El viernes el Supremo Tribunal Electoral de Brasil declaró inocente al presidente Michel Temer de haberse beneficiado del abuso de poder y la financiación ilegal durante la última campaña electoral en la que integró la fórmula junto a la ex presidenta Dilma Rousseff.
La absolución, resuelta por cuatro votos contra tres, implicó una victoria para Temer en medio de la crisis política que afecta a Brasil, ya que estaba en juego la continuidad de su mandato. Sin embargo, ahora el presidente debe afrontar una investigación penal en su contra por sobornos y tentativas de obstrucción a la justicia por supuestamente intentar impedir que se avance sobre los escándalos de corrupción que destapó la operación Lava Jato.
El viernes Temer utilizó una prerrogativa constitucional y se negó a testificar en esta investigación. Paralelamente, la revista Veja publicó que el presidente ordenó espiar al juez de la causa para encontrar material comprometedor sobre el magistrado. La Presidencia negó la información. Sin embargo, el Supremo Tribunal Federal emitió un comunicado en el que repudia “cualquier presión” contra los jueces propia de una “dictadura”.
La Mesa de los Lunes con Hoenir Sarthou, Gonzalo Baroni, Miguel Fernández Galeano y Daniel Supervielle.
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Foto en Home: Michel Temer en el Palácio do Planalto, Brasilia, Brasil, 20 de mayo de 2017. Crédito: AFP PHOTO/EVARISTO SA.
