EC – Usted dice: “Buena parte de las medidas que hay que tomar son sentido común, son las que un empresario tomaría”. Y permanentemente advierte que acá no se va a guiar por ideologías, por ejemplo que no se necesita que un montevideano cambie su ideología para votarlo.
EN – Lógico. Puede ser frentista, blanco, colorado, haya votado lo que haya votado. Como hacen en muchos departamentos; en Rivera, por ejemplo, el PC salió tercero y ahora va a ganar.
EC – Pero ¿no hay decisiones que son ideológicas? Cuando usted tiene que resolver dónde va a ubicar el presupuesto, qué tipo de obras va a hacer, si las va a poner en tal barrio o en tal otro, si va a destinar el dinero a programas de salud o a colocar semáforos, ¿en buena parte de esos debates no hay ideología detrás?
EN – Cuando cualquier empresario va a hacer una cosa en su empresa no piensa si es de izquierda o de derecha, no hay ideología, las cosas se hacen bien o se hacen mal. Para poder hacer obras sociales, como cualquiera, todo el mundo, creo que no hay persona acá que no quiera hacer obras sociales, es lo primero que hay que hacer… Pero para hacer el bien uno tiene que tener, para hacer el bien uno tiene que ordenar la casa, y después redistribuir. Si yo hago obras sociales endeudándome… ¡La Intendencia se está endeudando en 50 millones de dólares por año!
EC – ¿Usted promete que no va a haber más endeudamiento?
EN – No va a haber más endeudamiento. Y no solo eso, voy a bajar el costo de las remuneraciones, y voy a tener mucho más dinero para hacer obras, y voy a hacer las obras mucho más rápidamente, sin endeudarme. Le pongo un ejemplo –por eso quiero confrontar ideas cuando hablan de gestión–: el señor Martínez dice que no va a bajar; ¿y cuál es la historia de Daniel Martínez en Ancap? Cuando Daniel Martínez llega a Ancap la deuda de Ancap era de 225 millones de dólares; pasó la administración de Martínez y después la de Sendic y hoy la deuda de Ancap es de 2.250 millones de dólares. ¿Esa es la gestión que hizo Martínez? ¿Eso lo saben los montevideanos? ¿Saben a quién pueden elegir?
Daniel Martínez quiso hacer una gestión y revitalizar la Compañía de Cemento. ¿Sabe cómo funciona hoy la Compañía de Cemento? Hoy pierde 40 millones de dólares, cuando una compañía similar a la de Ancap pero privada, que factura lo mismo, gana 40 millones. ¿Eso no es mala gestión?
Después Martínez hizo el invento de ALUR, que hoy subsidian con 100 millones de dólares para que no dé pérdidas. ¿Eso es lo que queremos para nuestro país? ¿Eso es lo que queremos para la Intendencia, este tipo de gestiones?
EC – Por lo visto estuvo estudiando con cuidado la gestión de Daniel Martínez…
EN – Por supuesto, por supuesto.
EC – … porque tiene números, tiene papeles que ha traído a esta entrevista.
EN – Sí, señor, tengo papeles y le puedo decir. Y lo tengo refrendado, así como lo de la gente que él puso.
EC – ¿Por qué se focaliza en Daniel Martínez?
EN – Porque de Daniel Martínez la gente puede decir “tuvo una gestión”. La señora Topolansky no ha gestionado, no tiene experiencia, no tiene capacidad, porque no ha gestionado. Entonces cuando la gente piensa que Daniel Martínez gestionó Ancap, yo le quiero decir cómo gestionó.
EC – Usted está aludiendo incluso a gente del propio PC, por ejemplo. Algunos dirigentes colorados han dicho: “Entre Lucía Topolansky y Daniel Martínez, para que las cosas salgan mejor en Montevideo yo voy a votar a Daniel Martínez”.
EN – Tal vez no estaban en conocimiento de esto.
