El Índice de Precios del Consumo aumentó apenas 0,1 % en mayo y, de esa manera, la medición anual de la inflación bajó nuevamente y se ubicó en 5,6 %. Con estas cifras, la inflación no solo se mantuvo por tercer mes consecutivo dentro del rango objetivo del Banco Central (que, como recordarán, va de 3 % a 7 %), sino que, además, se ubicó en el menor valor desde diciembre de 2005.
Emiliano Cotelo (EC):Para analizar las últimas cifras y conversar sobre los pronósticos en materia de inflación conversamos con la economista Florencia Carriquiry, de la consultora Deloitte.
Romina Andrioil (RA) – Florencia, ¿cómo vieron estas cifras de inflación de mayo? ¿Esperaban que la inflación anual cayera por debajo de 6 %?
Florencia Carriquiry (FC): Sí. Nuestros pronósticos ya nos estaban marcando una nueva baja de la inflación en mayo, hacia niveles menores a 6 % en términos anuales. Con lo cual, desde esa perspectiva no hubo sorpresas.
De todos modos, al igual que en abril, el dato efectivo del mes de mayo fue incluso menor al que teníamos en nuestras proyecciones y también al que pautaba la mediana de la Encuesta de Expectativas del Banco Central. En nuestras estimaciones manejábamos un aumento del IPC de 0,3 % en el mes y la mediana de la Encuesta del BCU estaba en 0,4 %… y el dato efectivo terminó siendo de 0,1 %, como mencionaba Emiliano recién… se trata de un error de pronóstico que podemos considerar alto para un solo mes…
Ahora, al menos en nuestra sobreestimación de la inflación de mayo incidió significativamente una menor inflación en alimentos en general, pero, sobre todo, a nivel de los precios de las frutas y verduras, que volvieron a caer el mes pasado… algo que nosotros no teníamos contemplado en nuestras cifras…
RA – ¿Cuánto bajaron los precios de las frutas y verduras el mes pasado? Ya llevan acumulada una caída fuerte en el último año ¿verdad?
FC –En promedio los precios de las frutas y verduras bajaron 2,4 % en el mes, con un descenso de 2,8 % a nivel de las frutas y de 2,2 % en las verduras. De esa manera, en lo que va del año nomás (es decir si comparamos con los valores de diciembre de 2016) las frutas y verduras vienen cayendo 10 % y si miramos los últimos doce meses el componente frutas y verduras acumula una baja de casi 14 %… Hay que tener presente, como comentamos otras veces, que las frutas y verduras habían tenido subas extraordinarias en la primera parte de 2016 debido a problemas climáticos que afectaron la oferta y eso, como era previsible, se fue revirtiendo desde mediados del año pasado a esta parte…De hecho, en mayo de 2016 justamente habíamos visto una suba de precios de las frutas y verduras de 10 % en el mes. Con lo cual incluso sin considerar una baja de precios en mayo de este año, era esperable que la medición doce meses de este componente cayera mucho…
RA – Está claro… ¿Y qué podemos esperar para adelante en estos precios? ¿Qué hipótesis manejan ustedes para las frutas y verduras en sus proyecciones de inflación?
FC – La verdad, Romina, es que es un componente muy volátil y complicado de proyectar, porque los vaivenes de la oferta son muy difíciles de prever… Como venimos marcando desde abril, a priori no esperaríamos bajas adicionales muy significativas de los precios de estos productos, porque en una comparación histórica el shock de precios del año pasado ya se revirtió … o en otros términos… hoy los precios de las frutas y verduras están en niveles, en términos reales, que podríamos considerar “normales” en una perspectiva histórica. Por lo tanto, en nuestros pronósticos contemplamos subas muy modestas de las frutas y verduras en los próximos meses (relativamente alineadas con la inflación total)… aunque en la comparación con los niveles de un año atrás vamos a seguir viendo caídas muy fuertes…
Pero incluso, Romina, también es cierto que las buenas condiciones climáticas que estamos viendo pueden terminar derivando en un abaratamiento de estos productos todavía más intenso… Como comentábamos el mes pasado, podemos irnos para el otro lado y pasar de tener precios de frutas y verduras “excepcionalmente altos” en 2016 a precios “excepcionalmente bajos” este año… Tendremos que ver qué sucede en estos próximos meses del invierno, que suelen ser meses de mayores subas en estos productos.
RA – Florencia y más allá de ese comportamiento de las frutas y verduras, ¿cómo fue la evolución del resto de los componentes del IPC en mayo? ¿Podemos comentar las principales cifras?
FC – Sí, claro. Si miramos el núcleo del IPC, lo que nosotros llamamos inflación subyacente (es decir, sin considerar frutas y verduras y tampoco precios administrados) se ubicó en 0,3 % en mayo y en términos anuales bajó a 6,2 %. Estamos hablando de una inflación subyacente más de 4 puntos porcentuales menor a la que teníamos un año atrás, que nos marca a las claras, la moderación fuerte de las presiones inflacionarias que hemos visto en el último año.
En particular, como comentamos en meses anteriores, los precios transables (es decir, los precios de los bienes que se comercian con el exterior y que por tanto están más directamente impactados por el tipo de cambio) subieron apenas 0,1 % en mayo y en los últimos doce meses acumulan un incremento de apenas 3 %. Y eso, como es evidente, tiene que ver con la evolución que ha tenido el dólar. En mayo, puntualmente, el tipo de cambio se ubicó apenas por encima de $ 28,10 (en el promedio del mes)… bajó 1 % frente al promedio de abril y lleva acumulada una baja de 10 % en los últimos doce meses…
RA – ¿Y cómo fue la evolución a nivel de los precios no transables, en donde el dólar incide menos? En análisis anteriores en este espacio, ustedes venían marcando que en ese otro componente del IPC la moderación era mucho menos marcada… ¿Qué mostraron los datos de mayo?
FC – A nivel de los precios no transables efectivamente la moderación ha sido mucho menos fuerte, aunque mes a mes viene observándose una gradual desinflación también de este componente… Concretamente, la inflación no transable en los últimos doce meses a mayo se ubicó en 9 % y si no incluimos el tabaco (que ha tenido aumentos excepcionales por ajustes del IMESI), el resto de los precios no transables acumulan un incremento de 8,6 % en el último año. Son niveles sin dudas muy superiores a los que comentábamos recién para los precios transables, pero igualmente marcan una moderación importante frente a los registros de la primera parte de 2016, cuando la inflación no transable estaba en más de 11 %. A nuestro juicio, este componente va a mantener una tendencia bajista lenta pero sostenida en los próximos meses, reflejando que en los acuerdos salariales de la última ronda se han tendido a pactar ajustes menores que en rondas previas…
RA – Entonces, yendo justamente a las proyecciones… ¿qué están esperando para los próximos meses? Supongo que estas últimas cifras les reafirman la visión de que la inflación va a mantenerse en el rango objetivo en lo que resta del año… ¿no es así?
FC – Sí, es así. Como comentamos en otras oportunidades, hace algunos meses que nuestros modelos de proyección están marcando que la inflación va a permanecer dentro del rango objetivo en lo que resta de 2017 y, como decís, las cifras más recientes nos vienen ratificando esa visión. Aún estamos en proceso de actualización de las proyecciones, pero nuestros últimos pronósticos apuntaban a una inflación cerrando este año entre 6 % y 6,5 %.
Por supuesto y como hemos discutido otras veces, esto descansa en buena medida en el supuesto de que el dólar va a permanecer en niveles muy bajos (cerrando 2017 entre $29 y $30). Pero, al mismo tiempo, Romina, en esos números no tenemos contemplado una rebaja de tarifas… algo que en estas últimas horas el Ministro Astori ha señalado que se está estudiando… Si se confirma una rebaja del gasoil, como se ha mencionado, o de algún otra tarifa o precio administrado, podemos ver una inflación todavía menor a la que marcábamos.
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