Foto: Presidencia Uruguay
El Ministerio del Interior y la Universidad de la República inauguraron ayer en el Penal de Libertad el cuarto centro universitario que funciona en el sistema carcelario uruguayo.
La iniciativa forma parte de un convenio que ambos organismos firmaron en 2020.
Al participar en el acto, el subsecretario del Interior, Pablo Abdala, señaló que este plan es una parte muy importante de la estrategia de seguridad del gobierno, atacando las causas sociales que llevan a una persona a delinquir.
“Es un paso más en la estrategia de enfoque dual, de represión pero también de trabajar en las causas sociales del delito, de generar capacidades para las personas privadas de libertad, no solo para trabajar en su rehabilitación, sino para construir sus capacidades a la hora de egresar, en donde puedan tener herramientas y bajar así la reincidencia” .
Los estudiantes, por su parte, marcaron ayer que la inauguración del nuevo centro representa un “hito histórico” en la política universitaria para las cárceles, y leyeron una carta que describió su visión. Allí plantearon la necesidad de que la universidad tenga “directrices centralizadas” y que los cursos en las cárceles no queden a criterio de cada facultad. Pidieron también un Programa Integral Universitario para las prisiones, la mejora en la red wi fi para poder tomar clases por zoom y que se habiliten más clases virtuales.
Según los datos del ministerio, el año pasado 166 presos cursaron alguna carrera universitaria, frente a los 95 registrados en 2020.
La población carcelaria supera hoy las 15 mil personas. Los datos oficiales indican que unos 5 mil reclusos realizan algún tipo de estudio y unos 6 mil están trabajando.
Conversamos En Perspectiva con Juan Miguel Petit, el Comisionado Parlamentario para el Sistema Penitenciario.