Este martes, en un debate del Consejo de Seguridad de la ONU sobre la protección de los civiles en escenarios de conflicto Uruguay defendió la necesidad de que los responsables de masacres sean juzgados por la Corte Penal Internacional.
Según dijo Leonel Harari, colaborador de En Perspectiva acreditado en las Naciones Unidas, "la posición de Uruguay fue muy clara: tiene que haber presión internacional para que se respeten las convenciones y protocolos de Ginebra", que consignan las reglas de la guerra.
EN PERSPECTIVA
Miércoles 20.01.2016, hora 10.18
ROMINA ANDRIOLI (RA) —Uruguay dirigió ayer un debate en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en su calidad de presidente de turno del organismo. La reunión, que estuvo liderada por el vicecanciller José Luis Cancela, se centró en la protección de los civiles en los escenarios de conflicto, en especial en Siria.
[Audio de Cancela]
Hello, good afternoon everybody, thank you very much for being here. You know that today Uruguay is presiding over an open debate of the Security Council related the protection of civilians.
[Fin audio]
RA —Para saber más de lo que aconteció en esta instancia estamos en contacto con Leonel Harari, a quien ustedes conocen, es habitual contertulio de En Perspectiva y ahora, además, se estrena como nuestro corresponsal en la ONU.
NICOLÁS BATALLA (NB) —¿Qué pudiste intercambiar en la previa de este debate a propósito del Estado de ánimo y las expectativas del gobierno uruguayo frente a este desafío que asumió al participar del Consejo de Seguridad de la ONU?
LEONEL HARARI (LH) —Tuvimos una muy buena charla con el embajador Elbio Rosselli, que es el jefe de la misión frente a la ONU y por lo tanto el que está ejerciendo, durante este mes, la presidencia del Consejo, que es rotativa y mensual. Uruguay no solo empezó sus dos años como miembro no permanente sino también como presidente. Yo encontré una misión relativamente serena, consciente de lo que como país podemos y, sobre todo, no podemos. En el Consejo de Seguridad hay 15 miembros de los cuales cinco tienen derecho a veto pero no tienen doble voto, cuando quieren que se apruebe algo necesita convencer a algunos de los otros miembros. Eso nos da un pequeñito poder, porque hay que negociar, y ahí se pueden dar ideas. La posición de Uruguay es defender su tradicional compromiso con los convenios internacionales, los tratados y la gobernanza internacional en general, y cuando se puede aportar algo en el sentido de la transparencia, que es uno de los grandes temas dentro del Consejo de Seguridad, hacerlo. Cuando la presidencia española, por ejemplo, inventaron hacer un balance mensual del trabajo hecho que fuera publicable, ahora la delegación uruguaya ha tenido alguna iniciativa con respecto a la transparencia en el proceso de elección del próximo secretario general. Uruguay ya se pronunció y dijo que quiere que sea una mujer. Los temas más acuciantes en este momento tienen que ver con la situación en Medio Oriente, los refugiados, la violencia.
RA —Sí, como dijimos al inicio ayer, bajo la presidencia de Uruguay y con la conducción de Cancela, se discutió el informe del secretario general Ban Ki-moon a propósito de la protección de los civiles en las zonas de conflicto. ¿Cómo fue esta instancia, qué rol jugó Uruguay?
LH —Primero despertó muchísimo interés, era un Consejo de Seguridad abierto a las otras delegaciones y a los organismos humanitarios en general, había altos representantes de la Cruz Roja, de Oxfam, de Médicos Sin Fronteras, que están en el terreno y están perdiendo gente, o sea que son parte de las víctimas civiles que ocurren todos los días. La posición de Uruguay fue muy clara: tiene que haber presión internacional para que se respeten las convenciones y protocolos de Ginebra, que son un poco las que consignan las reglas de la guerra y se están pasando por arriba. Se dieron informes terribles sobre la crueldad y la extrema violencia y, sobre todo, que eso ha salido en toda la prensa, el bombardeo de hospitales, escuelas, centros poblados… El 90 % de las víctimas son civiles, ni sabían por qué estaban ahí. Uruguay tomó esa posición de principios, tomó la palabra y ha sido muy… El subsecretario general de la ONU, el sueco [Jan] Eliasson, agradeció a Uruguay varias veces por la manera de llevar las cosas, la iniciativa y el apoyo particular de nuestro país a las cuestiones humanitarias.
NB —¿Esta es una instancia que termina con algún tipo de postura de parte del Consejo de Seguridad, o simplemente se presenta el tema? Pregunto pensando en que hay estados involucrados en esta situación que toman iniciativas que pueden terminar empeorándola.
LH —Sí, justamente, es una buena pregunta, porque las Naciones Unidas es eso, son los estados, estas son guerras asimétricas, que no son Estado contra Estado, aunque a veces sí pero en el medio hay organizaciones como las que ya conocemos. ¿Qué es lo que hace el Consejo de Seguridad? tiene una parte pública que llama al respeto a las normas, al diálogo y a la paz y tiene una actividad diplomática, más oscura pero muy activa, de presionar a los países que tienen poca o mucha responsabilidad con los medios que tiene la ONU. Ayer decía Eliasson: nosotros no somos un gobierno mundial, somos la asociación de las naciones y no podemos hacer más que lo que los países quieren. La herramienta de la ONU es el diálogo, y cuando van los cascos azules van por pedido de los mismos países, se interponen en momentos de guerra civil o enfrentamiento fronterizo pero es con la aceptación de los estados. Acá estamos en situaciones en las que el Estado no quiere intervención, el Estado sirio considera esto una crisis no un conflicto, no es que hay un enfrentamiento sino un problema de guerra civil, no quiere intervención extranjera y hay mucha presión en ese sentido. Ahora, ¿por qué presionan más al gobierno sirio? Esa es la parte que no se ve, pero entre los periodistas que estábamos ahí se conversaba y se decía que probablemente empiecen las conversaciones para salir de forma pacífica y los países de occidente quieren sacarse de encima al presidente sirio Bashar al Assad, en cambio Rusia lo defiende como un aliado tradicional. El focalizar las denuncias en las tragedias humanitarias de Siria es centrarlas en la pasividad del gobierno sirio para proteger su población. No sé si se entiende… ¿Qué otra cosa puede hacer la ONU? Manda gente, corre riesgos, hay mucha diplomacia y presión. El gobierno uruguayo fue claro, con un lenguaje que nos es familiar a los uruguayos pero que a nivel internacional se usa mucho menos, que es el del rechazo a la impunidad: hay que llevar a los culpables de todo esto a la Corte Penal Internacional, hay que juzgar, la mejor manera de prevenir este tipo de hechos es que paguen los que tienen que pagar. Es un lenguaje que nos es familiar en el movimiento popular uruguayo y que en cierto sentido empieza a permear aquí. Se habló mucho de que una de las formas de prevenir o bajar el nivel de los conflictos era que los responsables paguen los platos rotos, la gente que se murió no tiene vuelta atrás, es muy dramática la situación pero los medios del Consejo de Seguridad son esos: la diplomacia abierta y cerrada y la presión sobre los Estados.
RA —¿Algún otro comentario que te haya quedado pendiente a partir de lo que pudiste observar ayer?
LH —Es muy interesante porque es parte de todo el juego político internacional. No es banal, tiene sentido, no es palabrerío. Creo que tendremos oportunidad de volver sobre todo esto, pero el tema es quién es el dueño de la pelota, quienes son los que realmente inciden, en qué medida estamos comprendiendo y recibiendo información de la realidad y hasta dónde nos manipulan, que también es el caso. Es un placer ver a algunos de los periodistas que están hace 20 o 30 años y ya pueden interpretar con gran fineza un cambio de tono o de actitud. Hay mucho para aprender de eso, creo que Uruguay va a aprender.
Para terminar, a Uruguay se le toma en serio por su participación en las misiones de paz, es de los países que están siempre ahí, importantes, hay mucha información que pasa directamente a manos de las Fuerzas Armadas que participan que tiene que ver con las realidades sociales y políticas de los países. Digamos que hay mucho para aprender, no todo es abierto y público, yo haré lo posible para que nuestra audiencia pueda estar enterada lo mejor posible.
***
Transcripción: Andrea Martínez