La economista Tamara Schandy de la consultora Deloitte dijo que la pérdida del grado inversor de Brasil tendrá su mayor impacto por el tipo de cambio, dado que el dólar subirá en el país norteño y eso pondrá más “presión” en Uruguay.
Ante ese panorama consideró que hay dos escenarios posibles: Por un lado, en Uruguay podría dejarse que el dólar suba, lo que incrementaría las presiones inflacionarias. O, en cambio, podría suceder que el gobierno priorice el frente inflacionario, manteniendo el nivel actual de tipo de cambio, lo que generaría un escenario muy complejo en materia de competitividad, afirmó. Para la economista esto tendría un impacto a la baja en la economía local.
En síntesis, indicó Schandy, esta noticia aumenta la posibilidad de que en Uruguay haya un dólar más alto, se incremente el riesgo de que la inflación se sitúe en dos dígitos, y que el nivel de la actividad económica descienda.
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