Subió más de 20 % comparado con el mismo período de 2018.
EMILIANO COTELO (EC): El precio promedio de la tierra se ubicó en US$ 3.756 por hectárea en el primer semestre de 2019, un valor 21 % superior al registrado en el mismo semestre de 2018. De esa manera, el mercado de tierras habría revertido la fuerte baja de precios registrada el año pasado, cuando el precio medio de las compraventas de tierra cayó por debajo de los US$ 3.300 la hectárea. Estos datos surgen de la información oficial, publicada esta semana por la Dirección de Estadísticas Agropecuarias del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca.
Para analizar estas cifras y conversar sobre la situación actual y las perspectivas del mercado de tierras en Uruguay, estamos con la economista Florencia Carriquiry, de la consultora Deloitte.
ROMINA ANDRIOLI (RA): Florencia, antes de entrar en el análisis de lo que está pasando con los valores de la tierra en el país, quizás valga la pena recordar a los oyentes de donde surgen estos datos.
FLORENCIA CARRIQUIRY (FC): Bien. Como hemos explicado en otras oportunidades, hay que tener en cuenta que la información oficial de la Dirección de Estadísticas Agropecuarias es elaborada a partir de los datos de la Dirección General de Registros, que incorpora todas las compraventas registradas de 10 o más hectáreas. Con lo cual, al referirse a los niveles promedio para todo el país, los valores de la hectárea suelen ser menores a los que muchas veces se mencionan en prensa. Igualmente, a la hora de analizar la evolución del mercado de tierras en Uruguay, esta es la información que habitualmente se usa.
RA: Está claro. Yendo a los datos de este primer semestre de 2019 entonces ¿cuáles son los principales destaques en relación al comportamiento que tuvo el mercado de tierras en la primera mitad del año?
FC: Como decía Emiliano antes, el precio promedio de la tierra en enero-junio subió más de 20 % frente a los valores promedio del primer semestre de 2018. Ahora, hay que recordar que en 2018 vimos una baja importante de los valores de a tierra (de 12 % en el año) y, en particular, en el primer semestre de 2018 el precio medio de las compraventas de tierra registradas fue el más bajo desde 2010. De acuerdo a estas cifras, entonces, el precio de la tierra volvió a superar en esta primera mitad del año los US$ 3.700 la hectárea, que son niveles similares a los vistos en 2017.
De todas maneras, si miramos las cifras por trimestre, que presenta en el mismo informe el Ministerio, la recuperación se concentró en el primer trimestre, cuando el precio medio de las compraventas de tierra se ubicó en más de US$ 3.900 por hectárea en el segundo trimestre los valores bajaron a poco más de US$ 3.500 por hectárea.
RA: Estas cifras no son del todo coincidentes con lo que vienen marcando algunos operadores y analistas del sector en los últimos meses, que hablan de un mercado de tierras que sigue sin recuperarse ¿cómo se compatibilizan estas visiones?
FC: La verdad es que, si bien es indiscutible que el precio medio de las compraventas registradas en esta primera parte de 2019 fue mayor al de 2018, no podemos perder de vista que todas estas cifras hacen referencia al precio promedio de los campos vendidos, sin distinción del tipo de campo sin tener en cuenta en particular la calidad o la aptitud de los suelos de los campos se vendieron en cada momento del tiempo. Y justamente, en este último informe del Ministerio, se señala que el aumento en la comercialización de campos con aptitud agrícola y la venta de una superficie significativa destinada a la producción de citrus habría explicado en parte el aumento del precio promedio.
RA: Si entiendo bien, lo que estás diciendo es que el precio medio de las compraventas de tierra subió en la primera parte de 2019 porque se vendieron campos de mejor calidad, ¿es así?
FC: Exactamente. Por ahí vendría parte de la explicación del aumento del precio medio de la tierra este año.
De hecho, en el informe se señala, por ejemplo, que el precio medio de las transacciones en Salto arroja un precio medio de más de US$ 7.000 por hectárea en enero-junio de 2019, que en realidad está muy distorsionado por la venta de una transacción grande asociada a la producción de cítricos en ese departamento. Sin considerar esa operación el precio promedio de las transacciones realizadas en Salto fue de US$ 3.500 por hectárea (más en línea con los parámetros habituales para el departamento).
Este ejemplo habla a las claras de cuánto puede incidir o afectar los valores promedio el hecho de que se den operaciones que involucren campos muy distintos en calidad o en sus características.
De todas maneras, más allá de ese efecto de cambio en la composición de las compraventas, que sin dudas incide en el valor promedio de este año, tampoco podemos desconocer que otros elementos o fundamentos están contribuyendo a promover un aumento de los valores de la tierra en nuestro país.
RA: ¿A qué te estás refiriendo con eso?
FC: Me refiero a que en el último año hemos estado viendo un encarecimiento muy marcado del precio del ganado, que está tocando niveles récord en los últimos meses. Eso está alentando mayores niveles de rentabilidad en la ganadería y se conjuga a su vez con una mejora de los márgenes agrícolas en el último ciclo. Todo esto también podría estar operando como sostén para los precios de la tierra en el mercado.
RA: Y a nivel de la cantidad de operaciones y la superficie transada, ¿cómo fue la evolución en el primer semestre del año?
FC: Ese es otro elemento interesante de las cifras de la primera mitad de 2019. Tanto el número de operaciones como la superficie vendida bajó sensiblemente frente al primer semestre de 2018. En concreto, hubo unas 391 operaciones en el semestre por un total de 62.000 hectáreas, y eso marca una caída de 18 % en la cantidad de transacciones y de 24 % en el volumen total de hectáreas comercializadas. Son cifras muy bajas en una perspectiva histórica, que marcan que el mercado de tierras está bastante trancado.
RA: Para ir finalizando, entonces, ¿cómo están viendo el panorama para adelante?
FC: Para poner un poco las cosas en perspectiva, es claro que hasta 2014 el mercado de tierras tuvo una evolución excepcional, luego con la caída abrupta de los precios de los commodities en el mercado internacional, vino un ajuste significativo en los valores de la tierra a partir de 2015 y estos datos más recientes parecen marcar que la baja del valor de los campos al menos se detuvo, aunque el mercado está muy poco dinámico en términos de la cantidad de transacciones que se están cerrando.
En este escenario, ¿cuáles son las perspectivas? A nuestro juicio, no podemos perder de vista que el precio de la tierra, al igual que el de cualquier activo, está relacionado con su capacidad para generar ingresos en el futuro. Y con esa mirada, la verdad que los fundamentos de este activo están mostrando una mejora. Como decía antes, los precios del ganado han subido muy fuertemente, la rentabilidad ganadera y agrícola está mejorando y la demanda por tierra está volviendo a afirmarse lentamente. Todo eso puede justificar una mayor firmeza de los valores de la tierra.
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