El canciller Rodolfo Nin Novoa aclaró ayer que el Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil convocó al embajador uruguayo en Brasilia para una “reunión informal”, luego de que el gobierno de Tabaré Vázquez se mostrara preocupado por la incidencia en la región de la reforma laboral aprobada por el vecino país.
El lunes de noche el diario O Globo informó que Itamaraty había llamado en consulta al embajador uruguayo Carlos Amorín, para que explicara las declaraciones del canciller Rodolfo Nin Novoa y del ministro de Trabajo Ernesto Murro en las que cuestionaban la nueva legislación laboral sancionada en Brasil.
Sin embargo, ayer Nin explicó que lo que hubo fue una invitación a una reunión informal y no un llamado a consulta a través de una nota diplomática de protesta.
EL PLANTEO URUGUAYO
El domingo pasado, en Fray Bentos, en la jornada previa a un nuevo Consejo de Ministros abierto, Nin Novoa y Murro anunciaron que Uruguay había enviado una solicitud a Brasil, que ejerce la presidencia protémpore del Mercosur, para que el bloque analizara la nueva normativa laboral que entrará en vigor en ese país en noviembre y que -se entiende- puede afectar la competencia entre los socios.
"Hemos visto que hay, sin inmiscuirnos en asuntos internos de Brasil, un proyecto que lleva mucho decaimiento de los derechos de los trabajadores de Brasil, que no solamente por eso nos preocupa sino que también le preocupa al Uruguay en su conjunto porque es una manera de competir en base a la caída de derechos laborales, cosa que siempre hemos tratado de evitar", expresó Nin.
Tanto Nin Novoa como Murro señalaron que la reforma brasileña entraría en conflicto con la Declaración Sociolaboral del Mercosur ratificada en 2015, por eso entienden que corresponde examinar el tema en la comisión especializada del bloque.
“El gobierno uruguayo le ha enviado una nota a Brasil, el presidente del Mercosur en este momento, pidiéndole que reúna los órganos correspondientes del Mercosur porque queremos analizar la declaración socio laboral del Mercosur que firmamos los cuatro socios a partir de lo que puede afectar la reforma laboral de Brasil, en caso que termine de concretarse, en los trabajadores uruguayos y en los empresarios uruguayos”, expresó Murro.
LO QUE VIENE
¿Qué dice esta declaración?¿Qué chances tiene Uruguay de que su planteo tenga un efecto concreto?
En Perspectiva consultó ayer a Ignacio Bartesaghi, Director del Departamento de Negocios Internacionales e Integración de la Universidad Católica del Uruguay.
Bartesaghi explicó que la Declaración Sociolaboral del Mercosur es un compromiso de los miembros del tratado para respetar los derechos laborales, las libertades sindicales y la promoción de la negociación colectiva, entre otros principios generales.
En el artículo 28 se establece que el seguimiento de estos principios estará a cargo de la Comisión Sociolaboral del Mercosur. Sin embargo, en el artículo 31 se determina que esta “particularmente vedada” la “aplicación de la declaración y su mecanismo de seguimiento a cuestiones comerciales, económicas y financieras”, lo que desarticularía el reclamo de Uruguay si este fuera, efectivamente, por la eventual pérdida de competitividad de nuestro país frente a Brasil.
Además, en el caso de que Uruguay lograra que se discutiera en ese ámbito la reforma laboral en Brasil, ese organismo no emitiría ninguna resolución vinculante ya que no tiene capacidad decisoria y es de carácter auxiliar, promocional y no sancionatorio. Las recomendaciones que emanan de esa comisión son elevadas para su aprobación al Grupo Mercado Común, que sí toma decisiones, por consenso y con la presencia de todas las partes.
Según Bartesaghi, de llegarse a esta instancia, además de la oposición de Brasil, el pedido de Uruguay también se encontraría con la negativa de Argentina, cuyo gobierno también tiene en sus planes la flexibilización del mercado laboral, y de Paraguay que suele alinearse a Brasil. Además, según evaluó el experto, el contexto político no es favorable a nuestro país luego de las diferencias que surgieron con los otros tres socios por la crisis en Venezuela y por la suba de la tasa consular que está prevista en la Rendición de Cuentas.
Para Bartesaghi, el planteó de Uruguay es “incongruente”, sobre todo teniendo en cuenta que el bloque ni siquiera se puso de acuerdo en cuestiones básicas como no aumentar las trabas no arancelarias.
"El Mercosur no logró tener coordinación macoreconómica. Cada uno maneja su tipo de cambio como le parece. ¿Y vas a pretender tener una armonización de la reforma laboral cuando no la tenemos en inversiones? Es demasiado ambicioso esto que plantea Uruguay", acotó.
EL DEBATE ACÁ
Mientras tanto, el tema ha ido instalándose en el debate interno de nuestro país.
El presidente de la Cámara de Industrias, Washington Corallo anunció, hablando con Telenoche, que la gremial va a estudiar la reforma brasileña para evaluar si es útil en Uruguay aunque adelantó que hay puntos “duros” que la gremial no comparte.
"Vamos a traer un especialista brasileño para hacer un foro abierto para ver qué es lo que quiere hacer Brasil y qué es lo que puede buscar Uruguay para aggiornar una ley que data de 1915″, manifestó.
Más temprano, a través de Twitter, Corallo escribió: "El mundo avanza en temas de legislación laboral, hay que acompañar ese tren entre todos los actores del país: gobierno, trabajadores y empleadores". Y luego agregó: "Seamos conscientes de que en adecuar Uruguay al mundo, va una parte importante del futuro del trabajo de calidad en Uruguay".
Por otra parte, en declaracione a radio Carve opinó que Uruguay "debe aggiornarse", porque de lo contrario "vamos a seguir corriendo el riesgo de perder competitividad en la actual situación y por ende perder la capacidad de seguir recibiendo nuevas inversiones".
El Secretario General del PIT-CNT Marcelo Abdala rechazó inmediatamente algunos de esos comentarios.
"Realmente es jurásico que la Cámara de Industrias del Uruguay este pensando en un momento donde todos nos tenemos que preparar para el trabajo del futuro, para las nuevas tecnologías, partiendo de la base de que la competitividad es un conjunto de dimensiones bastante más complejas que los costos laborales, está el conocimiento, la calidad, la tecnología, la organización del trabajo, es realmente jurásico que plantee tomar como referencia una ley reaccionaria de esta naturaleza", dijo Abdala.
LAS CLAVES
Brevemente…¿de qué se trata la reforma laboral brasileña?
El martes pasado, el Senado brasileño aprobó una legislación laboral ya refrendada en Diputados, que, entre otras cosas, da preeminencia a los acuerdos negociados por sector o empresas sobre la legislación vigente.
Además, la norma autoriza, por ejemplo, la "jornada intermitente", con el pago de salarios sobre una base horaria o por jornada, y no mensual.
También determina el fin de la cotización sindical obligatoria o la división de los períodos de vacaciones en hasta tres segmentos.
Imagen Home: Sede del Mercosur en Montevideo / Crédito: presidencia.gub.uy