La Tertulia de los Miércoles con Leonardo Costa, Pablo Díaz, Juan Erosa y Eleonora Navatta.
El anuncio de que la Biblioteca Nacional cerrará sus puertas al público por tiempo indeterminado generó una polémica entre las actuales y las anteriores autoridades de esa institución.
La decisión fue comunicada este lunes por la directora, Rocío Schiappapietra, fundamentada en lo que calificó como una “crisis edilicia, organizacional y de sentido”. La novedad se conoció en el Día Nacional del Libro, durante el acto oficial por los 209 años de la fundación de la biblioteca.
Schiappapietra explicó que el cierre responde “a una profunda crisis” que atraviesa no solo el edificio central, sino también la concepción misma de la Biblioteca Nacional en la actualidad. "Enfrentamos problemas locativos graves, falta de recursos y una desconexión con las nuevas formas de acceso al conocimiento", declaró la directora, acompañada por el ministro de Educación y Cultura, José Carlos Mahía.
“Esta no es una denuncia, no estamos denunciando nada. Solamente estamos explicitando y transparentando el estado de situación de la Biblioteca Nacional, que, como dije específicamente, esta biblioteca está en crisis. Pero está en crisis en el marco de una crisis mundial de las bibliotecas en el mundo, por el lugar que tiene la lectura hoy en día, el libro y distintos aspectos. Lo que anunciamos hoy es el estado de situación y cómo vamos a seguir trabajando en ese aspecto”.
Entre otras situaciones, Schiappapietra habló de “vaciamiento de personal”, que deriva en un “caos organizacional” y en un “alto nivel de conflictos internos”.
Según la directora, “ya no se contratan empresas para combatir ratas y hongos” y enumeró diversos problemas sanitarios y de inundación de sótanos. Por otro lado, dijo que las salidas de emergencia están obstruidas por “papeles”.
Schiappapietra también se refirió al robo de documentos del poeta Carlos Sabat Ercasty. Según dijo, “el año pasado desaparecieron 11 manuscritos” de ese escritor, que formaban parte del archivo literario. Señaló que el faltante fue detectado la semana pasada.
Los manuscritos faltantes se habían consultado para un libro que la Biblioteca Nacional publicó el año pasado sobre el escritor peruano Juan Parra del Riego.
El exdirector de la Biblioteca Nacional, Valentín Trujillo, que ocupó ese cargo entre 2020 y 2025, respondió con una extensa carta en sus redes sociales en la que calificó la resolución como "lamentable" y "un acto de inoperancia".
En su texto, Trujillo se preguntó si la actual directora “apunta en forma directa” a su gestión y si “acaso hace referencia a gestiones anteriores”, al afirmar que “a nosotros sí nos tocó asumir en un verdadero caos, luego de 15 años de gestión del partido que hoy preside el gobierno que integra la directora”.
En ese sentido, sostuvo que la biblioteca “no tenía memoria de gestión y estaban ausentes múltiples protocolos, además de casi nula acción en el interior”, además de que “había una falta absoluta de rumbo y de liderazgo”.
Según Trujillo, “había enormes problemas locativos y de limpieza, de seguridad, de gestión humana y de presupuesto”. Añadió: “…Y en ningún momento se nos pasó por la mente que la solución fuera cerrar la institución. Tampoco lo sugirieron quienes en ese momento estaban en la oposición, porque hubiera sido un auténtico desatino”, explicó.
El ex director aseguró que, durante su gestión, “a nivel edilicio se realizaron múltiples intervenciones” y “no fue necesario cerrar” la institución “para hacerlo”. También dijo que “a nivel organizacional” se realizaron “muy importantes reformas en unidades”. Además, mencionó avances en la página web oficial y en la seguridad, limpieza y mantenimiento del lugar.
Trujillo dijo que las actuales autoridades recibieron una Biblioteca Nacional “en un estado que permite seguir avanzando en la promoción y descentralización de la cultura”.
Consignó asimismo que, a diferencia de la gestión 2015-2019, “donde hubo transición inexistente, nosotros tuvimos muy cordiales reuniones de transición con las actuales autoridades”.
“El 26 de mayo debería ser un día de fiesta para todos los uruguayos, pero hoy la noticia es el cierre de las puertas de la Biblioteca Nacional, una decisión negativa, que indica ausencia de rumbo y criterio”, sostuvo Trujillo en su carta pública.
Por otro lado, los funcionarios de la biblioteca expresaron sorpresa ante la decisión del cierre la institución. Luigi Bazzano, dirigente de la Asociación de Funcionarios de la Biblioteca Nacional, expresó a Canal 5 que están shockeados por la “abrupta decisión”.
"No hubo comunicación a los trabajadores a través del sindicato. Tampoco hubo ni comunicación ni consulta con los jefes de las diferentes secciones y departamentos que en definitiva hace posible que la biblioteca funcione. Tres meses después de haber asumido nos llama la atención que resuelvan así, de un día para otro, cerrar la biblioteca. Sin saber qué es lo que van a hacer, porque no hay un plan de obras".
En el ámbito político, el diputado colorado Felipe Schippani consideró que la medida es "improvisada y hasta infantil", y pidió convocar a Mahía y a Schiappapietra al Parlamento para pedir explicaciones.
Desde el oficialismo, si bien hubo muestras de apoyo a la decisión, también despertó algunos cuestionamientos. El senador Felipe Carballo, por ejemplo, aseguró que la resolución "duele profundamente" y que "envía un mensaje difícil de entender".
Una nueva decisión del gobierno que genera reacciones de un lado y el otro. ¿Fue adecuado anunciar el cierre en el marco del Día del Libro? ¿Era una medida evitable?