Foto: El líder del partido "Pitit Desalin", Moise Jean Charles, monta a caballo mientras los manifestantes haitianos marchan por las calles el 28 de febrero de 2021 en Puerto Príncipe. Crédito: Reginald LOUISSAINT JR / AFP
“Desde su colonización hasta hoy, Haití ha sido un país azotado por males tanto estructurales como naturales. Su único triunfo fue la revolución de esclavos que lo llevó a la independencia: a partir de ahí, el país caribeño ha sido presa de catástrofes naturales, epidemias, golpes de Estado y dictaduras, y una deuda impagable; dinámicas económicas y políticas de un mundo que no estaba dispuesto a perdonar la precoz rebeldía de los haitianos”.
El silencio acompaña a Haití. Siempre planea sobre este país, que ocupa la parte occidental de una isla compartida con República Dominicana y que es el más pobre de América; solo los vientos de los huracanes o los temblores de los terremotos parecen ser capaces de sacudirlo. Empaña todas las revueltas de las que el testarudo país ha sido capaz, desde su olvidada y precoz revolución de 1791, que le otorgó la independencia, hasta las continuas protestas que lo sacuden hoy en día”.
Este relato de la publicación El Orden Mundial, es ilustrativo para situarnos esta mañana en la situación de Haití, un país de nuestro continente que los uruguayos solemos tener presente por lo que fue su terremoto devastador en 2010 o por las conocidas misiones de Paz de las que cascos azules uruguayos han formado parte.
Hoy en día, una vez más, Haití vive una nueva ola de violencia política, caos social y crisis institucional. El pasado 7 de febrero los sectores opositores, además de abogados y académicos, dieron el ultimátum al presidente Jovenel Moïse exigiendo que deje el cargo.
Muchos sectores de la población haitiana reclaman que el mandato de Moïse debió concluir el 7 de febrero, como establece la Constitución. El presidente dice que estos reclamos no son ciertos y acusa un intento de golpe de Estado en su contra. Además, asegura que permanecerá en su cargo hasta febrero de 2022.
Tras varias semanas de manifestaciones violentas en distintas ciudades del país para pedir la renuncia del presidente, Haití nuevamente entró en una crisis política y social que derivó en una nueva crisis institucional, de esas que a esta altura parecen crónicas.
Para tratar este complejo panorama político y social que vive Haití, les propusimos una mesa redonda: Con Leo Harari, integrante de La Mesa de Análisis Internacional, ex asesor para Unesco; Henry Boisrolin, haitiano, profesor, coordinador del Comité Democrático Haitiano, autor de La revolución haitiana(1791-1804). Una contribución para superar el olvido; y Mónica Riet, militante social uruguaya e integrante de la Coordinadora por el Retiro de las Tropas de Haití y en Defensa de su Soberanía.
