Luis Eduardo Zabala vino a Uruguay en agosto pasado desde Venezuela, en busca de un mejor pasar laboral. Pero la elección del país tiene algo más de fondo que las dificultades económicas de su tierra de origen: llegó invitado por un club de rugby.
La selección juvenil de rugby de Venezuela viajó a Asunción en los días pasados para disputar el Campeonato Sudamericano, que, por cierto, culminó con el triunfo de Uruguay. Venezuela terminó última. Pero esa no es la noticia.
Al terminar la competencia, tres jugadores venezolanos decidieron quedarse en Paraguay. Primero conversaron con los deportistas rivales sobre la posibilidad, luego llegaron al equipo paraguayo San José Rugby, que les realizó una oferta. El club se hizo cargo de los tres jóvenes, para ofrecerles un resguardo mientras solucionan su situación migratoria.
El presidente de la Federación Venezolana de Rugby, Erickson Bermúdez, habló con la producción de En Perspectiva y explicó cómo se dio la situación: "Hablé con el club, verifiqué las condiciones en que ellos podían quedarse allá. Las condiciones de estabilidad que les ofrecía el club. Garantizaban su hospedaje, garantizaban su alimentación e inclusive iban a ayudar a conseguir algún trabajo que les pudiera retribuir, pues actualmente en casi todo nuestro continente el rugby es completamente amateur".
Sin embargo, el rugby guaraní no es el único que ha acogido a inmigrantes venezolanos. Entre la ola migratoria que recibió Uruguay en los últimos tiempos, también ha llegado un grupo de rugbistas que se desempeñan en el medio local. Son cinco, y hoy recibimos en el estudio de En Perspectiva a uno de ellos, Luis Eduardo Zabala.
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