Foto: Mauricio Zina / adhocFOTOS
La designación del ex fiscal Carlos Negro como próximo ministro del Interior generó controversia entre lunes y martes.
El doctor Negro presentó su renuncia a la Fiscalía de Homicidios el lunes de mañana, luego de que el presidente electo, Yamandú Orsi, le propusiera el nombramiento.
En la selección de este profesional para este cargo fue clave, según trascendió, el futuro prosecretario de Presidencia, Jorge Díaz, ex fiscal de corte, que mantiene una relación de amistad con Negro y tendrá un lugar protagónico en la coordinación de las políticas de seguridad ciudadana.
Este vínculo generó desconfianza en algunos dirigentes del Partido Nacional, que señalan a Díaz como el responsable final de algunas filtraciones de información que provinieron de la Fiscalía durante esta administración. En ese sentido, se pronunció por ejemplo, el diputado blanco Rodrigo Goñi.
“Es garantía del ciudadano que los asuntos que se tramitan en un juzgado penal no sean utilizados con fines que no sean estrictamente los judiciales. Nosotros llamamos al fiscal de Corte un parte de veces al Parlamento y fuimos muy críticos. Pero sin dudas que el fiscal conoce la materia y esperemos que esos sucesos que ocurrieron y que nosotros cuestionamos, criticamos y denunciamos en el entorno general de la Fiscalía no se traspasen a su función como ministro”, dijo sobre Negro.
La ex fiscal Gabriela Fossati, que también recibió cuestionamientos por haber renunciado a la Fiscalía para dedicarse a la política, recordó que ella denunció en su momento la presencia de un grupo de fiscales afines a Díaz que llevaban adelante una “caza de brujas” contra ella. “Cuando yo lo dije, lo negaban. El gobierno dejó que así siguiera, fue tibio y nos dejó solos a los que no éramos de la manada. Ellos van por todos”, escribió el lunes en sus redes socialesr.
Pero además de cuestionamientos también hubo elogios. Ayer, el coordinador de Estrategias Focalizadas de Prevención Policial del Delito en el Ministerio del Interior, Diego Sanjurjo, destacó el buen vínculo que Negro tuvo con él y con ministro Nicolás Martinelli, cuando se desempeñaba como fiscal.
“Todo lo que puedo decir de él es positivo”, valoró. “Ha sido un colaborador de lujo desde Fiscalía. Tiene un conocimiento de política criminal y penal que es muy bienvenido”, dijo el jerarca, que apuntó que “es muy importante que quienes lideran la política de seguridad tengan conocimientos previos”.
Ayer Negro y Martinelli coincidieron en el acto de presentación del “Libro Blanco de reforma penitenciaria”. Ambos se abrazaron y el actual ministro le deseó una buena gestión.
La Mesa de Análisis Político con Eduardo Bottinelli, Antonio Cardarello y Mariana Pomiés.
Viene de: El gabinete de Orsi: Equilibrios sectoriales, de género y balance entre técnicos y políticos
