El fútbol uruguayo mueve más de 300 millones de dólares al año.
Y puede ser un negocio muy atractivo para lavar dinero, según el senador Pedro Bordaberry.
Lo dijo la semana pasada en un congreso de la Asociación Mundial de Compliance, que aboga por las buenas prácticas para identificar los riesgos operativos y legales a los que se enfrentan las organizaciones y establecer mecanismos de prevención y gestión en pro de la transparencia y el cumplimiento de las normas.
¿Qué riesgos tiene el fútbol uruguayo en esta materia? ¿Qué es el compliance? ¿Cuánto ha avanzado el país en esta materia? ¿Qué se está haciendo para mejorar la transparencia en este negocio?
Emiliano Cotelo conversó con Pedro Bordaberry, a partir de su experiencia en la AUF y en Montevideo City Torque.
La semana pasada el senador Pedro Bordaberry expuso sobre transparencia e integridad en las instituciones deportivas y dijo que en el negocio del fútbol profesional “queda mucho por hacer”.
Bordaberry fue uno de los oradores en el primer congreso que realizaba en Uruguay la Asociación Mundial de Compliance, que se centró en “el análisis y la reflexión” sobre “cumplimiento normativo, prevención del lavado de activos y fortalecimiento institucional”.
En su disertación advirtió que el fútbol es un sector de alto riesgo, puso ejemplos de la falta de transparencia que existía en la AUF en 2018 cuando él encabezó la Comisión de Normalización y propuso cambios legales para mejorar los controles y la prevención de incumplimientos normativos o delitos.
