El PBI del tercer trimestre del año creció 1 % con respecto a los tres meses anteriores y 0,6% en comparación con el mismo período de 2014. El crecimiento estuvo determinado por un mejor desempeño del sector energético que superó la crisis climática de mitad de año. Sin embargo, descartando este rubro, hubo un “pobre desempeño” de varios de los principales sectores de actividad. Análisis de la economista Florencia Carriquiry, de la consultora Deloitte.
Análisis económico
Miércoles 16.12.2015, hora 7.54
EMILIANO COTELO (EC) —Ayer se publicaron las cifras de Cuentas Nacionales correspondientes al tercer trimestre del año. Los datos marcaron una expansión del Producto Bruto Interno (PBI) de 1 % frente al trimestre inmediato anterior y de 0,6 % en la comparación interanual.
¿Qué pasó con la economía en el tercer trimestre, julio-setiembre? ¿Cómo fue el comportamiento por sectores? ¿Qué ocurrió con el consumo, la inversión, las exportaciones? Lo conversamos con la economista Florencia Carriquiry de la consultora Deloitte.
ROMINA ANDRIOLI (RA) —Había mucha expectativa en relación a este dato porque habíamos visto ya una leve caída del PBI en el trimestre abril-junio y los indicadores que se fueron conociendo en los últimos meses venían mostrando un desempeño malo en varios frentes. ¿Cómo vieron desde esa perspectiva el hecho de que el PBI finalmente creció en el tercer trimestre?
FLORENCIA CARRIQUIRY (FC) —Es cierto que creció, pero lo hizo con una fuerte contribución de electricidad, gas y agua, que más que se duplicó en términos de actividad respecto al segundo trimestre. Hay que recordar que en el segundo trimestre este sector había sido muy afectado por la sequía y habíamos visto una caída de 60 % en el valor agregado en este sector. Con lo cual hay un rebote de este sector que contribuyó de forma muy fuerte en el crecimiento del trimestre. De hecho, si tomamos el PBI sin electricidad, gas y agua para quitarle el impacto que tiene la volatilidad climática a este sector, el PBI bajó en el tercer trimestre 0,4 % en comparación con el trimestre anterior.
Con lo cual más allá de que no hubo dos trimestres consecutivos de caída [del PBI], que ese es todo un tema por la definición técnica habitual de recesión, la actividad económica tuvo un desempeño malo en el tercer trimestre del año. Sobre todo cuando se analizan las cifras en más profundidad: en el tercer trimestre la verdad es que volvimos a ver caídas bastante generalizadas a nivel de los componentes de la demanda y vimos también un pobre desempeño en varios de los principales sectores de actividad.
RA —¿Podemos comentar las principales cifras y conclusiones desde la perspectiva sectorial?
FC —Sí. Entre los desempeños más negativos volvió a destacarse el sector de la construcción, que tuvo una baja de casi 7 % en la comparación interanual. Este sector viene atravesando un contexto bien recesivo, con caídas de la actividad desde hace siete trimestres, y con un ritmo de caída que sigue siendo fuerte. En este tercer trimestre la actividad se redujo 2,6 % frente al segundo trimestre, que es más o menos lo mismo que ya había caído en el segundo trimestre frente al primero, enero-marzo.
También volvimos a ver caída en el sector comercio, restaurantes y hoteles, de 5,3 % en la medición interanual. Este es otro caso en el que la medición desestacionalizada volvió a dar una baja en este trimestre. Allí en particular estamos viendo un mal desempeño en la actividad comercial propiamente dicha, el mismo comunicado se encarga de destacarlo, sobre todo a nivel de rubros importados se están viendo caídas importantes de las ventas. Los giros más relacionados al turismo, restaurantes y hoteles, habrían crecido en relación a los niveles de un año atrás porque estamos con más actividad turística en este 2015.
Por el contrario, las cifras fueron de crecimiento en el sector de transporte y comunicaciones, aunque con tasas bastante inferiores a las que veníamos viendo en años anteriores. Puntualmente en este trimestre el sector creció 2,8 %, cuando venía creciendo a tasas de entre 6 % y 10 % anual en los tres años previos.
También la industria tuvo una variación positiva en el trimestre, de casi 2 %, que los datos del Instituto Nacional de Estadística ya nos lo habían adelantado. Pero estas mismas estadísticas nos permiten ver que el crecimiento en este trimestre fue explicado esencialmente la producción de pulpa de Montes del Plata y de jarabes y concentrados de PepsiCo. Si sacamos esas dos ramas puntuales en general el panorama de la industria está siendo recesivo también en el transcurso de 2015.
Finalmente, el sector donde sí tuvimos cifras mejores a las esperadas fue el de actividades primarias, que se aceleró para crecer 6,7 % interanual en este tercer trimestre del año. En eso jugó una mayor producción pecuaria, de carne en particular, y silvícola, por la mayor extracción de madera para el consumo de la planta de Montes del Plata.
RA —Decías antes que vieron caídas generalizadas a nivel de los componentes de la demanda. ¿Cuáles son las principales conclusiones en ese sentido?
FC —Desde la perspectiva de la demanda, la verdad que por segundo trimestre consecutivo se vieron cifras muy malas, con caídas en todos los componentes de la demanda, salvo el consumo público, es decir, el gasto público sin inversiones, que creció nuevamente algo menos de 2 % interanual.
El consumo privado, por ejemplo, volvió a caer, 1 % interanual, por segundo trimestre consecutivo. La inversión privada se contrajo 12 % y la pública más de 20 %, eso ya lo veníamos viendo en los datos fiscales que se divulgan mes a mes y abarca tanto al gobierno como a las empresas públicas. Está cayendo significativamente la inversión pública en este año poselectoral.
Por el lado de las exportaciones también volvimos a ver una caída, de 6 % interanual en este trimestre. Recordemos que es una caída que se da incluso pese a las mayores exportaciones de pulpa, porque tenemos en julio-setiembre de 2015 a Montes del Plata operando a pleno, y a que tuvimos un aumento de la actividad turística frente al año pasado, que es una exportación de servicios a los efectos de las Cuentas Nacionales.
RA —Pero, entonces, si cayeron casi todos los componentes de la demanda, ¿cómo es que el PBI termina creciendo?
FC —Es una buena pregunta. La verdad es que eso es posible porque al mismo tiempo del lado de la oferta cayeron muy fuertemente, un 13 %, las importaciones de bienes y servicios. Eso quiere decir que la caída que estábamos comentando en algunos componentes de la demanda no tiene como contrapartida menos PBI sino que es absorbida por menos demanda al resto del mundo.
El comunicado dice que, tal como veníamos viendo en las cifras mensuales de comercio exterior, se ve una caída de las importaciones muy generalizada tanto en bienes de consumo, como en bienes de capital e insumos intermedios. A nivel de servicios también estamos viendo menos importaciones de turismo, es decir, menos viajes de los uruguayos al exterior.
RA —Para terminar, a la luz de estas cifras, ¿cómo están viendo las perspectivas de actividad económica?
FC —Estamos en estos momentos revisando nuestros modelos de proyección incorporando las cifras que fueron divulgadas ayer en la tarde, pero en líneas generales los datos nos confirmaron lo que ya veníamos señalando: la actividad económica realmente tuvo un freno muy fuerte en 2015 y en el escenario externo y regional no estamos viendo que vayan a aparecer grandes impulsos de reactivación, más allá de que estamos con un mejor clima de expectativas en torno a Argentina y a que nos seguimos beneficiando de bajas en el precio del petróleo.
En ese marco, nosotros tendemos a pensar que nuestros últimos pronósticos, de un crecimiento de 1,5 % este año y aproximadamente 1 % en 2016, probablemente van a tener que ser revisados a la baja.