En Brasil el gobierno de Jair Bolsonaro, que asumió el 1 de enero, enfrenta su primera crisis política.
Este lunes, el mandatario destituyó a Gustavo Bebianno, ministro de la Secretaría General de la Presidencia.
Bebianno, presidente del oficialista Partido Social Liberal y ex coordinador de la campaña de Bolsonaro, quedó implicado en una maniobra por la cual se crearon candidatos “fantasma” del PSL, destinados a recibir fondos electorales en los estados de Pernambuco y Minas Gerais en los comicios de octubre.
Bebianno rechazó cualquier responsabilidad en ese caso y afirmó que había conversado varias veces sobre el tema con el presidente en los últimos días. Sin embargo, Carlos Bolsonaro, uno de los hijos del mandatario, que es Concejal por Río de Janeiro, y el propio presidente, desmintieron esos contactos y tildaron a Bebianno de “mentiroso”.
Ayer, sin embargo, la revista Veja publicó los audios de los contactos entre Bebianno y Bolsonaro vía whatsapp, lo que complicó la posición del gobierno.
En las conversaciones Bolsonaro advierte a Bebianno de que no lo trate de involucrar en el escándalo y que la Policía descubrirá “la verdad para que quien deba, pague”. Bebianno en tanto le reprocha al presidente y a su hijo haberlo tildarlo de mentiroso. "No puede atacar a un ministro de esa forma. Ni a mí ni a nadie, eso está mal. ¿Por qué ese odio? ¿Cuál es la relevancia de eso, de llamarme mentiroso en público?", dice Bebianno.
La gestión de la crisis debilitó a Bolsonaro que recibió reproches por haber demorado una semana la destitución de Bebianno. Además, el escándalo estalla justo cuando el gobierno se prepara para presentar la reforma previsional, una de las medidas clave del ejecutivo para bajar el déficit fiscal, y que requerirá una ardua negociación en el Congreso.
La Mesa de los Miércoles con Teresa Herrera, Martín Couto, Sergio Fernández y Guillermo Fossati.
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Foto en Home: Jair Bolsonaro. Crédito: Sergio LIMA / AFP