Foto: Douanes Francaises / AFP
La subsecretaria de Relaciones Exteriores, Carolina Ache Batlle, negó “rotundamente” ayer “cualquier participación en el trámite de expedición, entrega o envío a Emiratos Árabes Unidos del pasaporte de Sebastián Marset”.
Ayer hubo un nuevo giro en el caso de este narcotraficante, que en noviembre del año pasado recibió un pasaporte uruguayo mientras estaba preso en Dubái por haber ingresado a Emiratos Árabes Unidos con un documento paraguayo falso, y cuando el Ministerio del Interior lo estaba investigando en paralelo, en conjunto con la agencia antidrogas de Estados Unidos.
MVD Noticias, el noticiero de TV Ciudad, reveló que en los días previos a la expedición del pasaporte Ache se reunió con Alejandro Balbi, el abogado de Marset.
La subsecretaria de Relaciones Exteriores admitió esa reunión pero sostuvo que Balbi se limitó a consultar la fecha de salida de la valija diplomática en la que en principio saldría el documento solicitado.
Según MVD Noticias, en sus comunicaciones con el consulado uruguayo en Dubái, Balbi invocó el nombre de Ache para acelerar el trámite. Sobre esto, la vicecanciller aseguró que el abogado “en ningún momento” le pidió que interviniera para agilizar el proceso.
A partir de esta sucesión de trascendidos, y a la espera del resultado de la interpelación a los ministros del Interior y de Relaciones Exteriores, que tendrá lugar el lunes próximo, sin entrar hoy en la discusión de los pormenores de este caso puntual, algunos de los tertulianos proponían esta pregunta: ¿cómo hace Uruguay para cortar de raíz la posibilidad de que el narcotráfico se meta en la política?
La Tertulia de los Jueves con Martín Couto, Cecilia Eguiluz, Daniel Supervielle y Esteban Valenti.
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