La tensión en la ciudad fronteriza de Tijuana, en México, ha ido en aumento desde la semana pasada, luego del arribo de unos 5.000 migrantes, que salieron desde Honduras en caravana con la intención de ingresar a Estados Unidos y residir en ese país.
Ayer la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos arrestó a 42 migrantes que habían cruzado ilegalmente la frontera. Los detenidos integraban un grupo de unas 500 personas que intentaron el domingo escalar el muro divisorio. La mayoría de estas personas fue repelida con balas de goma y gases lacrimógenos lanzados desde territorio estadounidense.
El intento de cruce se dio cuando unos mil centroamericanos realizaban una manifestación hacia el puente fronterizo de El Chaparral para exigir a Washington que les permita pedir refugio. Tras el incidente Estados Unidos cerró por unas horas la frontera.
El presidente Donald Trump ha advertido que quienes crucen ilegalmente no tendrán derecho a pedir refugio y ha amenazado con cerrar los más de 3.200 km de frontera con México.
La Mesa de Análisis Internacional con Javier Bonilla Saus, Leonel Harari, Susana Mangana y Gustavo Calvo.
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