Después de casi 40 años de abandono, el esqueleto de edificio de la esquina de 18 de Julio y Tacuarembó se convertirá en un conjunto de viviendas de interés social. Algunas de las estructuras se van a utilizar en el nuevo emprendimiento y otros sectores tendrán que demolerse, lo que obligará al traslado de tres murales del artista Dumas Oroño que formaban parte del proyecto original.
Los ojos de Rosario
Miércoles 04.11.2015
Foto: Ilustración digital del proyecto Nostrum Dieciocho, que finalizará una obra abandonada en 1979 ubicada en la esquina de 18 de Julio y Tacuarembó. Crédito: Altius Group.