El ministro de Economía, Danilo Astori, presentó ayer a la bancada de legisladores del Frente Amplio los lineamientos de la próxima Rendición de Cuentas, que incluye un incremento del gasto público para 2018 de US$ 172.000.000.
De esa cifra, US$ 100.000.000 son aumentos que estaban pendientes desde la Rendición de Cuentas anterior y serán destinados a educación, seguridad pública, vivienda y la implementación del Sistema Nacional de Cuidados.
Los restantes US$ 72.000.000 corresponden al aumento “genuino” de la Rendición de Cuentas de este año y serán asignados a dos rubros considerados “prioritarios” por el Gobierno:
-US$ 62.000.000 corresponderán a la Administración Nacional de Educación Pública y a la Universidad de la República.
-US$ 10.000.000 estarán destinados al pago de la primera de tres cuotas de la deuda salarial que el Estado mantiene con los funcionarios judiciales que acordaron con el Poder Ejecutivo en febrero de este año.
Astori resaltó que, con el aumento resuelto, el año próximo el presupuesto de la Educación alcanzará el 5 % del PBI.
“Como parte de los 100 que ya están aprobados, que vienen de la Rendición de Cuentas que difirió gastos, 46 millones corresponden a educación. Quiere decir que a los 62 que agregamos este año, hay que agregarle 46 millones que ya están aprobados. En total US$ 108 millones para Educación en 2018. Y estaremos llegando al 5 % del PBI el año que viene, en ese camino hacia el 6 % que es el que marca el programa del Frente Amplio” señaló Astori.
El ministro de Economía explicó que existe un desequilibrio fiscal de US$ 40.000.000 que se arrastra desde la última Rendición de Cuentas y que repercute en 2018.
Este desfasaje en las cuentas públicas, sumado al gasto en los rubros prioritarios de esta Rendición de Cuentas, da un rojo total de US$ 112.000.000. Para financiar esa suma el gobierno propone cambios tributarios: cobrar el Impuesto a la Renta de las Actividades Económicas (IRAE) a la Banca de Quinielas y el Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF) a los premios de los juegos de azar, y aumentar la tasa consular, en un punto porcentual para las importaciones provenientes de los países del Mercosur y en 3 puntos para los productos extra zona.
De esta suba de la Tasa Consular están exonerados los bienes de capital, los servicios, las importaciones de petróleo y las importaciones comprendidas en Tratados de Libre Comercio.
Astori dijo que el Gobierno hubiera preferido no aumentar esta tasa pero sostuvo que la medida tendrá un impacto “moderado” en las importaciones. Además explicó que el Gobierno pretende desmantelar la tasa consular a partir de 2020 en concordancia con las recomendaciones que hace la Organización Internacional de Comercio.
Desde la oposición, el senador nacionalista Álvaro Delgado declaró que el Partido Nacional no acompañara ninguna suba de impuestos y opinó que la suba de la tasa consular tendrá un impacto negativo en las importaciones y en las empresas.
El senador del Partido Independiente, Pablo Mieres, criticó la propuesta de aumento de la tasa consular porque puede “generar problemas” con la Organización Mundial del Comercio (OMC) que ya le recomendó a Uruguay eliminarla. Además estimó que puede tener un impacto sobre la inflación porque “las importaciones son buena parte de la canasta de productos y bienes que se compran.
Entre los sectores opositores, el diputado colorado Fernando Amado fue, según La Diaria, el que se mostró más proclive a dar el voto 50 para aprobar la propuesta de Rendición de Cuentas, o al menos quien más coincidió con el Frente Amplio en término de prioridades.
Amado, aludiendo a buena parte de la oposición, confesó que “a veces” siente “que hay una postura de que no viene bien nada: si la la Rendición de Cuentas o el planteo del Ejecutivo es tremendamente jugado, ambicioso, es una irresponsabilidad, si lo plantea al revés, es un gobierno sin ideas que está administrando la realidad. No viene bien nada; siempre hay una excusa” cuestionó el legislador colorado.
Quien aparece como más probable “voto número 50” para que prospere la iniciativa del gobierno en la Cámara de Diputados, es Eduardo Rubio, de Unidad Popular, pese a opinar que las cifras divulgadas implican “muy poco” para la Educación que, a su juicio, “sigue siendo el gran déficit de la inversión pública”. Sin embargo, respecto a los impuestos, Rubio dijo que si son a los juegos de azar, al capital, al capital transnacional, a la inversión extranjera directa que no paga nada, o al capital financiero, su partido está “totalmente de acuerdo”.
Las cifras brindadas ayer por Astori difieren de las que había comunicado el martes el presidente del Frente Amplio, Javier Miranda, cuando el equipo económico presentó los lineamientos al Secretariado Ejecutivo de la coalición.
Es día Miranda sostuvo que en 2018 iba a haber un incremento de gasto US$ 312.000.000; sin embargo Astori se retiró de la sede del Frente Amplio sin confirmar esa cifra. Según pudo saber En Perspectiva, en el equipo económico había malestar con Miranda, aunque otros legisladores consultados sostuvieron que hubo errores en la comunicación por parte del Ministerio de Economía.
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