Hasta el lunes que viene se desarrollará en Nueva York el período de sesiones número 71 de la Asamblea General de las Naciones Unidas. Los ojos del mundo estuvieron puestos allí esta semana ya que más de 130 mandatarios de distintos países se hicieron presentes en el edifico de la ONU.
En la apertura, la nota la dio el Secretario General, Ban Ki Moon quien molesto por el fracaso del alto al fuego en Siria, se alejó de su estilo protocolar y realizó un fuerte discurso contra los mandatarios que “tienen sangre en las manos”.
Los llamados a la paz en este país árabe fueron recurrente en la asamblea. Pero además las distintas potencias involucradas en el conflicto se acusaron mutuamente de no respetar el cese al fuego. En paralelo a la Asamblea, hubo reuniones para intentar volver a la calma en Siria pero sin resultados.
La crisis migratoria y el drama de los refugiados en Europa fue otro de los temas más citados. Los países firmaron una declaración para intentar mejorar la suerte de estas personas, pero no llegaron a fijarse objetivos concretos. Con todo, el presidente de EEUU Barack Obama anunció un compromiso de medio centenar de países para recibir 360.000 refugiados
El otro tema más central fue la ratificación de los acuerdos de París para atacar el cambio climático. En este tema la ONU espera que haya avances ya que estima que se llegará al número de votos necesarios validar el pacto.
¿Cómo ven estas sesiones de la Asamblea General? ¿Sirven para algo o todo lo contrario?
Este fue uno de los temas tratados en La Mesa de los Viernes con Mauricio Rosencof, Gonzalo Pérez del Castillo, Alejandro Abal y Juan Grompone.
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