En la era de internet de alta velocidad, cualquier espera se hace insoportable.
Hoy en día tenemos comunicaciones al instante con cualquier parte del mundo, tenemos un conocimiento inabarcable al que se puede acceder a un clic de distancia en el celular que llevamos cómodamente en el bolsillo o en el bolso.
¿Se imaginan mandar una carta y que demore semanas en llegar? Hoy, si mandamos un mensaje a alguien y un rato más tarde todavía no nos contestó, puede que nos pongamos nerviosos. Y si somos los que tenemos que contestar y tenemos ese pendiente, la ansiedad seguramente se acreciente.
Las redes sociales acentúan ese ritmo vertiginoso. Las cosas suceden y hay que responder enseguida. Hay que tener una opinión de todo y cuanto antes.
¿Vivimos en un tiempo de obsesión con la inmediatez? ¿Qué problemas nos puede traer esto? ¿Y podemos combatirlo de alguna forma?
Estos son los temas que les propusimos esta mañana para una nueva Mesa de Filósofos.
Para eso nos acompañaron Miguel Pastorino, licenciado en Filosofía, profesor de Ciencia y Religión; Magdalena Reyes, filósofa, psicóloga clínica, docente, coordinadora del Café Filosófico; y Javier Mazza, licenciado en Filosofía, coordinador docente del departamento de Humanidades de la UCU.
