El último vuelo de Amílcar Viñas
Por Emiliano Cotelo
Nuestros compañeros del programa Tripulacción, en Radiomundo, van a pasar esta tarde un trago amargo cuando les toque salir al aire por primera vez sin Amílcar Viñas, el gran referente de ese equipo.
Amílcar, que estaba muy frágil de salud desde el año pasado, falleció el viernes acá en Montevideo.
La noticia nos golpeó a todos en esta casa. Amílcar era un ser humano excepcional, como comprobaba cada uno de nosotros cuando se cruzaba con él en los corredores de la radio.
Fue probablemente el guía turístico más completo que tuvo nuestro país, por su conocimiento de cada destino, incluyendo su geografía, su historia y su cultura.
Fue, en particular, una figura clave en el desarrollo de los “viajes acompañados” de Jetmar, que seguramente muchos de ustedes disfrutaron, recorriendo en grupo tantos lugares del mundo. Es que también tenía condiciones especiales para las relaciones humanas y para la organización.
Y era, asimismo, un gran comunicador, lo que a mí me quedó clarísimo desde la época de En Perspectiva en El Espectador, cuando Amílcar charlaba con Rosario Castellanos en aquella columna llamada Viajemos Juntos, que iba los jueves a las 10.30. Era un placer escucharlo, por la pasión, la sabiduría y la experiencia que ponía en cada una de sus recomendaciones, enriquecidas siempre por la música que elegía para cada país o ciudad, con la cual aparecía otra de sus facetas, la del melómano casi erudito, memorioso, sensible y capaz de bailar a las mil maravillas.
Este fin de semana Amílcar volvió a levantar vuelo, como tantas veces, pero en esta ocasión no regresará, como era su costumbre, por el aeropuerto de Carrasco.
Afortunadamente, queda en el recuerdo de todos los que lo tratamos y aprendimos con él.
Afortunadamente quedan numerosas grabaciones de sus intervenciones, tanto las que realizaba en el estudio como las que mandaba desde el exterior mientras recorría algunos de los itinerarios que había propuesto semanas atrás.
Pero, claro, en estos días lo que pesa es su ausencia física.
Por eso, le hacemos llegar nuestra afecto a los colegas de Tripulacción, Mariana Coitiño, Walter Camacho y Marcelo Amarillo; también a quienes trabajaban junto a Amílcar en el grupo Jetmar; y, por supuesto, a su esposa, Charo, su familia y sus amigos.
Un abrazo muy fuerte para todos ellos, de mi parte, y de todos aquí, En Perspectiva.
