Ayer llegaron a Moscú los 35 diplomáticos rusos que fueron expulsados de EEUU, por supuesta injerencia en la elección presidencial.
EEUU los acusa de haber interferido mediante ciberataques con los servidores informáticos y otras entidades del Partido Demócrata.
Al respecto, el presidente ruso, Vladimir Putin, consideró que las medidas "hostiles" de la Administración norteamericana fueron "una provocación dirigida a socavar aún más" las relaciones entre Rusia y EEUU, que "comparten la responsabilidad de preservar la seguridad mundial".
No obstante, Putin anunció que Rusia ni expulsará ni creará "ningún tipo de problema con los diplomáticos estadounidenses".
Este fue uno de los temas tratados en La Mesa Internacional con Nicolás Albertoni, Álvaro Diez de Medina, Camilo López y Leonel Harari.
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