Foto: Javier Calvelo/ adhocFOTOS
La Mesa Representativa del PIT-CNT suspendió el miércoles pasado al sindicato policial, Sifpom, en una resolución que se aprobó por 14 votos a favor, 13 en contra y seis abstenciones.
El motivo de la sanción fue la defensa que el gremio ha hecho del accionar policial en operativos que desde la central sindical se evaluaban como excesivos. Según informó el diario El País, quienes votaron por la suspensión argumentaron que el Sifpom es "parte del aparato represor del Estado". La presidenta del sindicato, Patricia Rodríguez, escribió en Twitter: "Que un sindicato sea suspendido por defender sus trabajadores, trabajadores que se demostró en la Justicia su buen accionar, solo puede ser motivo de orgullo, y que entendimos la verdadera esencia de lo que es ser un sindicato, sin banderas políticas, sin ideologías que separen".
No es el primer diferendo que este gremio tiene con el PIT-CNT. De hecho, tampoco apoya la campaña de recolección de firmas pro-referéndum contra la ley de urgente consideración, de la cual el PIT-CNT es un promotor clave.
La resolución fue calificada por el Sifpom como "lamentable" pero también fue criticada por referentes del PIT-CNT. De hecho, su presidente, Fernando Pereira, y su secretario general, Marcelo Abdala, no acompañaron la medida.
Esto nos decía ayer Abdala en entrevista aquí En Perspectiva:
Yo fundamenté y la UMTRA votó contraria a la posición de suspender al sindicato policial. Eso no significa que no tengamos divergencias con los compañeros, pero cuando hay divergencias entre los trabajadores, siempre hay que apelar a la conversación, a provocar síntesis y a que haya movimientos. Y mucho más cuando se trata de una organización sindical que actúa en un medio que es un medio del mundo del trabajo, porque el policía es un trabajador desde mi punto de vista, pero que no tiene la misma cultura sindical, colectiva, de lucha, que otras organizaciones de la industria manufacturera, del sistema financiero.
La Tertulia de los Viernes con Juan Grompone, Marcia Collazo y Gonzalo Pérez del Castillo.
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