El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, enfrenta una tormenta política por una suma de filtraciones provenientes de la Casa Blanca que dan cuenta de profundas diferencias en la interna del gobierno.
La crisis comenzó hace un par de semanas cuando el diario The New York Times publicó un artículo titulado "Soy parte de la resistencia dentro de la administración Trump". En esa columna, un alto miembro del gobierno narró, bajo anonimato, como él y otros integrantes del staff luchan contra "las peores inclinaciones" de un presidente con un estilo de liderazgo que el autor califica de "mezquino", "impetuoso" e "ineficaz".
Luego de la publicación de esa nota Trump redujo su círculo de confianza en la Casa Blanca y además pidió al fiscal general Jeff Sessions que iniciara una investigación para encontrar al responsable de la filtración.
Para el mandatario, el New York times estuvo al borde de cometer el delito de traición.
(Audio Trump)
La última novela es la columna que publicó el fracasado New York Times escrita por un cobarde anónimo, sin agallas. Nadie sabe quién es. Ellos ponen que es un hombre pero debe ser un disfraz para esconder a una mujer. En aras de la seguridad nacional el New York Times debería publicar el nombre del autor. Los reporteros del New York Times deberían investigar quién es. Eso sería una buena idea.
(Fin audio)
Las filtraciones no pararon ahí. Poco después de la divulgación de ese editorial detonante el periodista Bob Woodward publicó un libro sobre la presidencia de Trump, titulado "Miedo, Trump en la Casa Blanca”, en el que varios funcionarios describen cómo buscan evitar que el mandatario tome decisiones perjudiciales para la economía y la seguridad nacional de Estados Unidos.
La Mesa de Análisis Internacional con Javier Bonilla Saus, Leonel Harari, Susana Mangana y Gustavo Calvo.
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