Ayer, al final de la reunión del Consejo de Ministros, el presidente Tabaré Vázquez tomó a muchos por sorpresa cuando anunció un plan de inversiones en infraestructura para este período al que calificó como récord en la historia del país. En conversación con En Perspectiva, el director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), Álvaro García, destacó el manejo de la economía del país realizado por los gobiernos del Frente Amplio en los últimos diez años y que permitieron “la recuperación del grado inversor" para acceder al financiamiento de "buena parte de estas obras”.
García opinó que se había empezado a generar la sensación de que el menor crecimiento previsto para el país podía interpretarse “como una retracción” y esa visión no era compartida por el Gobierno. “Creemos en un fuerte rol del Estado, y trabajar en materia anticíclica cuando viene un crecimiento menor, hemos puesto todas las baterías a trabajar en eso”, dijo.
EN PERSPECTIVA
Martes 28.07.2015, hora 7.23
EMILIANO COTELO (EC) —Ayer, al final de la reunión del Consejo de Ministros, el presidente de la República, Tabaré Vázquez, tomó a muchos por sorpresa cuando anunció un plan de inversiones en infraestructura para este período al que calificó como récord en la historia del país.
(Audio Tabaré Vázquez)
“Ustedes verán que con esta inversión en infraestructura estamos prácticamente sumando la inversión que hubo en los dos períodos anteriores. Y si los comparamos con los períodos anteriores a la llegada del Frente Amplio (FA) al gobierno, en este período democrático la inversión que se va a hacer triplica o cuadruplica las inversiones que se hacían en períodos anteriores.”
(Fin audio)
EC —Energía, vialidad, vivienda, agua, saneamiento, puertos y trenes fueron algunas de las prioridades fijadas para este esfuerzo presupuestal que diseñó el Poder Ejecutivo.
¿De dónde saldrá esa inversión? De acuerdo a lo expresado por Vázquez, los fondos públicos cubrirán el 66 % de lo previsto, y el tercio restante se realizará con dineros provenientes del sector privado.
Hay muchas preguntas, hay una cantidad de observaciones pendientes a propósito de estos números. Por eso estamos en comunicación con el contador Álvaro García, director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP).
Para comenzar, una pregunta más general. Estaba viendo el título de El País de hoy, “Fuerte señal de Vázquez”, y en la nota, que va en página 6, se dice que “según fuentes oficiales consultadas la semana pasada, se necesitaba una señal del gobierno porque se había instalado un clima de pesimismo entre los operadores económicos a partir de lo que fueron los anuncios del equipo económico de recortes y de austeridad presupuestal”. ¿Efectivamente esa es una de las ideas detrás de la conferencia de prensa de ayer?
ÁLVARO GARCÍA (AG) —La principal idea es focalizar la situación de la manera más objetiva posible. En el año 2008, cuando se vino la crisis internacional, nos tocó estar en el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), y creo que la principal tarea política que teníamos en ese momento era trasmitir correctamente a la población la información de que se disponía para que las decisiones de los agentes fueran las mejores posibles, y no generar expectativas ni en un sentido ni en otro, porque en economía sabemos que a la larga terminan generándose en una suerte de cuestión preanunciada.
EC —¿Algo de eso había, entonces, en este caso, por ejemplo a partir de lo que fue la medida tomada con el Antel Arena?
AG —Nosotros tenemos muchas reuniones con los actores económicos y percibíamos que la aguja se iba para el lado de un menor crecimiento, pero interpretado como una retracción o como algo que no estuvimos viendo en ningún momento. Entonces, como somos actores de nuestro propio destino y para eso hacemos política y creemos en un fuerte rol del Estado a favor de, por ejemplo, trabajar en materia anticíclica cuando puede haber un crecimiento menor, hemos puesto todas las baterías a trabajar en eso. No es otra cosa que ser coherentes con lo que planteamos durante toda la campaña. Recuerdo haber repetido tantísimas veces por todo el país que teníamos que elaborar un inventario completo de infraestructura […] en Uruguay.
Habíamos hecho una experiencia muy buena con el tema del plan de energía a largo plazo, que brindó importantes beneficios al país –porque los actores económicos miran esto en un mediano plazo y eso ayuda a la inversión–, y teníamos que hacer lo mismo con infraestructura en general. Y allí hemos tomado algunas decisiones de gobierno, algunas que tienen que ver con la propia OPP en este plazo, relacionadas directamente con este trabajo y con el anuncio de ayer. Por ejemplo, la implantación del Sistema Nacional de Inversión Pública. Ese es un elemento importantísimo, fundamental.
EC —Recordemos de qué se trata, porque es un término que se está utilizando desde hace poco.
AG —Es un sistema en el que se venía trabajando desde hace ya algún tiempo y tomamos la decisión política de hacer para este período presupuestal lo que se llama un plan de esfuerzos, ponernos a trabajar más fuerte. Los funcionarios que tienen más experiencia en presupuesto nos miraron con los ojos un poco abiertos, pero decidimos sacar el sistema nacional de inversión pública en estos pocos meses que tenemos antes del presupuesto. Nuestros colegas lo entendieron perfectamente, hace un par de consejos de ministros le devolvimos a cada uno de los ministerios la cantidad de obras que había cargado en lo que llamamos la agenda de infraestructura. Esa agenda tiene un horizonte 2030, más amplio que lo presentado ayer, que tiene un horizonte 2020, y constituye la base fundamental de lo que fue presentado ayer.
EC —¿El Sistema Nacional de Inversión Pública básicamente consiste en coordinar las inversiones de las distintas dependencias del Estado?
AG —Es un sistema en el cual todo el mundo carga sus inversiones, lo que tiene previsto invertir. Entendimos que en principio era mejor hacerlo en un plazo más largo, pero no cambia. Obviamente, por tratarse de inversiones que tienen necesariamente un plazo mediano y largo pasan de un período al otro, no se puede inventar la pólvora de un período al otro tampoco, por lo tanto hay una continuidad necesaria. Estamos tratando de imponer esa visión de mediano y largo plazo en todos lados, por lo menos en la OPP estamos trabajando en esto para ello.
Como consecuencia tenemos un inventario completo de lo que han plateado todos los incisos, todos los ministerios, junto con un trabajo del MEF, que después tuvo un papel muy importante en la confección final de todo este trabajo. De modo que de manera coordinada se termina concluyendo el programa de infraestructura que presentó el presidente ayer.
EC —Vázquez hizo hincapié ayer en que es una inversión muy superior a la que había tenido lugar incluso en los períodos anteriores en los que también gobernaba el FA. Llama la atención que una inversión así, de ese monto, ocurra en un momento en que las señales económicas están más bien por el lado del enfriamiento. Entonces, ¿cómo se explica esto? ¿De dónde, cómo se puede realizar una inversión tan importante?
AG —Creo que no tenemos que dar más explicaciones que la historia reciente de los últimos 10 años para demostrar la responsabilidad en materia económica del FA. Por ejemplo, la recuperación del grado inversor, que es un elemento fundamental y que tiene que ver directamente con poder acceder a mecanismos de financiamiento que van a permitir realizar buena parte de estas obras. Esto está muy fundamentado, muy estudiado, conocemos, en función de lo realizado estos 10 años, las necesidades que se tienen y las posibilidades financieras del país, diría que detalladamente –porque esto además fue trabajado con cada uno de los ministerios por el MEF en la parte más fina– la modalidad y el destino en el presupuesto de cada una de estas obras que están planteadas.
EC —Un tercio de estas inversiones, según dijo el propio Vázquez, se hará con fondos privados. Hay que entender básicamente el mecanismo de participación público-privado (PPP), por ejemplo. Pero ¿qué pasará con la otra parte, la de los fondos públicos?
AG —La parte de fondos públicos va a estar incluida en el presupuesto nacional, que va a ser presentado dentro de poco, en un mes y poco al Parlamento.
EC —¿Se tomarán nuevos créditos? ¿Hay que entender eso?
AG —No. El ministro Astori ha expresado reiteradas veces que Uruguay tiene fuertes y buenas posibilidades de financiamiento. Entre otras cosas, por su calificación, lo que decíamos recién del grado inversor. Pero las posibilidades de financiamiento no implican tomar ese crédito. No es lo mismo ni para un país ni para una familia poder endeudarse por cifras importantes que hacerlo, lo tiene que relacionar con sus ingresos. En este proceso presupuestal hemos planteado una meta de 2,5 % de déficit fiscal para el final del período, y esa es la meta que nos hace sustentable la deuda pública. O sea que hay una coherencia a nivel macroeconómico muy relevante, muy importante, que tenemos que atender necesariamente, porque todo proceso de desarrollo tiene que estar enmarcado en un contexto de orden. Pero todo proceso de desarrollo tiene que tener también fuertes incentivos e impulsos. De ese espíritu está imbuido el plan de infraestructura presentado ayer.
EC —Yo le preguntaba si se va a tomar crédito. Usted empezó a responder eso, pero no retuve una respuesta concreta.
AG —En la parte del presupuesto nacional usted tiene dos grandes fuentes, el propio erario nacional y la posibilidad de tomar créditos. Ahí las decisiones pasan por otro canal, por ver cuáles son más convenientes. Hay distintos factores, por ejemplo si es un crédito de un organismo multilateral, a algún organismo que necesite un fortalecimiento institucional hacer un proyecto así lo puede llevar a aprender a ejercitar. Por otro lado también hay un tema financiero de cuáles pueden ser los costos en un caso o en otro. Así se toman las decisiones más adecuadas. Para lo cual es importante tener, como tiene Uruguay hoy, múltiples posibilidades de financiamiento. De modo que la parte del presupuesto nacional pasa, como ha pasado históricamente, por esas dos cuestiones, o el erario mismo o la posibilidad de tomar préstamos internacionales.
ROMINA ANDRIOLI (RA) —¿Cómo fueron delineadas las prioridades dentro de esta inversión en infraestructura? Se lo pregunto viendo las prioridades que se le dan en función de los recursos asignados. Así, a energía se destinan US$ 4.230 millones y, en segundo lugar, a vialidad, US$ 2.360 millones. Puede llamar la atención el monto asignado a energía, teniendo en cuenta que en el período anterior se hizo mucho hincapié y se le dio un impulso importante a la inversión en ese rubro. ¿Por qué ahora también se considera prioritario, y a qué se va a destinar concretamente el monto general?
AG —Tengamos en cuenta que hay obras en andamiento. Como decíamos antes, esto es infraestructura, las obras tienen un plazo, entonces toda la fantástica inversión que ha realizado el país en energía en los últimos año entran en ejecución en este tiempo y son consideradas en la inversión realizada porque se ejecutan y se siguen llevando adelante. Son inversiones realizadas básicamente a través de la UTE, pero no solo. Para recordar, del año 90 al año 2005 no se invirtió un peso en este país en materia de energía eléctrica, las apuestas fueron otras y en el año 2005 el país arrancaba con un rezago muy importante.
RA —Pensando en obras grandes, está la regasificadora, por ejemplo, que allí también se cuenta.
AG —Sí, se cuenta el aporte del Estado, unos US$ 390 millones.
RA —Eso es lo que se va a ejecutar en este período, US$ 390 millones. Ya algo se había gastado en el período anterior.
AG —Sí, en el período 2015-2020. Después en segundo lugar está vialidad, que se ha planteado públicamente como una de las prioridades necesarias, lo ha planteado la población, lo recibimos también durante la campaña, sabemos que en diferentes lugares hay obras importantes para llevar adelante. Hay un plan del Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP), básicamente, que incluye presupuesto nacional y la modalidad de la Corporación Vial del Uruguay, una sociedad anónima de la Corporación Nacional para el Desarrollo, que ha demostrado ser un buen mecanismo, con cerca de US$ 1.600 millones. Y el ministerio ha anunciado unas ocho PPP, de las cuales va a hacer llamados para seis antes de fin de año, por unos US$ 740 millones. Se está avanzando fuertemente en buena parte de las rutas, diría que en la totalidad de las rutas […].
RA —¿Estiman que hay tanto interés de los privados en invertir en estos mecanismos de PPP?
AG —Sí, sí. El ministro Rossi invitó al MEF y a la OPP a una reunión a la cual convocó al ministerio y a todos los operadores, dueños de empresas constructoras, etcétera, en la que se hizo una presentación muy franca, muy frontal con referencia a las necesidades de vialidad y se anunció el armado de ocho PPP. Y la verdad es que el salón estaba lleno, hubo mucho interés y nos consta que hay mucho interés y expectativas en cuanto a vialidad general y en cuanto al plan de infraestructura también.
EC —¿Se llega a utilizar efectivamente ese monto de US$ 740 millones de PPP en este período? ¿Se va a poder instrumentar un mecanismo que en el período anterior fue lento?
AG —Ahí hay un gran desafío. Es un muy buen mecanismo cuando uno va a la teoría. Hubo un seminario de tres días organizado por el BID referente a este tema, nos tocó participar media hora. Los técnicos concluyen que los tiempos no han sido tan extraños en Uruguay, pero nuestro objetivo es que esto sea mucho más ágil, y para ello se está trabajando no en una modificación legal, que llevaría más tiempo, sino en el aprendizaje de cómo han sido los procedimientos. Hay procedimientos que en el decreto reglamentario están establecidos uno detrás de otro, y se está viendo la posibilidad de solaparlos, de tratar de aprovechar plazos allí. La propia voluntad política que le pueda imprimir el Consejo de Ministros, el propio MTOP, va a colaborar en disminuir los tiempos. Hay una conciencia muy grande de ir lo más rápido posible.
RA —Dentro de las áreas presentadas ayer como destinatarias de esta inversión, aparece el término “infraestructura social” con US$ 1.870 millones. ¿Qué es lo que abarca concretamente ese rubro?
AG —La cifra mayoritaria tiene que ver con inversión educativa e inversión hospitalaria.
RA —Cuando se habla de inversión educativa, es en materia de infraestructura estrictamente hablando, o sea, construcción de escuelas y de liceos.
AG —Exactamente, el presidente lo aclaró específicamente, es esa parte de infraestructura dura, de edificios y equipamiento en algún caso, básicamente va por ahí. En Educación y Cultura son unos US$ 900, en Salud unos US$ 200 millones.
RA —Aparece también el tema de cuidados. ¿Qué infraestructura se necesita para el Sistema de Cuidados?
AG —El Sistema de Cuidados tiene tres poblaciones objetivo iniciales más una cuarta que son los propios cuidadores, que son en general mujeres, en el Uruguay y en general en el mundo. La primera franja es la primera infancia, el tema de cuidados de primera infancia pasa muchísimo por los sistemas CAIF y los centros de atención a la primera infancia, que se han demostrado exitosísimos en gran número de los casos que tenemos, y la idea es también construir CAIF. Por lo tanto está prevista la construcción de más de una centena de CAIF en este período.
RA —¿Y en lo que respecta a seguridad ciudadana, que es el otro concepto que se engloba dentro de este rubro?
AG —Ahí se incluye todo lo que van a realizar el Ministerio del Interior (MI) y el INAU referido a mejoras de infraestructura que tienen previstas en sus presupuestos. Por ejemplo, en el caso del MI se va a ejecutar la cárcel que fue licitada en el período pasado por una cifra de US$ 120 millones.
RA —Eso va a ser por PPP.
AG —Sí, eso ya fue anunciado, fue firmado el contrato.
EC —El puerto de aguas profundas es una de las grandes obras que venían previstas del gobierno anterior. Ayer el presidente Vázquez aclaró que ese proyecto no está incluido en las cifras que se manejaron ayer, pero dijo que en los próximos días se dará a conocer una propuesta al respecto. ¿Qué hay que entender entonces? ¿Que no está descartado?
AG —No, no está descartado, así lo planteó también el ministro. Tenemos que ver cómo va siendo la evolución en materia económica con respecto a la necesidad de un puerto y qué grado de avance necesita. Indudablemente cualquier actividad económica tiene que tener una demanda, por tanto tenemos que analizar a la luz de hoy cuál es la demanda mediata, cuál puede ser la demanda futura para un puerto de aguas profundas, y transitar de la manera más eficiente posible ese camino.
EC —¿Y el Antel Arena?
AG —El Antel Arena lo mismo, ha sido anunciado ya que se está trabajando en una alguna fórmula. Como OPP estamos participando en algunas instancias con el MEF. Cuando se arribe a una fórmula va a ser anunciada como corresponde.
EC —¿Han calculado de qué manera incidirá todo ese paquete de inversiones en la economía, en el empleo?
AG —Eso va a estar reflejado en la propuesta presupuestal. Allí, coherentemente con estos niveles de inversión, van a estar planteados los niveles de crecimiento de la economía, los niveles de impacto en el empleo, etcétera. Va ir todo dentro de la propuesta presupuestal.
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Transcripción: María Lila Ltaif
Documentos
Programa de Inversiones 2015-2019 presentado ayer por el Poder Ejecutivo