
La Tertulia de los Miércoles con
Lucía Zapata, Miguel Fernández Galeano, Martín Moraes y Elena Grauert

Este lunes 10 de noviembre se dio inicio a la 30ª Conferencia de las Partes (COP30) sobre el Cambio Climático de la ONU, en Belém, una ciudad en el corazón de la Amazonia brasileña. Durante dos semanas, líderes, representantes y organizaciones sociales de todo el mundo se reunirán para debatir los pasos cruciales para enfrentar la crisis climática.
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, tuvo a su cargo la inauguración del evento. En su discurso de apertura, Lula dijo que “es el momento de infligir una nueva derrota a los negacionistas” y cuestionó la ausencia de “los hombres que hacen la guerra” en el evento.
Mandatarios como el presidente estadounidense, Donald Trump, o el presidente chino, Xi Jinping, no asistieron al evento.
Esta conferencia tiene una agenda multitemática y densa, que tendrá tres objetivos principales, según afirmó el presidente de la COP30, André Corrêa do Lago: “Fortalecer el multilateralismo y el régimen climático; conectar el régimen climático con la vida real de las personas y con la economía real; y acelerar la implementación del Acuerdo de París”.
El gobierno uruguayo llega a la COP30 con posición internacional definida en materia climática y ambiental, con énfasis en los temas de energía, justicia climática y transición justa. Entre los temas, se encuentra la definición de la postura oficial en cuanto a la prospección sísmica y la exploración de hidrocarburos en el mar uruguayo, una cuestión que generó debate público por su impacto ambiental.
En su disertación, el presidente Lula Da Silva reafirmó que esta será “la COP de la verdad" y cuestionó: “En la era de la desinformación, los oscurantistas rechazan no sólo la evidencia científica, sino también el progreso del multilateralismo. Controlan algoritmos, siembran odio y propagan el miedo. Atacan instituciones, ciencia y universidades. Es hora de infligir una nueva derrota a los negacionistas”
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