Cientos de vecinos del Prado marcharon este lunes desde las puertas de la Rural hasta la casa del presidente Tabaré Vázquez, en la calle Buschental, reclamando por la inseguridad en esa zona.
La movilización había sido convocada a raíz de la muerte de Mateo Urtiaga, un joven de 20 años que fue asesinado el sábado de madrugada, a media cuadra del domicilio de la familia de Vázquez.
La concentración, que duró cerca de una hora, se llenó de cánticos y aplausos. "¡Ni un hijo más! ¡Ni un hijo más!", gritaban los vecinos.
Las personas movilizadas encendieron velas y llevaron varios carteles. Algunos de ellos decían: "Quiero salir a jugar sin miedo a que me maten", "Estamos desprotegidos. Nos matan todos los días", "Tabaré: estás esperando. ¿Qué? Si no podés, renunciá". Y hubo planteos más radicales todavía. Según la crónica de La Diaria, una señora, a grito pelado, dijo: “No me importan los derechos humanos, todo el malandrinaje tiene que morir. ¿Quién justifica todas estas muertes? Son todos unos malparidos… Los senadores y diputados, a los que nosotros les pagamos, que plebisciten la pena de muerte”, finalizó, ganándose así un aplauso generalizado
La Mesa de los Miércoles con Teresa Herrera, Fernando Scrigna, Fernando Butazzoni y Guillermo Fossati.
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