En Medio Oriente el tablero político y militar, siempre tan delicado, viene sufriendo varios cambios en las últimas semanas. Ayer domingo, el gobierno de Irak anunció la reconquista de Mosul, bastión del grupo yihadista Estado Islámico. Por otra parte, en la cumbre del G20 en Hamburgo, Donald Trump y Vladimir Putin acordaron un cese al fuego en el suroeste de Siria. Mientras tanto, en el Golfo Pérsico se mantiene el foco de tensión que estalló el mes pasado, cuando varios emiratos cortaron sus relaciones con Qatar, acusándolo de apoyar al terrorismo.
¿Qué podemos esperar de la situación en Medio Oriente? En la entrevista central, profundizamos en este escenario con Susana Mangana, Responsable de Programa Política Internacional y Cátedra Permanente de Islam, Universidad Católica.
Transcripción de la entrevista con Susana Mangana
La situación política y militar en Medio Oriente, una zona sensible del planeta, viene mostrando avances y retrocesos en las últimas semanas.
Ayer el Gobierno de Irak anunció la reconquista de Mosul, la segunda capital de “facto” del grupo yihadista Estado Islámico.El viernes, durante la Cumbre del G20, en Hamburgo, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su par ruso, Vladimir Putin, acordaron un cese al fuego “por partes” en el suroeste de Siria.
Estos avances sin embargo, contrastan con la tensión que se mantiene en el Golfo Pérsico. Allí el 5 de junio pasado, Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Baherein y Egipto cortaron relaciones diplomáticos con Qatar a quien acusan de apoyar a varios grupos terroristas.
¿Qué implican los avances en Siria e Irak?¿Qué consecuencias puede tener la inestabilidad en el Golfo Pérsico? Lo conversamos con Susana Mangana, Prof. de Estudios Árabes e Islámicos, Responsable de Programa Política Internacional y Cátedra Permanente de Islam, Universidad Católica.