La Tertulia de los Miércoles con
Valentina Arlegui, Martín Bueno,
Juan Erosa y Patricia González
El presidente del Codicen, Pablo Caggiani, aclaró este martes los alcances del plan piloto con reconocimiento facial que la ANEP prevé implementar en setiembre en el liceo José Luis Invernizzi, de Piriápolis. Dijo que se trata de una experiencia a prueba, sin costo, y que la ANEP será propietaria del software, lo que garantiza que los datos de los estudiantes no quedarán en manos de privados.
Las críticas llegaron desde varios frentes. El sindicato de profesores Fenapes advirtió que la medida vulnera la privacidad y que no fue discutida en ámbitos bipartitos, mientras que el senador colorado Robert Silva la calificó de “disparate” y “atentado contra la libertad”. En tanto, el núcleo docente del liceo de Piriápolis se declaró en conflicto y amenaza con un paro con ocupación si el plan no se suspende.
En rueda de prensa ayer, Caggiani reconoció que el sistema de escaneo facial es “el más polémico” entre las alternativas tecnológicas que se están ensayando y admitió que a él no le resulta “cómodo”. De todos modos, sostuvo que el objetivo es evaluar si estas herramientas permiten mejorar el control de la asistencia y, en definitiva, reducir el ausentismo.
“Lo que estamos haciendo es probar un conjunto de propuestas tecnológicas que van desde la conexión a través del wifi, una app en el celular, hasta una cámara de reconocimiento facial, para ver si esto efectivamente da cuenta de la asistencia. No nos olvidemos que pueden ser desde seiscientos gurises por turno, a mil doscientos o más. Estos sistemas los estamos probando con técnicos de la ANEP, cuidando los datos de nuestros estudiantes y de nuestros docentes, como ANEP cuida todos los datos, para ver si funciona y, si funciona, qué tipo de medidas se pueden tomar”.
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