“Zarif y Kerry merecen el Premio Nóbel de la Paz”
Ese mensaje fue escrito ayer por un emocionado ciudadano iraní en su cuenta de twitter. Alude al Ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Mohamad Javad Zarif, y al Secretario de Estado estadounidense, John Kerry, y refleja el clima con el que se recibió en Teherán la noticia que temprano llamaba la atención de todo el mundo.
El presidente de EEUU, Barack Obama, la anunciaba así, desde la Casa Blanca, a las 8.00 hora uruguaya.
“Hoy, después de dos años de negociaciones, Estados Unidos junto a nuestros socios internacionales, hemos alcanzado algo que décadas de animosidad habían impedido: un acuerdo de largo plazo con Irán que impedirá que ese país desarrolle armas nucleares”.
El acuerdo fue el fruto de negociaciones entre Irán y el llamado grupo 5+1, que integran los países miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU (Estados Unidos, Rusia, China, Francia y Reino Unido) más Alemania.
Entre sus principales disposiciones, establece que el gobierno de Teherán se compromete a reducir dos tercios las centrifugadoras para el enriquecimiento de uranio (que no sólo proveen combustible nuclear para plantas de producción de energía eléctrica, sino que también pueden servir para desarrollar armas atómicas). También se habilita el ingreso de funcionarios de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) para que lleven a cabo las inspecciones que se consideren necesarias. A cambio de estas y otras concesiones, a Irán se le levantarán las sanciones que le había impuesto buena parte de la comunidad internacional y que implicaban un bloqueo comercial y económico.