Si bien el fin de semana llegaron las esperadas lluvias a nuestro país, éstas no fueron parejas a nivel del territorio nacional. Mientras que, en algunos puntos, como aquí en Montevideo, llovieron más de 100 milímetros entre sábado y domingo, en otras zonas las lluvias fueron muy escasas. En particular, en algunos departamentos del litoral oeste, el corazón agrícola del Uruguay por excelencia, se registraron menos de 20 milímetros, por lo que se continúa agudizando el déficit hídrico que viene sufriendo esa zona desde el comienzo del verano.
Emiliano Cotelo (EC): Como es evidente, esta situación preocupa y mucho a los productores agrícolas, en la medida en que se siguen deteriorando las perspectivas para el cultivo de soja… cuando justamente en ese cultivo estaban puestas las últimas esperanzas para, por decirlo de alguna manera, “salvar” este ejercicio agrícola.
¿Qué podemos esperar entonces para esta campaña de verano que está en curso? ¿Cómo estaría cerrando el ejercicio 2017/2018 para la agricultura de secano? Lo conversamos con la economista Florencia Carrquiry, de la consultora Deloitte.
Romina Andrioli: Florencia, Emiliano recién adelantaba que en buena parte del litoral las lluvias fueron muy escasas este fin de semana y que los impactos de la sequía se siguen agravando por esa zona… Podemos decir que es casi un hecho que los rendimientos de la soja van a sufrir una caída fuerte este verano, ¿verdad?
Florencia Carriquiry (FC): Lamentablemente sí. Más allá de que para algunas chacras las lluvias que se venían anunciando para este fin de semana ya estaban llegando tarde (los cultivos ya estaban arruinados) el hecho de que prácticamente no haya llovido en el litoral es una muy mala noticia. Como bien decía Emiliano, el litoral oeste es el corazón agrícola de nuestro país… Según cifras que estimamos en el marco de una consultoría que venimos realizando anualmente para la Mesa de Oleaginosos, los departamentos del litoral concentran 70% del área sojera. Y, además, en estas zonas, los rindes tienden a ser mayores que en el resto del país, por lo que la importancia del litoral en la cosecha de soja es aún mayor a ese 70%.
En ese sentido, si bien la sequía que venimos viendo desde comienzos de año ya nos permitía adelantar que los rendimientos iban a tener una caída fuerte en esta campaña de verano, el hecho de que la seca esté afectando en mayor medida justamente a esa zona del litoral agrava de forma particular las perspectivas en torno a la producción de soja de este año.
RA – ¿Qué expectativas concretamente tienen ustedes para esta próxima cosecha de soja, Florencia?
FC – Hasta el momento nosotros venimos trabajando con un supuesto de rendimiento promedio país en torno a los 2.000 kilos por hectárea. Eso supone una caída de más de 30% frente al verano pasado (que había sido un récord histórico) y supone unos 400 kilos menos por hectárea que en el promedio de las últimas cinco campañas. Con esa cifra de 2.000 kilos por hectárea y un área que bajó levemente según estimaciones preliminares, estaríamos hablando de una cosecha de soja que apenas alcanzaría los 2,4 millones de toneladas, cayendo casi 40% frente a la del año pasado.
Ahora, por estas horas hay quienes están hablando de rendimientos incluso peores… que no superarían los 1.800-1.900 kilos por hectárea a nivel promedio país y todavía más bajos en las regiones más afectadas… Con lo cual la contracción de la producción puede ser todavía más importante.
En cualquier caso, Romina, es claro que los rendimientos van a estar cayendo fuertemente frente al verano pasado y eso va a tener impactos muy importantes en los resultados económicos de los productores agrícolas.
RA – Ahora, al mismo tiempo los precios de la soja vienen mejorando… ¿verdad?
FC – Es cierto. La sequía, que también está viéndose en Argentina, que es el tercer exportador mundial de soja, está alentando subas en las referencias internacionales en las últimas semanas. Concretamente, pasamos de valores en Chicago en torno a US$ 350 por tonelada hasta mediados de enero a precios que han estado oscilando entre US$ 380 y US$ 390 por tonelada en lo que va de marzo. Y eso a nivel local supone cotizaciones de US$ 370 o US$ 380 por tonelada actualmente… En números redondos estamos hablando de valores entre 5% y 10% superiores a los de la zafra pasada.
Además, al mismo tiempo, los costos de implantación del cultivo también bajaron en esta campaña, sobre todo porque habíamos visto en el verano pasado un sobre costo de la semilla muy importante, fruto de la situación de escasez que derivó de los malos resultados productivos del verano 2016…
Pero ni los menores costos ni los mejores precios van a alcanzar para compensar el efecto de la caída de los rendimientos que estamos esperando.
RA – ¿Cómo estarían cerrando los números del cultivo de soja, según sus estimaciones, Florencia?
FC – Según nuestras estimaciones, si los rindes se ubican en torno a los 2.000 kilos por hectárea, el margen del cultivo de soja, antes de la renta de la tierra, se ubicaría en unos US$ 200 por hectárea en promedio. Eso supone un descenso de 40% frente al verano pasado (que había sido muy bueno para la soja). Y, como decía antes, esos 2.000 kilos por hectárea están quedando incluso algo largos para algunas zonas del país al menos… por lo que el deterioro de los márgenes puede ser bastante más importante.
Además, Romina, estamos hablando de un margen de US$ 200 por hectárea antes de la renta de la tierra, que según las últimas cifras de DIEA (del primer semestre de 2017), está en unos US$ 220 por hectárea por año en el promedio del país, para lo que es tierra agrícola.
Con lo cual, con las cartas vistas hasta el momento, parece bastante claro que esta zafra de soja va a cerrar con una caída fuerte de los márgenes… y si a eso le sumamos que los cultivos de invierno de la última campaña arrojaron pérdidas importantes en general, estamos completando un ejercicio agrícola muy malo…En el caso de los arrendatarios de la tierra, en particular, seguramente veamos pérdidas importantes.
RA – Está claro. Por último, Florencia y antes de terminar, más allá de esa perspectiva micro (que hace referencia a los resultados a nivel del productor) hay una perspectiva macro también importante… Me refiero a que estas estimaciones que estás compartiendo para la cosecha de soja de este verano van a tener un impacto significativo en las exportaciones de este año, ¿verdad?
FC – Claramente. Como señalaba antes, hoy todo parece indicar que la cosecha de soja va a tener una caída de por lo menos 40%. Si tenemos en cuenta que estamos hablando del tercer rubro más importante de las exportaciones uruguayas (sólo detrás de la celulosa y la carne en 2017), es evidente que el impacto se va a sentir en las cifras de las exportaciones uruguayas de este año. Según nuestras estimaciones, estaríamos perdiendo en números redondos unos US$ 450 millones de exportaciones de soja frente al año pasado… y esa cifra sólo puede aumentar si la seca se sigue extendiendo.