La relación entre Venezuela y Colombia pasa por una nueva crisis diplomática y humanitaria.
El conflicto bilateral se inició el 19 de agosto, cuando Caracas ordenó el cierre de varios puntos de paso, a raíz de un ataque de desconocidos a militares venezolanos que realizaban una operación anticontrabando.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, justificó el cierre como parte de una ofensiva contra paramilitares colombianos que se financian con el contrabando fronterizo y pretenden, según el mandatario, desestabilizar a su gobierno.
Según la Organización de Naciones Unidas, desde entonces, fueron deportados unos 1.100 colombianos, mientras que otros 10.000 cruzaron la frontera por temor a ser expulsados, separados de sus familiares y perder sus pertenencias.
La Unasur anunció el martes que propondrá la creación de una comisión para verificar la situación de derechos humanos en la zona. Colombia había convocado esta semana una reunión de cancilleres de la Unasur para tratar la crisis fronteriza y diplomática con Venezuela. Sin embargo, el organismo no ha confirmado la fecha del encuentro.
El gobierno de Juan Manuel Santos también intentó en los últimos días que los cancilleres de la OEA revisaran el caso, pero no consiguió los votos necesarios para que esa cumbre sea convocada.
Este fue uno de los temas tratados en La Mesa de En Perspectiva con Teresa Herrera, Daniel Supervielle, Juan Gabito y Gabriel Mazzarovich.
