Foto: AFP
La red social X está bloqueada en Brasil.
La medida, que obedece a una resolución judicial, empezó a implementarse en la madrugada del sábado.
Desde ese momento nuestro país vecino quedó inmerso en un acalorado debate sobre la libertad de expresión que va mucho más allá de sus fronteras y se extiende por el mundo; por ejemplo, el caso se discute en la campaña electoral de Estados Unidos, donde X tiene su cuartel general.
La suspensión fue ordenada en la tarde del viernes por Alexandre de Moraes, juez del Supremo Tribunal Federal, quien viene librando desde hace meses una pulseada con el dueño de X, el multimillonario Elon Musk.
Quienes desde Brasil intentan ingresar a la web de X se encuentran ahora con un mensaje que les pide recargar el navegador sin que eso surta ningún efecto a continuación. La aplicación, de su lado, ya no genera nuevos contenidos ni permite interacciones.
El bloque, que ocurre poco más de un mes antes de las elecciones municipales, responde a un ultimátum lanzado por el minstro Moraes el miércoles pasado, para que la plataforma nombrara a un representante local.
El plazo venció el jueves, tras lo cual X afirmó que esperaba ser bloqueado "en breve" por su negativa de acatar las "órdenes ilegales" del juez. Según la red social, De Moraes buscaba con esta acción "censurar a sus oponentes políticos".
Este es el último hito de un proceso que comenzó cuando, en nombre de la lucha contra la desinformación, De Moraes ordenó bloquear cuentas de figuras ultraconservadoras brasileñas, a partir de los intentos de partidarios del expresidente Jair Bolsonaro de desacreditar la victoria electoral de Lula da Silva en los comicios de 2022.
En abril pasado, De Moraes abrió una investigación contra X, acusándola de reactivar algunas de esas cuentas que estaban suspendidas por orden judicial. Eso disparó un tira y afloje que llevó a X a cerrar sus oficinas en Brasil a mediados de agosto, aunque mantuvo el servicio disponible para la población de ese país. Con aquella decisión la compañía dejó de tener un representante legal en Brasil, algo que no es aceptable según la nomativa brasileña. Esa fue la razón que llevó a De Moraes a plantear el ultimátum que ejecutó el viernes.
Sustentó su fallo en los "reiterados y conscientes" incumplimientos judiciales de X y "su intento de evitar someterse al sistema legal y judicial brasileño". Aseguró que X pretende "crear un ambiente de total impunidad" en las redes sociales brasileñas y se ha tornado en objeto de "instrumentalización" de grupos de odio.
El fallo desató la indignación de Musk. "La libertad de expresión es la base de la democracia y un seudojuez no electo en Brasil la está destruyendo con fines políticos", reaccionó en X el magnate, quien ha calificado a De Moraes de "dictador malvado".
Profundizamos En Perspectiva sobre esta noticia con nuestro corresponsal en Brasil, Marcelo Silva de Sousa.
