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Industria manufacturera cayó solo 0,1 % en mayo: análisis y perspectivas

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En mayo la actividad de la industria manufacturera cayó 0,1 % en comparación con el mismo mes de 2015. Sin embargo, en esas cifras influye la actividad de la refinería de Ancap. Sin considerar a la refinería, la producción manufacturera se contrajo 1,7 %, lo que igualmente supone una caída muy inferior a la que se había registrado en abril, cuando la industria –sin tomar en cuenta a la refinería– se retrajo más de 10 %. Análisis del economista Pablo Rosselli de la consultora Deloitte.

Análisis económico
Jueves 14.07.2016

EMILIANO COTELO (EC) —Con estas cifras sobre la mesa, les proponemos analizar con más detalle el desempeño que está mostrando la industria manufacturera en lo que va del año y conversar de las perspectivas, con el economista Pablo Rosselli de la consultora Deloitte.

ROMINA ANDRIOLI (RA) —Pablo, recién comentaba Emiliano que en mayo la producción industrial tuvo un descenso leve, pero que sin considerar la refinería sufrió una caída algo mayor (concretamente de 1,7 %) ¿Cómo analizan ustedes estas últimas cifras de la industria?

PABLO ROSSELLI (PR) —En general los datos de producción industrial de mayo siguieron marcando un panorama recesivo en el sector, más allá de que estas últimas cifras resultaron bastante mejores que las de abril, cuando la producción manufacturera sufrió una baja de más de 7 % frente a los niveles de un año atrás y de más de 10 % sin la refinería.

Además, cuando miramos en más detalle los datos de mayo, no sólo hubo una contribución significativa de la refinería, tal como mencionaba Emiliano al inicio, sino que también vimos una mayor producción de celulosa y de alimentos diversos (aunque con una suba de menor magnitud en este último caso)

Con lo cual, lo que en Deloitte denominamos “núcleo de la industria manufacturera”, que excluye a esas tres ramas (la fabricación de celulosa, la de alimentos diversos y la refinería), tuvo un desempeño bastante peor que la industria total. Y como comentamos otras veces, este indicador de núcleo a nuestro juicio refleja de mejor manera lo que está sucediendo con la industria en términos más generales, al no contemplar a esas tres ramas que esencialmente se mueven en función de cuatro empresas muy grandes (como son la refinería de Ancap, UPM, Montes del Plata y Pepsico).

RA —¿Cómo evolucionó concretamente el “núcleo de la industria” en mayo?

PR —El núcleo de la industria cayó más de 4 % frente a mayo de 2015…Fue una baja menor que la vista en abril (cuando se redujo 7,4 % en la comparación interanual) pero sigue marcando un escenario de franca retracción en el sector. De hecho, en lo que va del año el núcleo industrial acumula una caída de más de 5 % frente a los niveles de un año atrás.

Con lo cual, este indicador, que se había mantenido virtualmente estancado entre 2011 y 2014, consolidó una tendencia bajista desde inicios de 2015 y actualmente está en los menores niveles desde finales de 2010.

Además, Romina, esto se condice con una contracción muy significativa del empleo industrial en estos últimos años.

RA —¿Podemos comentar esas cifras? ¿Qué están marcando los últimos datos relacionados al empleo en el sector manufacturero?

PR —Concretamente, las horas trabajadas se ubicaron en mayo 3 % por debajo de los niveles de un año atrás y acumularon una baja interanual de más de 7 % en enero-mayo. De esa manera, estamos en los menores registros desde inicios de los años 2000… Como comentamos otras veces, si bien la industria ha venido destruyendo empleo de forma sistemática en los últimos años, el ritmo de caída de las horas trabajadas se hizo notoriamente más intenso desde mediados de 2014.

RA —¿Y qué muestran los datos a nivel de ramas? ¿Cuán generalizada está siendo la caída de la actividad manufacturera?

PR —La contracción de la actividad industrial está siendo bastante generalizada. Hay algunas ramas que están teniendo desempeños particularmente malos, como la industria pesquera, la industria del caucho, los textiles, algunas ramas metalúrgicas y metalmecánicas o la industria automotriz (por mencionar algunos de los casos más relevantes), pero la tónica de caída es general. Nosotros en Deloitte elaboramos un indicador que llamamos de "difusión del crecimiento industrial", que mide el porcentaje de ramas que crecen frente a los niveles de un año atrás. Ese indicador mostró cierta mejora en mayo (respecto a abril) pero en tendencia se mantuvo por debajo de 40 % en lo que va del año… Con lo cual, estamos diciendo que una amplia mayoría de las ramas relevadas está en retracción en estos últimos meses.

RA —Con estos últimos datos, entonces, ¿cómo están viendo las perspectivas para los próximos meses?

PR —A ver… hay que tener claro que el panorama para la industria sigue siendo difícil. Como comentamos otras veces, las ramas más exportadoras están sufriendo el enlentecimiento de la demanda externa y una caída fuerte de los precios de venta, que hasta el momento no ha sido compensado por un ajuste comparable a nivel de los costos…A nuestro juicio Uruguay sigue estando caro frente a varios clientes y competidores importantes y el freno que mostró el dólar en los últimos meses conspira contra la necesaria corrección de costos que sigue precisando el sector productivo local.

Además, para las ramas de mayor inserción regional, la situación es particularmente complicada porque a las dificultades de competitividad se agrega que estamos con una situación clara de recesión en ambos países vecinos.

Y finalmente, las ramas más destinadas al mercado interno también sufren el freno de la demanda, porque el consumo está cayendo moderadamente y la inversión está en contracción.

En ese escenario nos parece que las perspectivas para la industria manufacturera son malas en términos generales…

RA —¿Qué proyecciones están manejando concretamente para 2016 y 2017?

PR —Nosotros estamos esperamos una caída de la producción manufacturera tanto este año como el próximo, de aproximadamente 2,5 % por año. De todos modos, es importante advertir que en esos números inciden de forma clave las paradas por mantenimiento que va a estar realizando la refinería de Ancap en el tercer trimestre de este año y en la primera mitad de 2017. Por el peso que tiene esta rama (de más de 15 % en el total según el INE), el hecho de que paralice sus actividades por varias semanas en cada año va a distorsionar evidentemente la evolución de la producción manufacturera en el período…

En cualquier caso, sin contemplar ese efecto, la visión implícita en nuestros pronósticos es que la producción del núcleo industrial va a seguir teniendo un pobre desempeño en los próximos meses y que comenzaría a mostrar cierta reactivación en el transcurso de 2017. Ahora, la expectativa de una gradual recuperación a nivel de la producción industrial el año próximo descansa, en buena medida, en el supuesto de que nuestro país sigue abaratándose en dólares y corrigiendo competitividad… Eso necesariamente supone un dólar que retoma una tendencia alcista en los próximos meses.

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Foto en Home: Planta de la empresa uruguaya Unión Metalúrgica Industrial del Sur (Umissa) en Capurro, Montevideo, foto ilustración. Crédito: Javier Calvelo/adhoc Fotos.

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