Eliminatorias Mundialistas Uruguay-Brasil
Por Homero Fernández
Lunes 18.11.2024
Ángel Romano, el jugador celeste con más goles contra Brasil, también llegó a jugar en la selección argentina y es el futbolista más ganador de campeonatos de la Copa América.
Le llamaban “Loco” porque dentro de la cancha corría como tal detrás de la pelota, ya sea para defender o para atacar.
Ocupaba todas las posiciones con eficacia. Hasta llegó a jugar de arquero en un partido oficial.
A menudo usaba una gorra o una diadema en la cabeza para alisarse el cabello.
Pero más que el mote, Ángel Romano carga el brillo de una verdadera leyenda del fútbol de Uruguay en el primer tercio del siglo 20.
Por ejemplo, es el mayor goleador celeste en los enfrentamientos con Brasil con 6 anotaciones. Tres de ellas en el histórico 6 a 0 en la Copa América de 1920.
Su carrera comenzó en Nacional siendo un adolescente, el 11 de septiembre de 1910 con un debut espectacular ante Central. Hizo un “hat-trick” para la goleada de 4 a 1.
Pronto emigra para jugar en Boca Juniors, en 1913, después de que lo ven jugar un partido brillante en Buenos Aires entre la selección uruguaya y la argentina por la Copa Lipton. Era su debut con la celeste y ganaron 2 a 0, con goles del jovencito Romano y José Piendibene.
Él cuenta cómo fue: “Boca Juniors andaba en la mala en aquel año 13, último, Rosario Central lo aventajaba en dos puntos y querían reforzar el ataque. Ellos sabían que yo jugaba en cualquier puesto, con toda soltura, y después de una presentación del seleccionado uruguayo allá, me invitaron a que ingresara a Boca. Yo era menor, 19 años recién cumplidos y lógicamente, quedó la resolución a cargo de mis padres”.
Se arreglaron con la condición de que Boca se comprometía a darle un trabajo al jovencito en la aduana del puerto bonaerense.
Romano destacó y hasta lo llamaron para jugar con la selección argentina en un partido amistoso contra el equipo inglés Exeter que estaba de gira por Sudamérica.
“Mire si habrá sido inolvidable mi actuación en Boca, que me significó el honor enorme de haber sido designado en seleccionados argentinos. Vino un equipo inglés y se integró el combinado con jugadores de Buenos Aires y Rosario. Escuche, vea si no es para mantener vivo mi orgullo por aquel nombramiento. Me dieron el puesto de centro delantero. El ala derecha porteña y la izquierda, rosarina”, contaba orgulloso.
Ángel Romano dejó Boca Juniors a finales de 1914 para regresar a Nacional y convertirse en leyenda. Haciendo una dupla inolvidable con “el Mago” Héctor Scarone; ganaron casi todo.
Con la etiqueta de goleador de la Copa América 1917 llega a Brasil a disputar el torneo de 1919. Pero no marca. El protagonismo queda para los brasileños Neco y Friedenreich. Eso sí, un año después Romano se consagra nuevamente como máximo artillero y acompaña en una nueva conquista de Uruguay.
Tal vez, si no fuera porque muchos títulos no se registraron oficialmente, Ángel “el Loco” Romano sería el mayor ganador de trofeos de la historia.
Aún más que Messi. Contemos. Ganó 8 torneos internacionales con Nacional y uno con la camiseta del CURCC, el origen de Peñarol. Levantó la copa de 17 campeonatos uruguayos. Fue campeón de América seis veces, un récord que solamente él tiene. Fue el goleador en las ediciones de 1917 y 1924.
Fue campeón olímpico (o del mundo) en 1924, en Francia, con tres goles, uno de ellos en la final contra Suiza.
Jugó con la camiseta uruguaya por última vez el 14 de julio de 1927, llegando a los 70 partidos disputados. Los mismos que registraron Matías Vecino y otro “loco”, Sebastián Abreu.
Dos más que Álvaro Recoba y hasta jugó 261 minutos más que Enzo Francescoli, quien tuvo presencia en 73 partidos.
Le quedó pendiente por poco el oro olímpico de 1928. Algunos dicen que, aunque pudiera haber estado en el plantel, prefirió dedicarse a buscar entrevistas de trabajo, especialmente en el banco Hipotecario.
Todo, una verdadera locura.
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