Análisis Económico

Encuesta de expectativas empresariales de Exante: Principales resultados

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87 % opina que la situación económica es peor que un año atrás

EMILIANO COTELO (EC): Exante dio a conocer ayer los resultados de su Encuesta de Expectativas Empresariales. Se trata de un relevamiento que recoge la opinión de unos 300 ejecutivos de empresas nacionales y multinacionales sobre la situación económica, el clima de negocios y las perspectivas de sus propias empresas. 

¿Cuáles son las principales conclusiones? Lo conversamos con la economista Tamara Schandy.

Tamara, inauguraron esta primera edición de la Encuesta de Expectativas Empresariales en un momento muy particular, en plena crisis del coronavirus. ¿Cómo afectó esta coyuntura de emergencia sanitaria a la evaluación que hacen los empresarios sobre la situación económica? 

TAMARA SCHANDY (TS): Como era esperable, la enorme mayoría de los ejecutivos consultados opinó que la situación económica es peor que un año atrás. El porcentaje concreto de quienes opinan así fue 87 %. En el último relevamiento de expectativas empresariales que habíamos hecho (en octubre del año pasado) había también muchas respuestas negativas, pero no llegaban a sumar 70 %.

Cuando les preguntamos específicamente por el impacto del coronavirus en sus empresas, las respuestas apuntan a un impacto severo, pero también relativamente transitorio. El 90 % dijo que su empresa se verá afectada y 2 de cada 3 de los ejecutivos consultados dijeron que esperan una caída de sus ventas de al menos 10 % como consecuencia de la crisis sanitaria. Sin embargo y por lado positivo, destaco que la mayoría (el 67 % específicamente) sostuvo que espera que los impactos duren 6 meses o menos. 

Y en términos más generales y siguiendo en esta misma línea positiva, destaco también cuando les consultamos sobre las perspectivas la economía uruguaya, el 52 % espera una mejora en el próximo año. Un 16 % espera que la situación económica esté más o menos igual y un 33 % que esté peor, pero aclaro que ya teníamos un porcentaje similar de “pesimistas” en la encuesta de octubre del año pasado. 

EC: En su informe también mencionan que a pesar de esta coyuntura recesiva que estamos atravesando en estas semanas, las empresas perciben una incipiente mejora del clima de negocios. ¿Podemos repasar esos números? 

TS: Por supuesto. Nuestro equipo hace muchos años que viene haciendo una medición sistemática del clima de expectativas empresariales y haciendo las mismas preguntas en cada edición de la encuesta. En forma progresiva desde 2010 pero más acentuada a partir de 2015, se había visto un deterioro fuerte de la evaluación que hacían los ejecutivos del clima de negocios. El año pasado, en particular, menos del 15 % decía que era “bueno o muy bueno”, más del 30 % decía que era “malo” y el resto opinaba que era “regular”. En esta medición, los que opinan que es “bueno o muy bueno” subieron a 32 %. Sigue habiendo un 28 % que dijo que es “malo o muy malo”, pero las respuestas positivas se duplicaron y los que dicen que es “regular” bajaron de 56 % a 39 %. 

Una posible hipótesis es que esto tiene que ver con el cambio de gobierno, pero no pedimos fundamentación de las respuestas. Destaco que es además un giro consistente con la respuesta a otras preguntas de la encuesta. Por ejemplo, a pesar de que hemos ingresado en un contexto de recesión severa, las proyecciones de PIB que manejan los ejecutivos para el mediano plazo (les preguntamos por “dentro de 3 o 4 años”, justamente para salir de la mirada de corto plazo), también mejoraron.

EC:  ¿Cuán grande es esa mejora? 

TS: Es moderada. Y la proyección en sí es moderada. En promedio, los ejecutivos esperan que la economía crezca a un ritmo de 2,3 % anual “en 3 o 4 años”. Pero si miramos la distribución de las respuestas, el porcentaje de quienes contestan que el PIB va a crecer menos de 2 % bajo en unos 15 puntos porcentuales respecto al relevamiento de octubre, mientras que subieron los que esperan que crezca entre 2 % y 3 % y entre 3 % y 4 %. 

EC: ¿Qué visión recogieron entre los ejecutivos sobre el panorama de empleo en sus empresas? Te lo pregunto porque es un tema particularmente sensible en la actualidad, con casi 200.000 solicitudes de seguro de desempleo desde mediados de marzo. 

TS: Hace tiempo veníamos viendo empresarios muy reticentes a contratar más, aún en tiempos en los que la economía presentaba algunas señales de mayor dinamismo. En esta oportunidad, el coronavirus parece reforzar la tendencia. Quienes esperan que el empleo en su empresa sea mayor dentro de un año son solo el 11 % de los ejecutivos consultados; un 50 % espera niveles similares y el restante 39 % de hecho espera operar con una dotación menor.  

EC: ¿Y cómo afectó el coronavirus a los planes de inversión? 

TS: Esa es otra dimensión en la cual hay cambios severos. El 76 % prevé una reducción del presupuesto de inversión este año, con casi la mitad sosteniendo que el recorte va a ser de 25 % o más. 

Eso es consistente con el tipo de desafíos que mencionaron las empresas en la encuesta: mejorar la rentabilidad en el corto plazo y la readecuación de la actividad en un marco de crisis sanitaria son los dos factores más mencionados como principales desafíos. Lo primero lo mencionó el 70 % de los empresarios en su top 3 de desafíos, lo segundo lo mencionó el 60 %. En este momento, están lejos las preocupaciones por nuevas inversiones, por incorporación de tecnología o por expansión de la capacidad. 

EC: Ustedes también suelen medir la evaluación que hacen los ejecutivos sobre la gestión del gobierno y las expectativas que tienen en materia de política económica. ¿Qué destacarían en ese plano en esta edición de la encuesta?

TS: La aprobación de los primeros pasos del gobierno de Lacalle Pou (así lo preguntamos) es muy positiva (más del 90 % aprueba), pero obviamente es una medición muy singular. En prácticamente todo el mundo están midiendo mejor las encuestas de evaluación de los gobernantes en este momento de crisis sanitaria. En Uruguay las encuestas de opinión pública que relevan la aprobación de la gestión del gobierno también marcan niveles muy positivos para esta nueva administración (aunque sin alcanzar umbrales tan altos como los que encontramos en esta encuesta). 

Respecto a la política económica, nuestras preguntas esta vez refirieron a 2021, una vez pasada la crisis sanitaria. El mayor destaque es que los ejecutivos siguen descontando que habrá ajuste fiscal. En la última encuesta un 95 % esperaba que hubiera medidas en ese sentido y en esta oportunidad ese porcentaje se mantiene arriba de 90 %. En otras áreas de política económica son menos extendidas las expectativas de modificación de la línea del gobierno, pero respecto al relevamiento de octubre pasado igual aumentan en forma relevante las expectativas de cambios en materia de política salarial y de inserción internacional. Por ejemplo, en materia de inserción internacional, el 71 % espera cambios, cuando en octubre ese porcentaje era de 54 %. 

EC: ¿Qué lectura hicieron ustedes en Exante de todos estos resultados? Noté que hacías bastante hincapié en algunos mensajes “positivos” que aparecen en la encuesta.

TS: Hay un poco de todo. Destacaba más lo positivo porque quizás es lo menos obvio en este momento. 

El deterioro en la visión sobre la coyuntura actual está muy alineado con la severidad de los impactos económicos de la crisis sanitaria que empiezan a ser medibles en varios indicadores parciales disponibles en nuestro país. Era muy esperable encontrar respuestas negativas respecto a la situación económica, a los planes de inversión, incluso respecto a lo que hace al mercado de trabajo (donde en realidad hace tiempo recogemos ya un panorama bastante sombrío). 

Como decía al principio, destacamos como positivo que en general hay una visión de que los efectos serán más bien transitorios. Es muy bienvenida también la incipiente mejora en la evaluación del clima de negocios, aunque no hay que perder de vista que todavía tenemos muchas respuestas críticas y que a nivel de agenda económica hay mucho por hacer para poder sostener o profundizar una mejora de expectativas empresariales.Y sobre todo para lograr que eso redunde en más inversión y en más empleo, cosa que hoy luce bastante distante. 

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Foto: Exante

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