Análisis Económico

¿Cómo evolucionó el mercado de trabajo en mayo?

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La tasa de desempleo se mantuvo al mismo nivel que abril con 9,7% pero más alta que hace un año atrás.

Foto: Obra de edifcio de viviendas en Montevideo. Crédito: Javier Calvelo / adhocFOTOS

EMILIANO COTELO (EC): Esta semana el Instituto Nacional de Estadísticas publicó nuevas cifras del mercado de trabajo, correspondientes al mes de mayo. De acuerdo con estas cifras, el empleo tuvo una ligera recuperación frente a abril, pero se mantuvo en niveles muy reducidos, en medio de la crisis sanitaria. Además, al mismo tiempo también subió la tasa de actividad, reflejando un mayor número de personas buscando empleo y, de esa manera, la tasa de desempleo se mantuvo en 9,7% de la población económicamente activa.

¿Cómo se analizan estas últimas cifras del mercado laboral?  ¿Qué perspectivas podrían manejarse de cara a los próximos meses? Lo conversamos con la economista Florencia Carriquiry, socia de EXANTE. 

EC: Florencia, ¿cómo vieron estas últimas cifras del mercado de trabajo? Parece raro que la tasa de desempleo no haya subido tras un shock económico tan fuerte como el que generó el coronavirus, ¿no? 

FLORENCIA CARRIQUIRY (FC): Es una buena pregunta para aclarar algunos conceptos clave en relación con las cifras del mercado de trabajo. Otras veces comentamos en este espacio que la tasa de desempleo es un indicador que a veces puede resultar “engañoso” por decirlo de alguna manera y por eso no se debe mirar de manera aislada. ¿Por qué digo esto? Porque la tasa de desempleo es el resultado de la interacción entre la oferta y la demanda de trabajo en la economía. 

La oferta de trabajo se refiere a la cantidad de trabajadores que participan del mercado de trabajo, ya sea porque tienen un empleo o lo están buscando activamente y eso se mide por lo que llamamos la tasa de actividad. Y por otro lado, están las empresas, que demandan trabajadores en el mercado. Esa demanda se mide por la tasa de empleo. La tasa de desempleo surge, como decía, de la interacción entre estos dos indicadores de oferta y demanda y por tanto, puede pasar que incluso cuando la economía está creciendo y aumenta la demanda de trabajo (es decir, sube el empleo), la tasa de desocupación se incremente, porque la oferta (la tasa de actividad) está aumentando más rápidamente y viceversa. La tasa de desempleo puede no subir aún cuando se estén destruyendo empleos, si al mismo tiempo baja la oferta de trabajo, con menos personas buscando empleos. 

Esto último es justamente lo que estamos viendo en estos meses. En línea con lo que pasó en otras partes del mundo, la tasa de empleo cayó muy fuertemente tras la aparición del coronavirus, pero al mismo tiempo se redujo también de forma drástica la cantidad de gente buscando empleo, desalentada por la coyuntura tan particular que generó la pandemia. Por esa razón la tasa de desocupación no tuvo un aumento relevante. 

En definitiva, los indicadores del mercado de trabajo deben mirarse conjuntamente para realizar un buen diagnóstico. En particular, el indicador más relevante a la hora de concluir que está pasando con la actividad económica es la tasa de empleo (no la de desempleo).  

EC: Está bien la aclaración. Si miramos entonces con esa óptica las cifras de mayo, ¿podemos concluir a partir de la suba de la tasa de empleo y de la tasa de actividad que el mercado de trabajo tuvo una mejora frente a abril? 

FC: Sí. Una mejora muy leve, pero los datos parecerían indicar que el peor momento del mercado de trabajo se dio probablemente en abril. Concretamente, la tasa de empleo subió 0,8 puntos frente a abril y se ubicó en 52,9% de la población en edad de trabajar en mayo y la tasa de actividad aumentó en una magnitud apenas mayor hasta 58,6% de la población en edad de trabajar. De todos modos, son todavía niveles extraordinariamente bajos para cualquiera de estos indicadores. Para ponerlo en términos de personas, estos datos suponen unos 20.000 ocupados más que en abril, pero estaríamos aún 100.000 empleos abajo de los niveles del mismo mes de 2019. 

Además, como siempre advertimos, las cifras son volátiles en su medición mensual y la encuesta tiene un margen de error relevante. Pero más allá de la cautela con la que deben sacarse conclusiones, la verdad es que de alguna manera esta ligera mejora tanto de la tasa de empleo como de la tasa de actividad es consistente con lo que marcan otros indicadores de alta frecuencia y de allí que tendemos a pensar que efectivamente el “piso” para la actividad económica en general y para el empleo en particular habría sido el mes de abril. 

De hecho y reforzando esa visión, también hay otros indicadores en el informe que publicó el INE que parecen dar las primeras señales de normalización (muy gradual) en el funcionamiento del mercado de trabajo. 

EC: ¿A qué indicadores te estás refiriendo? 

FC: En particular me refiero al porcentaje de ocupados ausentes de su puesto de trabajo, que desde mediados de marzo con la llegada del coronavirus tuvo un suba abrupta. Según los datos que en estos meses el INE está publicando en los informes de mercado de trabajo con apertura semanal, en el promedio de abril el 24% de los ocupados estaba “ausente” (es decir, en los hechos no estaba trabajando) y se llegó a alcanzar en la segunda semana de abril un pico de 27% en este indicador. Las cifras de mayo marcaron una baja relevante en este porcentaje, que se ubicó en 16% en el promedio del mes y cerró en torno de 15% en las últimas semanas relevadas del mes. Para tener una referencia, pre-pandemia, en la primera quincena de marzo, el porcentaje de ocupados ausentes se ubicaba en torno del 6% y la causal de esa ausencia era esencialmente la licencia. En estos últimos meses, en torno al 70% de los ocupados ausentes, declaran estar en esa situación debido a estar en seguro de paro o en cuarentena o suspensión de actividad por el covid.   

EC: Mirando para adelante, entonces, ¿qué podemos esperar para los próximos meses? ¿Qué están proyectando en relación al mercado de trabajo en Exante? 

FC: Como decía recién, estas cifras de mayo parecen marcar los primeros signos de recuperación del mercado de trabajo en mayo y a nuestro juicio, deberíamos ver que esa tendencia se va afirmando en próximos meses, en la medida en que la economía va recuperándose del momento más agudo del shock sanitario. 

Sin embargo, dos aclaraciones clave en relación con esa perspectiva de gradual mejora del mercado de trabajo. 

En primer lugar, a nuestro juicio, la recuperación del empleo va a ser relativamente lenta. Si bien algunas actividades han ido reanudándose en estos últimos meses, la actividad económica sigue muy golpeada, algunas empresas además fueron incorporando cambios en sus operaciones en estos meses que probablemente le permitan trabajar con menos dotación. Y en ese marco, en estos días comenzaron a vencer los plazos de los primeros envíos a seguro de desempleo a raíz del shock del coronavirus. Habrá que ver cuántos de esos trabajadores que en un inicio fueron enviados al seguro de desempleo por causal   reducción o suspensión (y que por tanto aún figuran como ocupados en las estadísticas) son efectivamente reincorporados y cuantos son finalmente despedidos. El gobierno ha manifestado en más de una oportunidad su preocupación por este tema y de hecho por eso se alargaron los plazos de este subsidio en algunos casos y se anunciaron también algunas medidas para incentivar la recontratación. 

Para tener una idea, en nuestras proyecciones nosotros asumimos que al cierre de 2020 vamos a tener en el país unos 70.000 ocupados menos que previo al COVID. 

EC: Y, además, en un contexto de gradual reactivación económica es esperable que aumente la población buscando empleo, ¿verdad? 

FC: Exactamente. Ese es el segundo comentario que quería destacar. A nuestro juicio es muy probable que la recuperación de la población que busca empleo se vaya afirmando en esta segunda mitad del año, en la medida en que los “desalentados” por la coyuntura particular de la pandemia vayan volviendo al mercado. 

Esta combinación de factores, empleo subiendo de forma lenta y aumento de la población en busca de trabajar puede terminar generando que la tasa de desocupación tenga un incremento en próximos meses.  

EC: ¿A cuánto podría subir el desempleo en sus estimaciones?  

FC: Es difícil saberlo con certeza, porque dependerá como decíamos antes de la evolución relativa de la oferta y de la demanda de trabajo, pero en nuestras estimaciones el pico de la tasa de desempleo en esta segunda mitad del año estaría en torno al 13%-14%. 

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