El martes 16 de octubre Luis Lacalle Pou visitó el estudio de En Perspectiva para hablar de Un gobierno para evolucionar, el documento de líneas programáticas que se había presentado dos días antes en el congreso del sector Todos Hacia Adelante.
En esa entrevista, el precandidato presidencial lanzó una fuerte crítica contra el Ministerio de Desarrollo Social.
El senador nacionalista habló de la política de austeridad que implementaría en caso de llegar a la Presidencia de la República, y explicó por qué no impulsaría un ajuste fiscal a través de un aumento de impuestos.
¿Cómo encararía, entonces, el ahorro en las cuentas pública?
Lacalle Pou respondió lo siguiente:
"-Nosotros en la 2014 teníamos cuatro puntos sobre los cuales ahorrábamos entre 350 y 450 millones de dólares al año. Debo decir que eso no da, hoy no es suficiente. Hoy decir que se va a ahorrar ese dinero no es suficiente.
-¿Cuánto? Esos números en el documento no están.
-Es un documento de líneas programáticas y no efectivamente lo que pensamos hacer. Hay que hacer un esfuerzo mayor. Y obviamente viene por los recursos humanos del Estado, allí en el tema recursos humanos va a haber que ser muy firme.
Existe duplicación de funciones en muchísimos lugares del Estado, existen programas que ni siquiera se llevan a cabo o no tienen un público objetivo, existe gasto que ni siquiera es medible o no se sabe su resultado, estoy hablando de los 270 millones de dólares del Mides. Porque la discusión no tiene que ser solamente cuánto se gasta: es cómo se gasta.
El respeto a quien aporta con sus tributos es realmente gastar bien, medir los gastos, y sobre todo el público objetivo al que se destinan. La manera de respetarlos es que se usen bien"
En el documento “Un gobierno para evolucionar” hay un capítulo dedicado a las políticas sociales. Sin embargo, no se hace referencia a esta presunta falta de medición a la que alude Lacalle Pou.
Sí aparece algo similar a propósito de la ANEP (Administración Nacional de Educación Pública). Hablando de "gastos endógenos" en el Estado, el documento afirma: "Son gastos que también dependen de la buena o mala administración, es decir, de la mayor o menor responsabilidad con la que se manejen los dineros públicos. En la situación actual, varios organismos vienen siendo mal administrados. Un ejemplo son las decenas de programas ejecutados por ANEP, con bajo número de destinatarios y sin ninguna clase de evaluación".
Qué existe en el Mides
La crítica de Lacalle Pou provocó polémica. Algunos oyentes remarcaron que el Mides sí evalúa los resultados de sus acciones.
Vale la pena, entonces, pasar en limpio: ¿Qué seguimiento hace el Mides de sus programas?
La producción de En Perspectiva estuvo trabajando en ese tema.
LO QUE HACE EL MIDES
El Ministerio de Desarrollo Social cuenta con la Dirección Nacional de Evaluación y Monitoreo, o Dinem, que dirige el sociólogo Juan Pablo Labat.
La Dinem está compuesta por cinco Divisiones: Monitoreo, Evaluación, Sistema integrado de Información del Área Social, Estudios Sociales y Trabajo de Campo, y Observatorio Social.
En Perspectiva conversó con Labat, que rechazó las declaraciones de Lacalle Pou.
"Uruguay es uno de los países más evaluados de América Latina, incluso el detalle del gasto en relación a resultados es el mayor" dijo Labat.
Labat diferenció entre programas y políticas. Estas últimas son más generales, mientras que los programas realizan acciones puntuales para tender hacia los objetivos de esas políticas.
Afirmó que en ambos casos las evaluaciones son extensivas y validadas internacionalmente.
"En cualquiera de esas dos dimensiones, el Mides cuenta con un Observatorio Social que tiene 700 indicadores, donde se pueden ver las más diversas temáticas, incluso muchas cosas vinculadas a asuntos que no son del Mides. Se puede tener un gran panorama de la política social a lo largo del tiempo.
En materia de programas, existen no menos de 70, 80 documentos de evaluación colgados en la página web del Mides. Son materiales evaluativos, no todas son evaluaciones específicas.
Todos los grandes gastos del Mides, incluso algunos que no son del Mides como las asignaciones familiares, que está asociado al Mides pero es del BPS, tienen evaluaciones que además son externas. Programas de proximidad, que son muy complejos, como Cercanías, Jóvenes en Red, también tienen evaluaciones externas.
Todas esas instancias de evaluación además están refrendadas por extranjeros. Han sido muy reconocidas por el Banco Mundial, por el BID" indicó Labat.
El jerarca del Mides reiteró esa particularidad internacional y explicó que los técnicos del ministerio incluso capacitan a equipos de otros países.
"Uruguay es un referente regional en materia de sistemas de información y monitoreo de programas. Incluso hacemos consultorías Estado a Estado, acabamos de hacerle una consultoría al gobierno de Paraguay, para hacer un diseño de evaluación de un programa de economía social. Son técnicos del Mides que transportan un know how de evaluación y monitoreo a otro país de la región" dijo Labat.
Labat sostuvo que el Mides realiza una evaluación de su trabajo mucho más exhaustiva que otras ramas del Poder Ejecutivo.
"Quiero saber cuántas líneas de acción de distintos ministerios son evaluadas. Creo que el Mides en términos relativos, está despegado adentro del Estado. No sé por qué se ha construido esta imagen, o se intenta construir esta imagen, sobre asuntos de información, sobre asuntos de datos, y sobre evaluación. Estimo que porque el Mides es un gran productor de información y porque genera tópicos de agenda en la política" señaló Labat.
¿Cómo se realizan estas evaluaciones? ¿Qué resultados dan? Labat lo ejemplificó a través de las asignaciones familiares.
"Sobre las asignaciones familiares, hay mucha teoría escrita sobre que entregarle dinero a las familias puede retirar a la gente del mercado de trabajo, puede hacer que los niños estén más en el sistema educativo. Es una teoría. Se pone en práctica a través del programa y se evalúa si tiene algún resultado.
Se ha comprobado que las transferencias monetarias en Uruguay no alteran en nada la predisposición de la gente a trabajar, ni la gente se retira del trabajo, ni siquiera trabaja menos horas. Sí tiene efectos sobre la informalidad: la gente tiende a continuar en la informalidad porque tiene miedo que si se formaliza le saquen la asignación.
No tiene efecto sobre el sistema educativo en términos de mayor participación, tiene un pequeñísimo efecto sobre la asistencia que no se puede transportar a que eso en resultados se dé, está muy mediado por un montón de cosas como para poder observarlo" manifestó Labat.
¿Qué sucede si la evaluación arroja resultados negativos? Labat señaló que más que resultados negativos, este proceso encuentra elementos a mejorar o cambiar.
"A veces la acción que querés cometer va en un sentido, pero no se tiene la capacidad de lograrlo. Yo voy a abrir el programa Uruguay Trabaja para que la gente que hace mucho tiempo que no está en situación de trabajo tenga una oportunidad de trabajar, adquiera un conjunto de activos sociales que le permitan enfrentarse mejor al mundo de trabajo, se prepare para eso, se capacite. No es una garantía de que la persona consiga trabajo.
Lo que estoy seguro es de que mejoré su empleabilidad. Eso prueba la evaluación. ¿La persona está mejor? Sí. ¿Consiguió trabajo? No necesariamente sucedió. O consiguió un trabajo que no lo sostuvo por razones de ellos o del trabajo" señaló Labat.
Qué responde Todos
A partir de estas averiguaciones, En Perspectiva volvió a comunicarse con el sector Todos Hacia Adelante. Al mencionarse las explicaciones del sociólogo Juan Pablo Labat, desde el equipo de campaña de Lacalle Pou se respondió que el Mides evalúa una proporción menor de las tareas que lleva a cabo.
“Se toma decisiones sin evaluar impacto”, dijeron fuentes del sector, y pusieron como ejemplo la resolución que se tomó recientemente reduciendo la ayuda alimentaria que se realiza a través del INDA a organizaciones de la sociedad civil.
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Producción: Gastón González Napoli
