventaja tiene para nosotros la urna electrónica…?
EC —¿Qué es la urna electrónica?
JA —Es un aparato que tiene una serie de exigencias: tener una pantalla táctil, responder a las necesidades de la lista ordinal de votantes, archivar los votos no en paralelo con la lista ordinario porque si no se terminaría el secreto –eso fue lo que pasó en Maldonado–, etcétera. Tiene que tener una serie de características, si ponen “urna electrónica” en Google aparece abundante información, no es necesario que yo lo explique.
Pero la urna electrónica cuesta en el entorno de los US$ 500 cada una, es decir que para los 7.000 circuitos que tenemos nosotros serían necesarios unos US$ 3.5 millones.
EC —¿Efectivamente se necesita una por cada circuito que hoy tenemos?
JA —Sí, una urna en cada mesa. Hoy no podemos reducir el número de circuitos, porque ya están en los 300 o 400 electores. De todas maneras, son US$ 3.5 millones nada más que para la compra de la urna. Después hay otra serie de aspectos: el escaneo de las hojas electorales, por ejemplo. Si vamos a funcionar electrónicamente tenemos que tener todo electrónico, tenemos que digitalizar los archivos, que es algo en lo que estamos trabajando –hay un archivo que ya está absolutamente digitalizado, que es el patronímico, al cual hoy los funcionarios entramos y sabemos si está o no excluido, etcétera– pero de todas maneras conviene digitalizar el Registro de Expediente, el Registro de Cancelaciones, etcétera. El tema fundamental de lo electrónico para nosotros es que con ley de lemas tenemos tal abundancia de listas…
EC —En eso estaba pensando cuando usted explicaba los sistemas de voto electrónico: cómo adaptamos esa tecnología a una variedad tan grande de listas.
JA —La única manera es la urna electrónica y un software que cuando la persona vaya a votar apriete un botón para el partido que va a elegir, le aparezcan las posibilidades de las lista que ese partido tiene, vote la lista y salga la impresión del voto por un costado, una boletita de impresión que se la lleva como constancia. Para este sistema hay que adaptar el software, porque la urna electrónica admite cualquier software, a nuestro sistema electoral. Eso es relativamente sencillo para un informativo, es cuestión de adaptar un software al sistema electoral, no es nada del otro mundo, no es imposible para nada.
Lo que sí creo que es imposible para nosotros es la boleta única, con ella Uruguay pierde lo que tiene hoy de diversidad de listas y opciones. Creo que además no convendría, iría muy en contra de la cultura electoral uruguaya reducir todo a una plancha.
