El ministro de Trabajo y Seguridad Social, Ernesto Murro, informó ayer en conferencia de prensa que su cartera investiga “con urgencia” la denuncia realizada por un peón rural de Salto, que sostiene que recibió castigos físicos por reclamar el pago de horas extras en una estancia.
El peón, de 54 años, habría sido agredido por el capataz y luego amenazado por el dueño del establecimiento donde trabajaba.
Murro dijo que de comprobarse los hechos tanto a nivel policial, judicial y ante el propio Ministerio, se configurará un “hecho gravísimo” y “no habitual”.
El PIT-CNT repudió la golpiza que denunció el trabajador rural y le ofreció asesoramiento jurídico para que lleve adelante su reclamo.
La Asociación Rural del Uruguay (ARU) también se pronunció sobre el tema. Mediante un comunicado remarcó que repudia “absolutamente y con total severidad, todo acto de violencia en cualquiera de sus formas”, “exhorta al cumplimiento estricto de las normas laborales vigentes y por sobre todo al respeto de la persona del trabajador rural y sus derechos” y declara que vela para que “todas las diferencias o conflictos en el plano laboral que no sean solucionadas por acuerdo de partes, sean dirimidos por las vías y en los ámbitos competentes”.
La Mesa de los Miércoles con Rafael Porzecanski, Felipe Schipani, Gerardo Caetano y Juan Gabito.
[la_mesa type="1″]