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Mercado inmobiliario uruguayo: Consultas "históricas" de argentinos que no se reflejan en operaciones concretas

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Producción: Gastón González Napoli 

Con el panorama económico general complicado y con las autoridades admitiendo que la recuperación de la actividad será más lenta de lo esperado, puede resultar sorprendente escuchar a un operador decir que su sector “está muy bien”. 

Pero eso es lo que está sucediendo con el mercado inmobiliario, que atraviesa una situación auspiciosa.

Sufrió, sí, una baja en el pico del “quedate en casa” y las restricciones establecidas por motivos sanitarios, pero desde entonces distintos operadores coinciden que hubo un crecimiento sostenido.

Así lo resumió Ricardo Frechou, CEO del portal inmobiliario Infocasas, en diálogo con En Perspectiva:

La verdad que el mercado inmobiliario tuvo una baja en los meses de marzo, abril y mayo, una baja considerable, drástica, casi 70, 80% menos de operaciones, menos de consultas, menos de visitas. Pero algo que comenzó por el período de junio, julio, y ha continuado, es el crecimiento sostenido y en algunos tipos de operaciones, algunos tipos de producto, estamos a valores superiores a época pre coronavirus.

Según los números de Infocasas, la mayor dinámica se está dando en ventas de entre 80 mil y 200 mil dólares, y también en el movimiento de alquileres, de entre aproximadamente 18 mil pesos a 35 mil.

Por el otro lado, donde el impacto se siente todavía es en operaciones de valores más altos, y especialmente en alquileres y ventas en edificios corporativos.

¿A qué se debe el repunte acelerado? Según Wilder Ananikian, director de Ananikian Negocios Inmobiliarios y presidente de la Cámara Inmobiliaria Uruguaya, los motivos son dos: las medidas del gobierno y el interés de clientes argentinos.

Gobierno

Del lado del gobierno, Ananikian menciona la modificación en abril en los topes de precio que regían para la Vivienda Promovida, tanto en ventas como en arrendamientos. 

Recordemos: esa figura, antes llamada Vivienda de Interés Social, brinda exoneraciones dentro de determinadas condiciones. Hasta abril pasado, tenía un tope de precio de venta y arrendamiento establecido por decreto en 2017. Si se superaba ese precio, la exoneración sería del 40% y no del 100%. Y además, 10% de las unidades construidas debían venderse a un precio fijado por el Ministerio de Vivienda.

Operadores inmobiliarios y de la construcción reclamaban cambios en la normativa, aduciendo una pérdida de rentabilidad que había hecho caer los números de inversión en Vivienda Promovida.

A poco de asumir, en abril, el presidente Luis Lacalle Pou resolvió eliminar tanto ese tope de precio de venta como el límite para la construcción de unidades de una sola habitación dentro de un mismo edificio, que antes podían ser solo hasta el 50%. Habilitó además la construcción de monoambientes bajo la modalidad de Vivienda Promovida. 

Según Ananikian, esto impulsó la reactivación de 142 proyectos nuevos, unas 4.500 viviendas.

Frechou, de Infocasas, agregó que los cambios que la Ley de Urgente Consideración introdujo en materia de pagos en efectivo también surtieron efecto. 

Específicamente, por la habilitación de transacciones de hasta 100 mil dólares por esa vía. Frechou dijo a en Perspectiva que argentinos con dificultad para utilizar el dinero en cuentas bancarias por el llamado “cepo cambiario” que rige en su país, pero que tenían cantidades elevadas en efectivo, pudieron utilizarlo para realizar operaciones.

Llegamos así al segundo punto clave: los argentinos.

Argentinos

Viene hablándose de las “consultas” que clientes potenciales argentinos están realizando de esta orilla del río Uruguay desde que se conoció el resultado de las PASO, las elecciones primarias argentinas que anticipaban una victoria arrolladora de Alberto Fernández y un regreso del kirchnerismo.

Según Wilder Ananikian, de la Cámara Inmobiliaria, desde ese momento comenzó a reactivarse el mercado.

El presidente Lacalle Pou había anunciado durante la transición de gobierno que su plan era atraer a 100 mil argentinos, para lo que impulsó cambios que flexibilizaran la residencia fiscal.

Y todo indica que el fenómeno de consultas se acentuó a partir de la pandemia de Covid-19, por el impacto dispar que la enfermedad tuvo en los dos países y el efecto de la cuarentena extendida que se impuso en Argentina. Hay figuras de renombre que se establecieron en Uruguay en estos meses, como el actor Ricardo Darín o el empresario sojero Gustavo Grobocopatel.

En Infocasas han registrado un pico histórico de consultas de argentinos, que se corrieron de Punta del Este, refugio típico de ciudadanos del país vecino, y se inclinan ahora por Montevideo. 

De acuerdo con un estudio de ese portal inmobiliario, estos interesados tienen una edad de en torno a 60 años. A la hora de invertir, buscan propiedades en Pocitos o Punta Carretas por valores de 150 mil dólares. Los que buscan no como inversión sino para residir ellos mismos, van por barrios privados o, sí, por el principal balneario del Este.

Pero, ¿se concretan realmente estas “consultas” o se quedan en eso, en consultas? ¿Son aquellos nombres famosos indicativos de un fenómeno de mayor escala?

Según Frechou, de Infocasas, no se está concretando a tan alto nivel:

Lo que nos ha sucedido con los argentinos es que comenzaron antes que la recuperación que hablamos del mercado. Ya por mayo, junio, julio las consultas duplicaron, triplicaron, cuatriplicaron y no han parado de crecer. 

Cuando hablamos de operaciones, que es lo que termina interesando, obviamente toda esa expectativa no se ha concretado. Pero sí hay mucho movimiento de argentinos, de familias que se están viniendo a radicar. Nosotros relevamos con estudios de abogados, de escribanos, también siguen recibiendo consultas e intereses. 

Los números son de unos 35.000 argentinos que han cruzado: si comparamos con las 70, 80, 100 mil consultas que hubo en este tiempo, no se reflejaron en operaciones, pero hay una realidad: fronteras cerradas, no se pueden hacer negocios.

Por este motivo, por la dificultad señalada por los operadores para cerrar negocios a distancia, Ananikian adelantó que desde la Cámara Inmobiliaria quieren pedirle al gobierno que permita entrar al país a argentinos verdaderamente interesados en concretar negocios.

-Que habilite puntualmente a quien ya vio alguna propiedad por internet, que incluso dejó alguna seña para el arrendamiento, y quiere venir a verla, a concretar. Que pueda haber algún trámite rápido de ida y vuelta, hisopado previo, con todos los protocolos. Creo que podemos ser receptivos. Pasa que el gobierno cerró las fronteras, pero esto es diferente, es gente que quiere venir a vivir al Uruguay, no a hacer turismo.

-Eso iba a preguntar, es gente que vendría a alquilar, pero para vivir.

-Exactamente. Alquilan normalmente por un año y con futuro de compra. Eso empezó en enero, febrero, en marzo se cortó, siguieron las consultas… Hubo gente que arrendó por seis meses y recién pudo venir ahora.

Ricardo Frechou dijo a En Perspectiva que tiene esperanzas en que una futura apertura de fronteras abra la canilla para traducir esas consultas a la realidad.

Pero, mientras tanto, miles de consultas se quedan en eso.

No todo es positivo

La otra cara de la moneda es la realidad en Colonia y en Punta del Este, dos zonas que dependen más todavía de que esas consultas se concreten.

Feliciano Casero, vicepresidente de la Cámara Inmobiliaria de ese departamento, declaró a En Perspectiva que el mercado coloniense está “muy tranquilo” y que están trabajando en el entorno del 25 o 30% de lo que estarían en condiciones normales.

Está muy quieto. Hay consultas, obviamente, del lado de los argentinos. Se está trabajando mucho con turismo interno. Pero Colonia ha sido muy golpeada por no tener frecuencia con los argentinos, que es nuestro principal inversor. Hasta que no se reabra es muy difícil que puedan venir. Entonces, está muy tranquilo todo. Hay consultas, pero no hay concreciones.

En la misma línea fue Javier Sena, presidente de la Cámara Inmobiliaria Punta del Este-Maldonado. Dijo también que hay muchas consultas, pero que el mercado de alquileres en la previa a la temporada turística está por debajo de lo habitual por diferencias entre lo que piden los propietarios y lo que pretenden pagar los clientes. En esto influye la falta de extranjeros, quienes suelen pagar precios más altos.

Para paliar esa diferencia, la cámara apostó por el pago de los alquileres en cuotas: adelantó que se está trabajando con las principales tarjetas de crédito para poder alquiler en esa modalidad.

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Foto: Barrio Punta Carretas. Crédito: Wikimedia Commons.

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