Nació en octubre de 1929 en Berkeley, California. Falleció hace poquito, en Portland, Oregón, en enero de 2018 y en aquel momento, en el inicio de su segunda temporada, Oír con los ojos —Lucía Campanella en particular— la saludó con mucha admiración. La gran escritora estadounidense Ursula K. Le Guin. Los lectores que con tristeza la despidieron y lamentaron la noticia de que ya no habría nuevos libros, sabían sin embargo que quedaba una obra muy vasta y con mucho por explorar.
"Necesitamos escritores que sepan diferenciar entre producir mercancías y practicar un arte…" dice esta singular escritora en su discurso de aceptación de la medalla por su "Distinguida contribución a las letras Americanas", entregada por la National Book Foundation, en 2014.
Hija de una antropóloga y un historiador. Gran estudiosa, feminista, taoísta. Muy crítica de la sociedad industrializada. Maestra de la Sci-fi. Sus largos sueños de otros mundos y otras especies operan como espejos deformantes, como ensayos sobre la condición humana.
En la primera parte de su recuerdo y su saludo, Lucía Campanella presentó a Le Guin con fragmentos de La mano izquierda de la oscuridad, novela de 1969, en nuestro idioma en Ediciones Minotauro.
A continuación, comentó su relato El día antes de la revolución y presentó la versión más política de Ursula K. Le Guin, feminista y exploradora de grandes asuntos morales.
Así propone Editorial Nórdica El día antes de la revolución: "este relato tiene como protagonista a Odo, la líder de la revolución que dio lugar al odonianismo, sociedad anarquista imaginaria.
Ursula K. Le Guin identifica esta sociedad con el anarquismo, que para ella «es la más idealista, y la más interesante de todas las teorías políticas». Pero lo que realmente le interesa a la autora es contar la historia de una mujer; no sólo como ideóloga de la revolución, sino como persona, y así lo manifiesta en su presentación: «Agradecí sumamente cuando Odo apareció de entre las sombras y atravesó el abismo de lo probable pidiendo un relato, no sobre el mundo que construyó, sino sobre sí misma»."
Los libros de Le Guin incesantemente se conectan entre sí: El día antes de la revolución lleva a Los desposeídos – Una utopía ambigua y a Los que se fueron de Omelas -todas obras de 1973-74-; sus historias suceden en otros mundos, sí, pero sólo como espejo deformante y enriquecedor del nuestro: allí están los temas del feminismo, la problemática idea de una sociedad perfecta, Dostoievsky y -Lucía Campanella se atrevió a señalar y explicó por qué- también Honoré de Balzac y su Comédie humaine.
Foto: ursulakleguin.com
Oír con los ojos
Emitido en Radio El Espectador
Marzo de 2018
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