¿Cómo es la realidad actual del intercambio comercial entre Uruguay y EEUU? ¿Qué posibles amenazas puede enfrentar nuestro país ante el avance proteccionista en la principal economía del mundo? Análisis de la economista Florencia Carriquiry de la consultora Deloitte.
Emiliano Cotelo (EC): Desde que asumió la presidencia de los EEUU el pasado 20 de enero, Donald Trump ha avanzado de forma rápida en algunas de las líneas de acción en las cuáles centró su campaña electoral. En particular, el nuevo presidente americano ha sido categórico en su intención de proteger a la industria y el empleo de los americanos de lo que él considera son “amenazas del comercio internacional”.
Así, por ejemplo, en sus primeros días de gestión, Trump ha sido noticia por haber decretado la salida de EEUU del TPP (el famoso acuerdo del Trans-Pacífico), por anunciar que revisará el tratado del Nafta y por numerosas declaraciones en torno a aumentar aranceles a productos importados desde México o China, por ejemplo. Incluso, nuestros vecinos argentinos ya se vieron impactados directamente, a partir de la suspensión (a priori por 60 días) del ingreso de limones provenientes del país vecino.
Con este telón de fondo, entonces, nos pareció valía la pena analizar con más detalle la realidad actual del intercambio comercial entre Uruguay y EEUU y conversar sobre las posibles amenazas para nuestro país de este avance más proteccionista en la principal economía del mundo. Para eso estamos en contacto con la economista Florencia Carriquiry de la consultora Deloitte.
Florencia, comencemos por comentar las principales cifras en relación al intercambio comercial de Uruguay con EEUU… ¿Cuánto exportamos hacia este mercado concretamente?
Florencia Carriquiry (FC): Las exportaciones de Uruguay a EEUU en 2016 sumaron algo más de US$ 500 millones, cuando incluimos la celulosa que sale desde las Zonas Francas. Se trata de un monto casi 20 % menor al de 2015 y también ligeramente menor al de 2014, pero sigue siendo muy superior a los registros del período 2008-2013.
Si miramos la evolución histórica, EEUU ha estado siempre dentro de los diez principales destinos de exportación de nuestro país en la última década. En 2005 llegó a ser el principal destino de exportación de Uruguay a nivel de bienes, con ventas por más de US$ 760 millones. Pero, a partir de ese récord y sobre todo tras el estallido de la crisis internacional las ventas bajaron mucho y pasaron a ubicarse en torno de los US$ 200 millones anuales entre 2008 y 2010. En los últimos años y de la mano de la carne y de la celulosa sobre todo las exportaciones a EEUU mostraron una recuperación firme y alcanzaron un pico de más de US$ 630 millones en 2015… Esa recuperación, como decía, se interrumpió el año pasado, con una caída de las ventas de casi 20 %, como comentaba recién.
RA – ¿Cómo se compara eso con lo que vendemos a otros países? ¿Cuánto pesan las exportaciones a EEUU en el total de las exportaciones de Uruguay?
FC – El año pasado EEUU representó un 6 % de las exportaciones totales de bienes de Uruguay… Y con esa participación se ubicó como el cuarto mercado de exportación más importante para nuestro país, por detrás de China, Brasil y la Unión Europea.
RA – ¿Y cómo es el mix de productos que colocamos en este mercado? ¿Qué productos figuran entre los principales rubros exportados al mercado estadounidense?
FC – En la composición de nuestras exportaciones a EEUU hay un rubro que sobresale de forma notoria por su importancia, que es la carne… De hecho, la carne es desde hace muchos años el principal producto exportado a EEUU y por lejos. Concretamente, incluso cuando en 2016 las exportaciones de carne a EEUU cayeron significativamente, las ventas totales de carne y despojos comestibles al mercado americano se ubicaron en unos US$ 200 millones y significaron casi 40 % del total exportado a ese destino. Luego en segundo lugar, bastante atrás aparece la celulosa (con unos US$ 60 millones aproximadamente) y en tercer lugar los cueros y productos de cuero, con unos US$ 42 millones. Esto quiere decir que sólo estos 3 rubros (carne, celulosa y cueros) concentraron más de 60 % de las exportaciones uruguayas a EEUU el año pasado… Luego aparecen en un escalón más abajo, con ventas por entre US$ 25 y US$ 35 millones en el año, productos como dispositivos médicos de precisión, preparaciones de carne y pescado, productos de madera y frutos cítricos… y más abajo una gran diversidad de rubros, pero por montos mucho menores.
RA – Está claro. Y si miramos ahora la otra parte de nuestra balanza comercial con EEUU, es decir, las importaciones que Uruguay hace desde allí… ¿Cómo vienen evolucionando en los últimos años?
FC – Las cifras de importaciones desde EEUU tuvieron un crecimiento muy fuerte durante la primera década de los años 2000 y alcanzaron niveles máximos de más US$ 1.000 millones durante 2010 y 2014. Desde esos niveles en los últimos dos años vienen bajando significativamente. De hecho, según cifras preliminares, en 2016 las importaciones desde EEUU se habrían ubicado entre US$ 540 y US$ 550 millones y eso es 36 % menos que en 2015 y casi la mitad de lo importado entre 2010 y 2014.
De esa manera, EEUU representó en torno a 7 % de las importaciones uruguayas totales el año pasado y con esa participación se ubicó como el quinto mercado de origen de nuestras importaciones, por debajo (y bastante atrás) de China, la Unión Europea, Brasil y Argentina.
RA – ¿Y cuáles son los principales rubros en nuestras compras a EEUU?
FC – Nuestras importaciones desde EEUU están bastante más atomizadas que nuestras exportaciones hacia allí. En las cifras de 2016, los principales rubros importados fueron los teléfonos (en dónde se incluyen los celulares), que representaron 9 % del total importado y las computadoras (que significaron un 4 %) y luego hay una diversidad de rubros, entre los que se destacan sobre todo productos químicos y otros aparatos y maquinarias de diverso tipo.
RA – A partir de estos números, Florencia, ¿cómo queda nuestra balanza comercial con EEUU?
FC _- Como decía antes, en 2016 tuvimos exportaciones por algo más de US$ 500 millones e importaciones por unos US$ 550 millones. Eso supone un déficit para nuestro país, pero bastante acotado, del orden de los US$ 50 millones, que es un nivel muy bajo en una mirada histórica.
RA – Florencia, luego de repasar las principales cifras, ¿Cómo son las condiciones de acceso de nuestros productos al mercado estadounidense? Te lo pregunto porque de cara a una escalada proteccionista bajo el gobierno de Trump, el acceso a ese mercado puede complicarse, ¿verdad?
FC – A ver, en lo que hace a nuestras relaciones bilaterales con EEUU, hay que tener presente que más allá del TIFA (el Acuerdo Marco sobre Comercio e Inversión entre Uruguay y EEUU, que se firmó en 2007 y que de alguna manera dejó explicitada la intención de facilitar e incrementar las oportunidades de intercambio entre ambos países, pero sin el establecimiento de preferencias muy concretas) Uruguay no tiene ningún acuerdo bilateral particular con EEUU, que pudiera caer de forma inminente con el nuevo gobierno. Incluso, hasta 2016 Uruguay era beneficiario del Sistema Generalizado de Preferencias (que lo permitía junto con varios otros países emergentes tener exenciones arancelarias para algunos productos), pero a partir del 1 de enero ya perdió ese beneficio, por haber pasado a ser clasificado desde hace un tiempo como país de ingresos medios…
Este sistema básicamente permitía el acceso sin aranceles a productos como los cueros, los quesos, productos de madera y preparaciones de carne, por mencionar algunos de los más relevantes. Ahora, a partir de este año, todos los productos uruguayos pasan a ingresar aplicándose los aranceles de Nación Más Favorecida, que igualmente son bajos (en general, a nivel de los principales rubros exportados por Uruguay hacia EEUU, son aranceles menores a 2 %, salvo en la carne que están en torno a 10 % aproximadamente). En este último caso, hay que tener presente que Uruguay cuenta además con una cuota libre de aranceles de 20.000 toneladas anuales de carne de calidad.
En definitiva, Romina, es bien difícil saber cuáles pueden ser las principales amenazas para Uruguay, porque el Presidente Trump es un mandatario bastante impredecible, que no se rige por los modos o los mecanismos diplomáticos habituales, con lo cual podríamos decir que a priori todo nuestro comercio con ese país está “bajo riesgo”, pero hoy no vemos amenazas muy inminentes para los principales rubros exportados por nuestro país. Dicho eso, es evidente que cualquier deterioro en las condiciones de acceso en la carne, los cueros, la madera o los cítricos serían golpes duros para estos sectores, dada la importancia que tiene en todos esos casos el mercado estadounidense.
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