Foto: Daniel Rodriguez /adhocFOTOS
EMILIANO COTELO (EC): Entre abril y junio, se registraron 1.197.000 viajes al exterior, una cifra que más que duplica los niveles habituales previos a la pandemia.
Buena parte de esos viajes tuvieron como destino Argentina, debido al atractivo que implica la diferencia cambiaria.
La semana pasada el Ministerio de Turismo presentó las cifras oficiales de turismo correspondientes al segundo trimestre del año, así que vamos a aprovechar para conocer en detalle esa información y sobre todo preguntarnos: ¿Qué implicancias tiene este panorama a nivel del turismo en la economía uruguaya en general?
Sobre esto vamos a conversar con la economista Florencia Carriquiry, socia en Exante.
ROMINA ANDRIOLI (RA): Emiliano recién destacaba que durante abril-junio volvimos a ver cifras muy altas de viajes al exterior, ¿podemos comenzar comentando esos datos?
FLORENCIA CARRIQUIRY (FC): Sí, claro. Como mencionaba Emiliano y al igual que veníamos viendo en trimestres anteriores, en el segundo trimestre los viajes al exterior siguieron muy dinámicos y sumaron casi 1,2 millones. Se trata de una cifra incluso levemente mayor a la del primer trimestre, que ya había marcado un récord y, de esa manera, se completó un semestre extraordinario para el turismo emisivo. Concretamente, en la primera mitad del año hubo más de 2,3 millones de viajes de residentes uruguayos al exterior, un 127% más que en el mismo período de 2019 (como referencia pre-pandemia) y un máximo histórico por amplio margen.
RA: Y eso sigue siendo impulsado por los viajes hacia Argentina, ¿verdad?
FC: Exactamente. Al igual que en los trimestres anteriores, ese dinamismo del turismo emisivo se explica esencialmente por las salidas hacia Argentina, que se están viendo alentadas por el abaratamiento extraordinario que ha tenido el país vecino. De hecho, de esos 2,3 millones de viajes realizados por residentes uruguayos al exterior en enero-junio, casi 1,9 millones fueron viajes hacia Argentina, lo que implica un crecimiento de casi 180% frente al mismo período de 2019. Mientras tanto, los viajes hacia Brasil también se incrementaron, pero en mucho menor magnitud (un 67% frente al primer semestre de 2019) y, por el contrario, los viajes hacia el resto del mundo (más allá de los dos países vecinos) todavía están casi 20% por debajo de los niveles del primer semestre de 2019.
RA: ¿Y cuánto gastamos los uruguayos en viajes al exterior en esta primera parte del año?
FC: En la medida en que estamos viendo una mayor concentración de viajes hacia la región (y en particular hacia Argentina), el gasto medio por viaje ha bajado significativamente respecto a los parámetros pre-pandemia y por eso cuando miramos las cifras en términos de gasto, el crecimiento es de menor magnitud que en términos de cantidad de viajes. Concretamente, entre enero y junio los residentes en Uruguay gastamos unos US$ 950 millones en viajes al exterior, lo que implica un 33% más que en el mismo semestre de 2019 y también supone un récord histórico. De ese total, algo más del 60% (es decir, unos US$ 600 millones) se gastaron en Argentina.
Con estas cifras, el saldo neto de turismo está teniendo un deterioro muy fuerte, porque, aunque el turismo receptivo también está teniendo una recuperación frente a los mínimos de los tres años anteriores (afectados por la pandemia), es una recuperación más lenta y estamos todavía lejos de los máximos históricos a nivel de turismo receptivo.
RA: Vayamos a eso, a la otra parte de la balanza: ¿qué pasó en el segundo trimestre a nivel de turismo receptivo, es decir, de llegada al país?
FC: Según estas últimas cifras, en abril-junio ingresaron al país unos 758.000 visitantes. Se trata de una muy buena cifra también. Es un 46% más que en el mismo trimestre de 2022 y un 26% más que en el segundo trimestre de 2019 (como última referencia pre-pandemia). De hecho, es un récord histórico para un segundo trimestre del año. Y, de esa manera, en el conjunto del primer semestre, el ingreso de visitantes alcanzó a 1.980.000 personas, que es una cifra que más que duplica la del primer semestre de 2022 y es alta también en una mirada más larga (sólo menor a los picos de 2017 y 2018).
Sin embargo, cuando se miran estos datos en más detalle, la verdad es que hubo dinámicas muy particulares por país de origen.
RA: A ver ¿a qué te estás refiriendo con eso? ¿Qué marcaron los datos por país de origen de los visitantes?
FC: Un primer comentario, que ya hemos hecho al analizar cifras de trimestres previos, es que seguimos viendo un ingreso extraordinario de uruguayos residentes en el exterior. Concretamente, en el segundo trimestre fueron unos 238.000 los uruguayos residentes en el exterior que ingresaron al país, lo que marcó un nuevo máximo histórico. Eso dejó, en el conjunto del semestre, un ingreso de casi 414.000 uruguayos no residentes, casi 120% más que en el mismo semestre de 2022 y más de 70% superior al de ese período en 2019.
En ese sentido, si nos concentramos en turistas extranjeros exclusivamente, estamos hablando de unos 518.000 visitantes en el trimestre y más de 1.560.000 en el semestre. También es una cifra alta en comparación histórica pero en este caso no es un récord, porque es menor a los picos del primer semestre de 2017 y de 2018 (cuando llegaron a ingresar casi 2 millones de visitantes extranjeros). Y eso es esencialmente por lo que sucede a nivel de los argentinos.
De hecho, el ingreso de visitantes argentinos en el segundo trimestre fue de menos de 275.000, una cifra mayor a la de 2022 pero menor a las de los años pre-pandemia. Y eso contrasta con lo que se observa a nivel de otros orígenes, en donde tanto en el segundo trimestre como en el conjunto del semestre estamos viendo un ingreso de visitantes muy alto, en general en niveles máximos históricos.
RA: En ese marco, entonces, ¿a cuánto ascendió el gasto de los turistas en nuestro país en lo que va del año?
FC: En el conjunto de enero-junio los turistas que llegaron al país gastaron unos US$ 1.018 millones. Eso es una cifra muy superior a la del mismo período del año pasado pero todavía inferior a los niveles pre-pandemia. En dólares corrientes es una cifra 4% menor a la del primer semestre de 2019 y si corregimos por la inflación acumulada en el período, estamos hablando de un gasto 19% menor en términos reales al del primer semestre de 2019.
RA: ¿Y cómo quedó entonces el saldo neto de turismo en este primer semestre?
FC: Repasando las cifras que recién fuimos comentando. El gasto de los uruguayos en viajes al exterior alcanzó a casi US$ 950 millones, mientras que el gasto de los turistas que llegaron al país ascendió a unos US$ 1.018 millones. Eso nos dejó con un saldo neto apenas positivo en el semestre (de menos de US$ 70 millones). De hecho, ese saldo positivo recoge el superávit acumulado en la temporada, porque en el segundo trimestre el saldo fue negativo en más de US$ 200 millones.
RA: Frente a este panorama, ¿qué podemos esperar para adelante?
FC: En la medida en que la situación de precios relativos con Argentina se mantenga en niveles tan desfavorables para Uruguay, nosotros tendemos a esperar que el turismo emisivo se va a mantener firme en lo que resta de este año y en 2024 (aunque probablemente bajando algo desde los picos de estos últimos dos trimestres) y estimamos que el gasto de los uruguayos en el exterior alcanzaría un máximo este año, de más de US$ 1.800 millones. Eso dejaría un saldo neto de turismo levemente deficitario en el conjunto de este año y quizás volviendo a ser positivo en 2024 pero permaneciendo según nuestros pronósticos en niveles muy reducidos.
Es algo fuerte para nuestro país, que tradicionalmente ha sido un exportador neto de servicios turísticos.
RA: Sin dudas, desde esa perspectiva, una última pregunta antes de terminar: ¿cómo impacta esta situación en la economía local?
FC: Los impactos son varios y de distinto tipo. Es indudable que estamos viendo un desvío de consumo muy fuerte hacia el exterior (en particular hacia Argentina) y eso afecta a los negocios de consumo a nivel local. Los efectos son muy directos y fuertes en el litoral del país, pero lo cierto es que el consumo que los uruguayos hacemos fuera de frontera es consumo que se fuga del país, o en otros términos, es menos ingreso disponible para gastar en la economía local. Según las cifras que recién comentábamos, el gasto de los uruguayos en el exterior podría superar los US$ 1.800 millones este año. Eso es unos US$ 680 millones más de gasto en el exterior que en 2022. Estamos hablando de casi 1 punto del PIB, que equivale a casi 1,5 puntos del consumo de los hogares. ¿A qué voy con esto? A que si bien en Exante prevemos que el consumo crezca este año (en torno al 3%), según estos números la mitad de ese crecimiento del consumo se estaría realizando fuera de fronteras, sin generar derrames en la economía local. Y si a eso le agregamos un escenario donde presumiblemente también estamos viendo un mayor contrabando, la situación para algunos negocios de consumo es realmente compleja.